- ¿Cómo que te vas dos meses?
La voz de Carla entró en lo más profundo de mi ser, y más cuando tenía sueño y no estaba para estos gritos.
"Shhh" le dije yo, poniendo mi mano en su boca, sin conseguir tapar su expresión de sorpresa.
- Tampoco es para tanto, Carla.
Dijo Mario desde su sitio, por lo que yo tuve que inclinarme hacia adelante, por encima de la mesa de la clase, para verlo y dedicarle una pequeña sonrisa.
- Gracias, por fin alguien que lo entiende.
Carla negaba, estaba bastante indignada con la noticia que acababa de recibir. Cuando volví a la posición en la que estaba antes. fue Carla la que se inclinó para decirle algo a Egan, que estaba a mi otro lado.
- ¿Y tú? ¿Es que ya no me cuentas nada? Podrías habérmelo dicho.
Egan rodó los ojos al escucharla y le respondió de una forma algo sarcástica.
- Perdón por no cortarte todas las palabras que me dice Avery.
Escuché como Mario, que estaba al otro lado de Carla, se comenzó a reir de sus propios pensamientos.
Carla se limitó a suspirar, parecía que se le había pasado ese pequeño pico de emociones.
- Ya la conoces. Si fuera por ella tendrías que enviarle un mensaje cada vez que lo haces con Avery, es una tóxica.
Muchas veces entre ellos se referían a Carla de esa manera, cosa que a ella no le enfadaba.
No es que fuera tóxica, sino que tenía ciertas actitudes sobre protectoras con ellos dos. Y, claro, los dos que son igual de tontos pues dicen que ella parece su novia tóxica.
- No te preocupes, volveré antes de que te des cuenta.
Dije yo mientras ponía una mano sobre el hombro de Carla.
Las clases acababan en diciembre y yo volvería a mi casa, en Nueva York, durante diciembre y enero. Solamente volvería para el periodo de exámenes finales, después de dos meses.
Si es cierto que me iba a perder dos semanas más de clases, pero no me importaba. No aguantaba más las clases de derecho.
A mi me gustaba estar con ellos, pero las navidades con mi hermano eran maravillosas. Y no solo navidad, tendría más tiempo con él.
Yo le sonreí a Carla, pero antes de poder decir nada más, me abrazó de una forma tan intensa que prácticamente me estaba estrujando.
No pude evitar reírme, a la vez que ella hacía un ruido algo extraño, como una especia de "aaaaaa", como un lamento.
Durante el abrazo podía ver a Mario, que hizo un movimiento con sus dedo índice, dando vueltas cerca de su sien. También me dijo solamente con los labios y sin voz "está loca".
Cuando se separó, ya no estaba tan triste o enfadada como antes.
Ahora se mostraba entusiasta.
Puso sus manos en mis hombros, agarrándome, y parece que se le ocurrió una idea.
- El viernes que viene te haremos una fiesta de despedida. Tú no te preocupes, yo me encargo de todo.
Egan y Mario comenzaron a apoyar su idea, cada vez más motivados proponiendo más ideas para la fiesta.
Carla me sonrió ampliamente y yo me di cuenta de que realmente habían pasado de ser "los amigos de Egan" a ser "mis amigos".
Me sentí afortunada.
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23:22 [COMPLETA]
Romance¿Qué le puede faltar a una persona que tiene todo lo que desea casi al momento? Avery Moore lo tiene claro: Libertad. Carece de la cosa que más necesita y ansía. Ha hecho un pacto con sus padres: Estudiará este año derecho, y el siguiente podrá deja...