🔞༒☬𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 65- 𝕰𝖘𝖙𝖆𝖗 𝖆 𝖙𝖚 𝖑𝖆𝖉𝖔☬༒

1K 86 6
                                        


— Eres hermoso

— Mmm, lo soy

— El mas hermoso del mundo, le susurro

Mis manos palpaban con delicadeza la piel, el abdomen, las curvas de su cadera, viajando hasta su trasero tomándolos suavemente, mi lengua invadiendo su cavidad bucal explorándola, dibujando constelaciones en la superficie y disfrutando de las reacciones sutiles de este, la piel erizada, los pezones erguidos, la respiración acelerada, los suaves gemidos de Jimin me estaban poniendo duro rápidamente, mis labios seguían el recorrido de su cuello dejando pequeñas marcas y siguiendo bajando, al llegar a sus pezones tomo uno entre mi boca, logrando sacar gemidos mas fuerte de esos labios esponjosos de mi esposo, mi lengua jugaba con su tetilla ya erecta mientras que con mi mano descendía hasta su miembro para empezar a masturbarlo deslizándose con facilidad por el líquido preseminal e iniciar la preparación...

Mis dedos en su boca para ser humectados, cuando estuvieron suficiente húmedos y lubricados, los lleve a su entrada, jugando alrededor de esta mientras mi Jimin movía de forma circular sus caderas, arqueando su espalda por el placer, sacándole más gemidos mientras mis dedos eran ingresados en su interior dando suaves embestidas simuladas, haciendo que se excitara y gemía por más.

— Oh, Kook... así...ahh...estimulándome a seguir

Aferrándose a mis hombros, sustituyo mis dedos por mi miembro, metiéndolo lentamente disfrutando de lo apretado que estaba en el interior, espero que Jimin se acostumbre a mi tamaño; mientras le doy besos en sus rojizos labios, segundos después empieza a mover sus caderas señal que ya esta listo, las embestidas se fueron haciendo mas rápidos y profundos dando con el punto dulce de Jimin que era un mar de gemidos, mientras él disfrutaba de las fuertes estocadas yo estaba al límite, me estaba volviéndome y loco solo quería profundizar más y más.

Era tanta la sobre excitación que nos dejamos llevar por la sensación, poco después ambos llegamos al clímax, Jimin soltando su esencia entre ambos abdómenes y yo en su interior, salí lentamente de él para no lastimarlo dejándome caer a su lado envolviendo a la vez en mi brazo.

...

Copas de champán en mi mano, exquisitas fresas bañadas en chocolate, traídas a escondidas de la cocina y su mirada gris sobre mí mirándome con una enorme sonrisa en su rostro. Que combinación tan perfecta pienso y sonrío.

¿No crees que tú y yo deberíamos irnos a dormir? Me pregunta y ríe. Miro el reloj 2 de la mañana.

— No, no lo creo. Digo y dejo la copa de champán sobre la mesita de noche. - Tú eres la jefa. Puedes faltar cuando tú quieras... Le digo sutilmente y levanto la sabana que nos cubre. Tomó su copa inclinó mi cuerpo para dejarla sobre la mesita de noche que está de su lado de la cama. El ríe ante mi acción y muerde su labio volviéndome absolutamente loco.

Esta noche quiero perderme en ti hasta el amanecer... Quiero besarte hasta que mis labios me griten que me detenga. Le digo y voy posicionando mi cuerpo sobre el suyo.

Kookie recién hoy es que me he dejado de cuidar, pero eso no significa que quedaré embarazo. Me dice riéndose y sólo puedo reír a su par.

Acerco mis labios a su rostro y voy besándolo lentamente.

¿Tú piensas que quiero hacerte el amor toda la noche por el simple hecho de que quedes embarazado? Le preguntó a media voz.

— No sé dime tú...

Te explicaré unas cositas vida mía. Le digo y acomodo su cabello a un costado. - Tú no te das una idea de lo hermoso que eres, de lo enamorado que me tienes, y de cómo todo mi cuerpo te reclama cada instante; me has hecho un adicto a ti... Además, cariño, no te lo he podido decir antes... Digo, pero no me atrevo a terminar la frase.

𝓒𝓪𝓼𝓪𝓭𝓸𝓼 𝓹𝓸𝓻 𝓪𝓬𝓬𝓲𝓭𝓮𝓷𝓽𝓮Donde viven las historias. Descúbrelo ahora