Lo Perfecto en lo Imperfecto

Capítulo 52

Prov. Alexa's

A pesar que las personas me veían de manera extraña, que escuché murmullos, solo vi una salida, solo corri hasta donde crei que estaba mi salvavidas. Con todas mis fuerzas corro fuera del instituto, chocando con miles de estudiantes, chocando con él pero no se percató de mi.

Justo al final del estacionamiento encuentro a Dester buscandome desesperadamente. Corro y termino en sus brazos.

—Ya no puedo más...— Logro decir entre tanto llanto.

Siento su mano acariciar mi cabello y susurrando un "todo esta bien". Me dirige en paso lento a un parque cerca del instituto, nos sentamos y me tiende frasco con agua.

Debato en mi mente si debería decirle lo que paso, si debería soltar este peso o simplemente cargar con el sola.

-Dimelo, Alexa. Por favor, dime lo que te agobia.- Dice Dester. Toma un gran suspiro y me mira fijamente- Eres parte importante en mi vida, te convertiste en poco tiempo en mi mejor amiga. Gracias a ti conocí a mi actual novia. No puedo seguir viendo como te destruyes y no hacer nada.

Un silencio penetrante se hace presente. Oigo el viento soplar libremente, mariposas volar por los arbustos y aves volar sobre los árboles. En ese momento envidie a cada uno de ellos porque era lo que yo quería.

Quería ser libre y si seguía guardando esto nunca lo sería.

—Él si me violó— Digo finalmente y veo como su semblante pasa de tranquilidad a rabia.— Mucho antes de que ustedes llegaran, el me destrozó.

-Alexa eso es imposible, estuvimos escuchándolos todo el tiempo.

—El se dio cuenta y por eso actuó— Río amargamente recordando cada palabra que me había dicho.— Que tal si le damos un espectáculo a tu Romeo. Fue lo primero que dijo al darse cuenta que ustedes nos escuchaban.

-Alexa pero no te oímos gritar, por que no pediste ayuda.

—Ya me había rendido. Y no quería hacer sufrir a Lucas. Mordi mis labios durante horas para que no escucharan. Luego de terminar me golpeó tantas veces, reía diciendo que ustedes no llegarían a tiempo.

-Pero llegamos y te salvamos de ese monstruo-Dice sobando mi espalda- Solo rompió un pedacito de ti. Y yo te ayudaré a pegarlo

Río amargamente otra vez.

—Gracias a sus golpes y su violación, tengo una probabilidad del 2% de ser madre. Gracias a su tortura sufro ataques de pánico. Gracias a su maldita existencia yo no puedo vivir la mía.— Sonrio y veo en sus ojos lo que no quise ver nunca en mi vida.— El no me destruyó adentro de esa cabaña, el solo hizo su trabajo para que me destruyera fuera de ese lugar.

Aquel silencio volvió. Dester pasa sus manos por su cabello con desesperación.

—Por eso me fui Dester. Porque no quiero ver lastima en los ojos de las personas que más quiero.— Me pongo de pie y trato de irme pero su mano en mi brazo me detiene.

-Entiendo que quisieras irte, pero no despedirte?. Eso no lo entiendo. Ya te perdí una vez, así que no pienso perderte nuevamente. Te ayudaré a recoger cada uno de los pedazos y los pegaremos juntos. Estamos?.

Mentiria si dijera que no extrañaba a Dester, mentiría si dijera que sentía un cierto alivio que el supiera mi tortura interna. Mentiria si dijera que amaba tenerlo en mi vida.

—Estamos!— Respondo colocándome frente a él.

-Muy bien. Ahora vamos por unos helados de chocolate y unas galletas para subir esos ánimos.- Dice tomando camino a una heladería a nuestra esquina.- Ten en cuenta que siempre estaré para ti para lo que sea. Y ten seguro que nadie más lo sabrá hasta que estés lista.

Al llegar a la heladería sentí el aire fresco del aire acondicionado del local. Era un lugar grande y algunas mesas estaban ocupadas. Nos sentamos en una mesa con vista a la ventana.

Extrañaba pasar una tarde tranquila