*-¿Tenemos permiso para eso?Me preguntas mientras miras la pequeña fogata que he prendido delante de mí.*- Tranquilo la he prendido sobre uno de los platos de metal, no voy a quemar el bosque, pero una acampada sin una fogata no es una acampada.Gruñes por lo bajo....*-¿No iras a decirme que has estado quemando nubes?Tengo que ponerme la mano sobre la boca para evitar que mi risotada despierte a alguno de los otros.Niego con la cabeza mientras te miro a los ojos. Algo ha cambiado entre nosotros en apenas un segundo.*-Dame esta noche- Tus palabras fueron apenas un susurro, pero parecían gritos en mis oídos.Trague saliva y despacio voltee a mirar el fuego, intentando encontrar una respuesta.Mi mano repartió arena sobre el fuego que se fue apagando lentamente.Al mirarte vi que habías avanzado dos pasos.*-Nos oirán.Extendiste la mano en mi dirección al tiempo que negabas con la cabeza.La acepte y sonreíste al tiempo que tirabas de mi para hacerme chocar contra tu cuerpo, un juego amistoso a ojos de cualquiera, pero que me hacia consciente de cuan en tensión estabas.Caminamos uno al lado del otro, disfrutando del paisaje campestre en pleno verano.La noche nos envuelve, tu caminar es seguro, en cambio yo piso con inseguridad. Soy un poco torpe y no será la primera vez que caigo de rodillas ese día. Me agarras de la mano y caminas medio paso delante de mí, para evitarme tropiezos.No sabemos dónde vamos, encontraremos el sitio propicio cuando lo veamos, siempre es así.Un saliente en las rocas, da la idea de una gruta, resguardado de la vista.*—No hay animales salvajes ¿verdad?-No es miedo a los animales precisamente lo que siento*—No, aparte de mi no hay más. Y si no quieres que me convierta en un lobo hambriento será mejor que te quites la ropa. Si es que a eso puede llamársele así, pero la necesitaras para volver.Siento vergüenza, no tengo el tipo de modelo, todo lo contrario.La camiseta sale despacio por lo alto de la cabeza y deja ver la parte superior del bikini, mientras que el pantaloncito corto cae dejando ver la otra parte del mismo...*-Mírame a la cara mientras te quitas el sostén quiero verte entera, al tiempo que admiro tus pechos, me han estado volviendo loco todo el día.Saco los dos triángulos por encima de la cabeza moviendo el cabello y al segundo estas frente a mí, besas mi cabeza. Luego tu boca busca el hueco que se forma entre mi hombro y mi cara, besas y lames, provocando miles de escalofríos que hacen que mis pezones se pongan duros y crezcan contra las palmas de tus manos que están hay dispuestas pero sin tocar mis senos. Cuando por fin las cierras sobre ellos me das un placer exquisito, al tiempo que te a rodillas frente a mí y me haces abrir las piernas, apartando con un dedo el pedazo de tela insinuando tu lengua.*-Estas caliente por mi lo noto aun sin tocarte.Tus palabras en mi sexo hacen que me moje instantáneamente, tanto o más que si me hubieras lamido.....es increíble lo que consigues siempre con unas simples palabras.Tu lengua, esa pequeña maestra, juega a ser espeleóloga, entrando lamiendo y escarbando, haciendo que mi respiración se torne pesada y rápida, hace que me pierda en mis propios gemidos y me tenga que sujetar a tu cabeza atrayéndote más, hasta que sientes la tensión de mis muslos contra tu rosto, mi gemido ahogado y el cambio de sabor .Solo entonces te separas y me miras sonriendo.*-Tan sabrosa como siempre.Sabes que ese comentario solo tendrá como respuesta un enrojecimiento general de mi piel.Cambias de postura poniéndote detrás de mí, para ponerte semi-sentado contra la pared de piedra que aun está caliente por el sol diurno, aunque antes de hacerlo has soltado la presilla de tu pantalón y bajado estos lo suficiente como para dejar salir tu masculinidad.Tirando de mis caderas me haces retroceder e inclinarme lo necesario para terminar sobre ti, de forma que solo necesitas un leve tirón para empalarme sobre tu verga.*-Cabálgame...Esa pequeña y concisa orden hace que de nuevo este dispuesta a seguirte a donde sea, asi que mis movimientos son como si estuviera domando a un potro salvaje, mientras que tus manos en mis caderas controlan realmente la situación.Arriba y abajo mientras te oigo soltar aire con cada envestida...Contracciones sobre tu pene mientras me obligas a estar parada sobre ti en un intento de negación de tu placer y mientras juegas con los pezones entre tus dedos, cuando intento pasar de las contracciones a un leve movimiento.*-Estate quieta -Ordenas entre-dientes.Pero eso es darme una pista de lo cerca que estas de correrte dentro de mí, por lo que despacio muevo el trasero en redondo.Tus dientes marcan mi hombro, pero no me rindo, siento un temblor que te viene desde las puntas de los pies, recorriéndote las piernas, así que vuelvo a moverme mientras me aprietas los pechos.*- No...para...Si estuvieras frente a mi verías en mi sonrisa de picara que no parare hasta que me hayas llenado de ti.Así que despacio vuelvo a desobedecerte y sigo moviéndome...Tu semen me quema según entra en mi, está ardiendo, pero eso no hace que deje de moverme, lo haces tú al juntar las piernas y levantar mis pies del suelo, teniendo que mantener mi estabilidad, abriendo mas las piernas, mientras que tus dedos me asaltan y tomas de nuevo mi sexo, sin descanso hasta que me haces correrme contigo dentro.Minutos después me dejas desacoplar y mis ingles reclaman doloridas...*-Vayamos al lago...Tu tono y forma de mirarme, me hacen sospechar que no quieres ir solamente para limpiarnos en el agua......
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Cuentos y Relatos Eroticos II
RomancePequeñas historias que empiezan y acaban en cada pagina