Narra Stella
Suelto un suspiro pesado mientras dejaba el cementerio después de dejar flores tanto para Beatrix como para Edward, si que extrañaba tanto a esas dos hadas y que tenían tanto que dar, que lo que lo hacia peor era que el mismo Sebastian había sido quien los asesino, el lado bueno fue que con las chicas lo hicimos polvo, Heaven lo ataco con flechas y lo hizo ahogarse con su propia sangre cuando clavo su daga en su cuello.
Ya no estaba para hacer daño.
Iba tan sumida en mis pensamientos que termine soltando un chillido del susto cuando el especialista que últimamente estaba muy metido en mi cabeza, aprecio frente a mi y ahora se burlaba de mi.
- ¡¿Que pasa contigo?! - digo con una mano en mi pecho, suelta una risa y le doy un manotazo en el pecho que a penas le duele.
- Lo siento - dice Brandon riendo, le sonrió falsamente y se carcajea - No quería asustarte, pero estabas muy sumida en tus pensamientos y no me prestabas atención - continua alzando las manos en son de paz, ruedo los ojos y lo rodeo para moverme a la escuela - ¡Princesa, espera! - finaliza trotando tras de mi, ignoro el cosquilleo que sentí con la mención de mi titulo y de el no me desagradaba.
- Eres un idiota, ¿acaso corres todos los días? - digo sonriendole falsamente, se coloca a mi lado y se encoje de hombros.
- Digamos que hoy Silva, Elijah y Grace no estuvieron muy presentes en los entrenamientos y salimos de esa responsabilidad temprano - dice acomodando un poco su cabello húmedo por sudor, evito tragar saliva sonoramente al ver como las venas de los músculos de sus brazos se marcan y también me traían recuerdo de aquella salida en el bar.
Admito que divertí bastante en esa salida con mis amigas, aunque Terra fue la excepción que estuvo apartada bebiendo cerveza. En comparación al año pasado se sintió bien estar libre, antes no me divertía tanto por el siempre pensar en el que diría mi madre si me viera en esas situaciones y esta vez había escogido el divertirme, beber, bailar y reír.
Aunque también me permití socializar un poco mas con Brandon, que a mi parecer es bastante amante de la diversión, gentil y con espíritu de hombre amable. En varias ocasiones bailamos, reímos y nos permitimos conocernos.
- ¿Todavía siguen reunidos? - digo rápidamente frunciendo el ceño, asiente y comenzaba a preocuparme por ello.
- Las hadas de tierra no han podido entrar aun al invernadero, la reunión se ha extendido mas de lo que pensó que duraría - dice colocando sus manos en su espalda, asiento y no quería preocuparme por ello pero ya a estas alturas era imposible no hacerlo.
Hemos tenido dos años llenos de locura, que no han hecho mas que traernos traumas, dolor y perdidas. Este año ha estado tan tranquilo que no quiero ni pensar en problemas de luchar contra monstruos y brujos de sangre, todos estábamos tan distraídos disfrutando de ser solo adolescentes aprendiendo a controlar su magia, al igual que los especialistas a aprender a luchar.
- Solo esperemos que no sea un problema - digo por lo bajo, logra escucharme y aprieta los labios.
- Vas mucho al cementerio - dice cambiando de tema, lo miro seria y miro a otro lado.
- Perdí a dos amigos el año pasado por Sebastian Valtor, no hay mucho que decir - digo sin mirarlo, siento sus ojos sobre mi y carraspea.
- Lo lamento, no tenia idea y no quise incomodarte
- No lo hiciste, Brandon
Nuestros ojos chocan y toma mi mano antes de dejar un beso en ella haciendo que sienta mis mejillas arder mientras lucho como puedo con mi cabello para que oculte mis mejillas. Mi corazón se acelero tanto que lo sentía como si quiera salir disparado de mi pecho, ni por Sky había experimentado esto o bueno, no de la manera tan intensa como la estaba sintiendo ahora, pero con todo lo que ha pasado, no creía que fuera posible y mas cuando se que mi madre jamas lo aprobaría.
ESTÁS LEYENDO
Bitter Love (Fate: The Winx Saga)
Fanfiction"Lo siento ardiendo en mis venas, amándote a través del dolor. Cariño, creo que me estoy volviendo un poco loca, oh" Sky y Heaven ambos mellizos hijos del fallecido Andreas y criados por su mejor amigo Silva. Ambos entrenaban para ser los mejores e...