- ¿Estás bien? – preguntó Draco colocándose detrás de mi
- ¿Por qué no lo estaría? – respondí sin apartar la mirada de la cuna recién armada
- Te conozco, noto cuando estas distante, cuando estas triste – se inclinó un poco y besó mi hombro después de dejarlo descubierto – Cuando estas enojada, cuando estas eufórica... y ahora misma eres una extraña mezcla de todas esas emociones
Giré en el lugar y miré sus ojos preocupados, solo hacían horas desde que volví de La Madriguera, y todo parecía tan irreal, desde hace años me preguntaba cómo me sentiría después de enfrentarlos, pero nunca me imagine que sería de esta manera.
Nunca pensé sentirme tan vacía.
- Hice algo que no te gustara saber – dije bajando la cabeza – Y cuando te lo cuente, te enojarás
Suavemente colocó una mano en mi mentón y alzó mi rostro.
- Te prometo, que sea lo que sea, lo comprenderé y no me enojaré... cuéntamelo, quedamos en que no habría secretos
- Rompí una de tus reglas... - en mis ojos se acumulaban las lágrimas
- No te entiendo, amor... sé más específica
- Cuando supiste del embarazo, me hiciste prometer que no me sometería a ningún tipo de estrés... y hay lo hice – él se mantuvo callado esperando a que continuara hablando – Hoy fui a casa de mis padres...
Draco endureció sus gestos y vi como sus puños se cerraban.
- ¿Fuiste sola? – de todas las respuestas que esperé que me daría, esta no entraba en los planes
- No, Della me acompañó
- Eso está mejor... ¿y que pasó?
- Les grité, les dije lo que pensaba de cada uno de ellos y ya no hay vuelta atrás, ellos ya tienen una excusa para seguirme odiando
- ¿Y te sigue importando?
Interioricé su pregunta y la verdad era evidente.
- No, ya no me importa no ser suficiente para ellos, solo que duele mucho Draco... duele mucho saber que estás solo
Sin poder evitarlo comencé a llorar contra su pecho, todo era diferente, no me arrepentía de haberles enfrentado, no me importa no tener que volver a verlos en mi vida, pero aun así solo pensaba en lo sola que siempre estuve, en lo poco que les importé, en lo desgraciada que hicieron mi vida durante años.
- ¿Por qué, Draco? – pregunté alterada - ¿Por qué nunca me quisieron? ¿Qué hice? – estaba gritando y me separé de él - ¡Siempre fui buena de niña, nunca me metí en problemas, obedecí todas su ordenes y no rompí las reglas!
- Tu no hiciste nada, mi amor – dijo tomándome de las mejillas tratando de borrar mis lágrimas
- ¡Solo quedé en Slytherin! – grité y él me abrazó y yo golpe su pecho sin apenas fuerzas - ¡Y esa no era razón para marginarme, no cambié!
- Amor, tu siempre los pusiste a ellos por encima de todo... ¿recuerdas?, recuerdas todas las veces que peleamos porque te empeñabas en protegerlos, en ponerlos a ellos por encima de todos...
- No es cierto, Draco... y lo sabes... yo sí los traicioné... - nos miramos a los ojos – Pero no me arrepiento porque eso significó que no me traicioné a mí y tampoco a ti
Draco sujetó mis manos y me volteó haciendo que mi espalda chocara contra su pecho. Colocó una de sus manos abrazándome por los hombros y la otra sobre mi barriga.
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Traidora (Draco Malfoy)
FanfictionSer la oveja negra de la familia no es fácil, algunos pensarán que lo mejor que puede pasar a un adolescentes es no tener que darle explicaciones a sus padres. Pero vivir en una casa donde todos la ignoran no es precisamente lo mejor que le pudo ocu...