Lo Perfecto en lo Imperfecto

Capítulo 38

Prov. Lucas's

Quise alcanzarte, quise ir tras de ti, quise buscarte, quise llegar al aeropuerto pero lo único que pude ver fue tu vuelo irse. Y las miradas de tus padres llena de tristeza y arrepentimiento para mi.

Quisiera decir que lo tomé con tranquilidad pero no fue así. No pude aceptarlo, le pregunte a tus padres donde estabas pero ninguno quiso decirme tu ubicación. Te llamé tantas veces, te dejé tantos mensajes pero ninguno fue respondido.

Luego de varias semana había respetado la decisión que había tomado Alexa, había tratado de avanzar. Ya había recibido mi aceptación a la universidad de Los Angeles para estudiar literatura, ya había conseguido un lugar para mudarme.

Lidia y mi madre insistieron mucho en que no asistiera a esa universidad, que no me alejara de mi familia pero necesitaba olvidar Alexa, necesitaba seguir adelante. Busque manera de buscarlas, le escribí muchas cartas, las envié a la casa de sus padres y espere a que sus padres la enviaran pero nunca lo hicieron.

Hoy tomama mi vuelo a mi nuevo comienzo, faltaba una semana para empezar el semestre pero necesitaba buscar un trabajo.

—Me escriben todos los dias, estamos?— Le digo a mi madre y a Lidia.

-Nosotras somos mayores que tú. Quédate tranquilo, hermanito- Responde Lidia dándome un beso en la mejilla.

-Estaremos bien, cariño. Tu cuídate mucho‐ Dice mi madre besando mi frente‐ No olvides que te amo.

—Las amo.— Digo despidiendome. Camino a mi asiento y por suerte me toca en la ventanilla. Apague mi celular y decidí tomar una buena siesta.

Luego de algunas horas despierto con la sorpresa que ya había llegado a mi destino. Al bajar vi infinidades de personas, algunas familias, algunas parejas y otros amigos. Abrazos, lagrimas y besos se podían ver en el aeropuerto.

Tome el primer taxi que vi y le di la dirección de mi nuevo hogar.  Luego de unos minutos llegué a un gran edificio, subí al quinto piso, mi nuevo hogar estaría aquí en el 5B. Al abrir veo un departamento más que cómodo para mi. Deje mis cosas en el sofá y salí a comprar comida, muy cerca había un supermercado y compre lo necesario para comer este mes.

De camino a casa vi un póster ofreciendo un empleo en una tienda de disco, caminé hasta el lugar y di mis datos al dueño del local y me indicó que comenzaría el lunes. Al llegar a mi puerta, observo que la luz del departamento 5A está encendida, así que tenía vecina o un vecino.

Entre en mi departamento y comencé a desempacar mis cosas, mi ropa y todo lo que había traído conmigo. Luego de arreglar las cosas, comencé a preparar algo para cenar, me faltaba poco para finalizar pero unos toques a mi puerta interrumpieron mi momento de deleitar.

Deje todo en el mesón y camine hacia la puerta para abrirla. Tomo la perilla y abro la puerta y no puedo creer lo que ven mis ojos.

Mierda....