𝓒𝓪𝓼𝓪𝓭𝓸𝓼 𝓹𝓸𝓻 𝓪𝓬𝓬𝓲𝓭𝓮𝓷𝓽𝓮

𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 6 ¿𝕺𝖉𝖎𝖔 𝖒𝖚𝖙𝖚𝖔?

🐾 𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 6 🐾

- ¿Dónde están tus amigos? le preguntó mientras tomamos el mismo elevador que nos trajo hasta el piso 47.

He intentado recordarlos, pero la verdad es que es imposible. Los recuerdos de anoche son tan borrosos que ya empiezo a sospechar que alguien puso algo en mi bebida.

- Kai me envió un mensaje que están en el hotel Bellagio, el restaurante al que iremos está allí. ¿Por qué no le dices a tus amigos que nos encuentren allá? Me propone y es la primera vez que no me da una orden... por lo menos vamos avanzando.

- Está bien.

Al llegar al lobby le envió el mensaje a Hobi a la cual el responde de manera casi de manera automática con un "de acuerdo".

Volvemos a caminar por el lobby del hotel, pero esta vez con un rumbo diferente.

-¡Hey Suho! le dice al hombre que está detrás del escritorio de ayuda al cliente.

- Joven Park. Buenos días. Dice poniéndose de pie.

- Buen día ¿Sabes si Danny Ahn tiene el coche listo? le pregunta.

Volteo sorprendido para verlo... ¿Ha dicho coche? No entiendo... ¡¿porque me ha hecho caminar toda la maldita mañana?

-Sí, está donde siempre. Le explica.

- Gracias, nos vemos... Le dice amablemente y luego me mira. - vamos.

- ¿Porque no usamos el coche esta mañana? le pregunto bastante indignado.

- Porque no quería que los empleados se enterarán de todo. Me dice como si fuera obvio.

- Creo que con pedir que te alcanzaran el coche no se escucharían nada. le comentó.

- Créeme que sí. Dice mientras atravesamos las enormes puertas automáticas de vidrio y salimos al área donde dejan a los huéspedes.

- ¿Cuál es? le pregunto viendo los diferentes autos que hay aquí.

- Ese. Dice señalando una limusina color negra que hay y de verdad pienso que este hombre se divierte haciendo estas cosas.

- ¿A eso le llamas coche tú? Le pregunto sarcásticamente.

- ¿Qué querías que dijera? ¿ven vamos a mí limo? ¿Para qué me sigas llamando egocéntrico?

- ¡Vaya! Veo que te importa, aunque sea un poco lo que pienso. Le digo mientras el hombre de pelo oscuro nos abre la puerta de la limusina, para entrar.

- ¡Sí, claro! Como no te das idea... ¿acaso no te das cuenta? Estoy intentando impresionarte. Le digo con un tono burlón al verle la cara de desconcierto y enojado que tenía, la verdad a mi lobo le encanta verlo así.

- Sí, claro que me doy cuenta... ¿y tú? ¿no te has dado cuenta de que me traes loco? Le responde de la misma manera en la que él lo hizo.

- Eso no seria extraño. Me dice mirándome a través del cristal, con una sonrisita burlona.

Miro alrededor y noto que la parte de atrás de la limosina está completamente aislada de dónde estamos nosotros.

- Sí, me habrás vuelto loco, tan loco que no puedo ni recordar lo que sucedió anoche en aquella cama entre tú y yo... así de malo debes de ser en ella. Le respondo ya harto de su egocentrismo.

- No te preocupes, que al parecer los dos la hemos pasado mal, yo tampoco me acuerdo de nada. Respondo ya harto de todo esto y de él, poniendo cara de desagrado.