2.18 - My Blood

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Narra Heaven

Sueno mi nariz mientras acomodaba el cardigan de la rizada, fue muy vailente al soportar todas esas mordidas de los raspadores. Intentaba no pensar en el dolor de perder a Beatrix, la culpabilidad de no poder estar para salvarla y el no afectarme por los recuerdos de Edward cuando murió en mis brazos.

Mi amiga hada de la mente había recuperado sus poderes, no quería que sufriera sintiendo todo lo mal que la estaba pasando, tuve que obligarme a estar bien para poder ayudar con las tres hadas que obtuvieron su transformación y puedo imaginar al hada de hielo orgulloso de ellas.

- Lo lamento mucho, Heaven - dice Flora llamando mi atención, niego con la cabeza y la abrazo por los hombros haciendo que su cabeza quede en mi hombro.

- Estaré bien, Chispita esta con Edward ahora - digo tratando de sonreír, toma mi mano y da un ligero apretón.

- Todo mejorara, cielito - dice sonriéndome de lado, asiento y mis ojos se cristalizan.

Me estaba conteniendo mucho con mis emociones por la hada de la mente, no quería que sintiera todo mi dolor tan fuerte de golpe y incluso pensaba en que dormir no es una muy buena idea.

- Bien, ¿quien necesita almohadas? - dice Bloom acercándose con unas almohadas, le sonrió de lado y la princesa la mira.

- Yo, por favor - dice Terra alzando la mano, la pelirroja le sonríe de lado y le extiende la almohada.

- Toma

- Gracias 

- ¿Es una de las mías? - dice Stella con el ceño fruncido, miro a la rizada y soltamos una risotada.

Pues, las tres hadas que habían logrado su transformación, estaban muy agotadas con todo ese poder y estaban pasando por el mismo agotamiento que Bloom tuvo el año pasado.

- Necesito buenas almohadas - dice la hada de la tierra inocente, niego burlona y carraspeo cuando veo a la hada de la mente entrar.

- Vacié todas las maquinas expendedoras - dice Musa acercándose, se sienta a mi lado y sus ojos brillan para luego abrazarme con fuerza besando sonoramente mi mejilla.

- ¿Por que me duele todo? - dice la hada de la tierra quejándose, alzo mis cejas y estas con mis winx era lo que mantenía tranquila y en paz - Me pregunto si es por volar - continuo frunciendo el ceño, como un poco del chocolate que me ofrece la hada de la mente y se mantiene abrazándome - Debe ser eso, ¿no? ¿A alguien mas le duele todo?

- No necesitamos todo esto - dice Aisha arrugando la nariz, niego un tanto divertida y oigo que tocan a la puerta

- Recupere mi magia, así que siento su dolor - dice la hada de la mente mirándola incrédula, aprieto los labios y bajo la cabeza mientras me levanto a ver de quien se tratara - Incluso si no dicen nada - continuo dándonos una mirada a la rizada y a mi, aprieta mi mano - Mientras mas quieras alejarte de mi, aun puedo sentirlo, sentí todo ese dolor de golpe afuera y ahora no es tan fuerte - continuo colocando un mechón de cabello tras mi oreja, muerdo mi labio y besa mi frente - Nos tienes para apoyarte, Heaven, ellos están en un lugar mejor y no es tu culpa, no siempre podemos salvarlos a todos - finaliza mirándome a los ojos, una lagrima resbala y me abraza.

- Soy buena con el dolor - dice la rizada rápidamente, tomo de mi café y suspiro.

- Eres buena en todo - dice su prima sonriendole, la abrazo y beso su frente.

- Esa es mi Florecita, te quiero - digo picando su nariz, me sonríe y las cosas entre nosotras no se sentían para nada tensas.

Eramos fuertes, mucho mas.

Bitter Love (Fate: The Winx Saga)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora