"El chico de al frente" •Lee Know•

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- Gracias -le agradecí al chico con una leve reverencia de cabeza y el hizo lo mismo.

Salí de la farmacia juntó a Misuk.

- ¿Enserio le compraste medicamento y esas cosas para qué se curé los golpes? -preguntó y asinti- enserio qué creo que está gustando ese chico.

- No me gusta -le afirmé- pero quiero saber qué es lo que oculta ese chico, talvez sea una cicatriz, un enorme lunar o algo por el estilo -dije con entusiasmo.

- ¿Y si no tiene nada? Talvez solo lo usé porqué le gusta -dijo encoguiendose de hombros.

- Igual hay algo qué oculta, tu también escuchaste a la chica "nunca se lo quita" -dije haciendo comillas con mis dos manos mientras qué en una llevaba la bolsa- descubriré qué oculta antes de qué nos volvamos a mudar, ya lo verás -le afirmé.

No sé qué tiene ese chico pero el tiene algo de misterio y es desolado, eso me gusta mucho.

Llegamos a la casa donde vivía el tal Min-ho, osea al frente de la de nosotros. Tocamos el timbre y la señora de la casa no tardó en salir.

- Oh, pequeñas qué bueno verlas ¿Quieren entrar? Hay galletas -dijo con una sonrisa.

Misuk estaba apunto de aceptar ya que sabía que no podía decirle no a las galletas pero me adelante tomándola del brazos.

- Será otro día -me adelanté a decir y Misuk me miró con el ceño fruncido- vinimos a traerle esto a Min-ho ¿Cierto? ¿Haci se llama su hijo? -pregunté haciendo la confundida.

- ¿Min-ho? Oh Lee Know -dijo con una gran sonrisa y nosotras la miramos confundida- si, se llama Min-ho solo qué preferimos decirle Lee Know -nos explicó- ¿Pero que es? -preguntó viendo la bolsa que le había entregado hace poco.

- Peleó en la escuela y ví que estaba lastimado, espero qué se sienta bien -dije y ella me miró enternecida.

- Misuk linda ¿Podrías dejarnos solas? Adentro hay galletas en la sala -dijo y Misuk entro como perro por su casa rápidamente- el director me dijo qué defendiste a Lee Know, dijiste que no fue su culpa y te agradezco eso. Es la primera vez que alguien hace eso por mi niño.

- No hay problema, ví lo qué sucedió y me parecía injusto qué le echarán toda la culpa a él. Eso es todo -dije.

- Me alegra que seas tan buena con mi hijo, pero ya debes de saber cómo es -dijo.

- Es reservado y callado, eso me gusta -dije y ella me miró sorprendida- no es como todos esos chicos que están de fiestas y esas cosas, es callado, parece desinteresado puede que eso le parezca raro a los demás pero a mí no me parece eso -dije terminando y ella ahora me miró con ganas de llorar- ¿Dije algo malo? -le pregunté confundida.

Ella tomó mis manos entré las suyas dejandome aún más confundida que antes.

- No te alejes de el por favor -dijo y abrí mis ojos a más no poder.

Ok, su hijo no es el único raro.

- Ah, es hora de irnos tenemos qué estudiar y Misuk no le gusta hacerlo haci que tengo que obligarla -dije y como si hubiera llamado a Misuk está apareció mientras comía una galleta.

- Por favor vuelvan para comer galletas otro día -dijo y ambas asintimos.

- Lo haremos -dijimos al unisono y ambas empezamos a caminar a casa.

- Sus galletas son deliciosas -dijo.

- ¿No viste a su hijo? -le pregunté y ella negó.

- Talvez esté en su habitación -dijo encoguiendose de hombros y asinti.

Talvez tenga razón.

[...]

Estaba sentada en el suelo de mi habitación con varios libros a mi alrededor intentando estudiar pero no podía dejar de pensar en lo qué ocultaba ese tal Min-ho o Lee Know como se llamé.

- ¿Talvez tenga una enorme cicatriz? -dije pasando mi dedo índice cerca de una de mis mejillas hasta a un extremo de mi labio con exageración.

- ¿O un enorme lunar? -dije haciendo un circuito con mis manos extremadamente grande.

- ¿O tiene lo dientes chuecos o le falta uno? -dije tocando mis dientes.

- O talvez solo es un chico normal al cual le gusta usar cubrebocas -miré rápidamente detrás de mí y ví a Misuk a un lado de la puerta viéndome- enserio estoy pensando que estás obsesionada con ese chico.

- Me gustan más mis teorías y no estoy obsesionada con el -dije viéndola mal.

[...]

Le di un último sorbo a mi café y baje empeze a bajar las escaleras hasta la cocina donde estaba mi madre con una bata para dormir.

- ¿Ya vas a dormir? -le pregunté volviendo a llenar mi taza.

- Si, ya los demás están despiertos solo quedas tú -dijo- ¿A qué hora te irás a dormir? -preguntó.

- No lo sé, en un rato solo tengo qué estudiar un poco más -dije saliendo de la cocina- buenas noches.

- Buenas noches -la escuché.

Gran mentira de estar estudiando.

Ya había estudiado y ya sabía todo lo único que estaba haciendo era estar sentada en frente de la ventana viendo hacia la habitación de mi vecino la cual aún tenía la luz encendida.

¿Acaso no duerme?

¿Es un búho o que?

Ya son pasada de las 12 PM.

En verdad creo que estoy empezando a obsesionarme pero tengo que descubrir qué oculta este chico.

Estuve toda la noche hasta limpiando mi habitación por horas y aún nada que se ha dormido este chico.

¿Talvez duerma con la luz encendida?

Nah, eso sí sería en verdad raro.

[...]

- ¡Demonios! -grite al ver que ya había amanecido.

Solo cerré mis ojos y ahora resuelta qué los abro y ¡Pam! Ya amaneció y aún estaba en la vendida ventana.

- ¡Misuk! -ella entró a la habitación rápidamente.

- ¿Qué sucede? -preguntó alarmada.

- Hoy hablaré directamente con ese chico -dije entrecerrados mis ojos con decisión.

Hoy no te libraras de mi chico cubrebocas.

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