¿Quien se queda con el oso?

18. ➵ Con esta me cancelan

⟦18⟧

➵ Con esta me cancelan

—EMILY—
—BROWNBEAR—

—But she caught me on the counter
It wasn't me
Saw me bangin' on the sofa
It wasn't me
I even had her in the shower
It wasn't me
She even caught me on camera
It wasn't me
She saw the marks on my shoulder
It wasn't me
Heard the words that I told her
It wasn't me
Heard the scream get louder
It wasn't me
She stayed until it was over—Cantábamos una canción de Shaggy mientras que los faros de la calle nos acompañaban.

Las luces de las calles iluminando nuestro camino en un típico viernes por la noche.
Armond y yo llevábamos tanto tiempo siendo amigos, y yo nunca he sentido que la magia de nuestra amistad se haya perdido.

O quizás sea por qué prácticamente vivo con él.

En fin, habíamos llegado al bar. No espera menos, era de estilo mexicano, no era tan extravagante pero se ve que le pagan bien al de la decoración. Nos sentamos en un sillón con una mesa al frente, mientras que a lo lejos, en una de las pantallas sobre la barra mirabamos el menú.

—¿Por qué querías venir a cenar aquí? —Le pregunté, viendo el lugar.

—¿Quieres la versión básica o la amorosa?

—Ambas.

Tomó mis manos de manera dramática y me miró a los ojos como en una película cliché.

—No quería estar solo, y lo sabes, eres mi mejor amiga, merecemos salir juntos de vez en cuando —Soltó mis manos y miró hacia otro lado—. Eso, y que Grindr no me está funcionando del todo.

Plan con maña, típico de los acuario.

—¿De qué tienes ganas está noche? —Mire las opciones de comida. La verdad es que se me antojaban unos tacos de asada.

—Sabes que no soy exigente con los chicos. Aunque, si encuentro una chica que llame mi atención será mi primera opción.

—Ugh, eso sonó tan hetero que dio asco —hice una mueca—. Hablaba de la comida, baboso.

—Oh, comida. Sí, cualquier cosa está bien.

De entrada nos dieron unos nachos, con una bebida en un cantarito, no supe a ciencia cierta que era, pero al final de cada sorbo que le daba podía distinguir cierto gusto a tequila. Armond saco un cigarro, me ofreció uno y yo se lo acepte. Prendió el suyo, me dio el encendedor, apreté la pastilla y lo encendí. Mientras esperábamos nuestras órdenes de comida me dispuse a publicar en historia de Instagram las fotos que me había tomado en el espejo del departamento.

Mensajes y reacciones no se hicieron esperar. Aunque una de esas tanta notificaciones me hizo sonreir.

[Appleeeeaveryyy_]
😍
¿Todo eso me estoy comiendo? ;)

Un cosquilleo me subió por la nuca, sigilosamente fue bajando hasta llegar a mi vientre, recorriendo mi espina dorsal, hasta llenarme por completo. ¿Estará sola esta noche? Quizás pueda escaparme de Armond e ir por ella. Mi mejor amigo se pegó a mí, leyendo el mensaje. Yo aparté el celular de su vista.