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- ¿Dónde está Lee Know? -preguntó Misuk apenas entre a la cocina.

- Buenos días también para ti, hermanita -tome el cereal junto a la leche para empezar a echarlo en una taza- se fue temprano porque tenía cita con la psicóloga y tenía que hablar con sus padres.

- No sabía que iba a un psicólogo -casi solté la taza al escuchar la voz de Baek detrás de mi, me veía con los brazos cruzados y el ceño fruncido.

- A duras penas sabes su nombre -replicó Misuk mientras yo me sentaba en uno de los taburetes de la cocina a su lado, Baek estaba justo frente a nosotras también sentado.

- ¿Y que hacía anoche aquí? -preguntó ignorando la por completo.

- Que no hacía -soltó está por lo bajó.

No hicimos nada.

Osea si había ganas pero no.

- Tuvo un problema en su casa -dije con simpleza, no contaría de más.

- ¿Tu y el... -dejo la pregunta en el aire sin dejar de verme fijamente.

- ¿Qué? -pregunté empezando a comer.

- ¿Salen? -preguntó.

- Follan -dijo Misuk ganándose una mala mirada de los dos- bueno eso también lo hacen, pero tampoco conozco el contexto de la relación.

Tiene un buen argumento.

Tenia que darle la razón a Misuk.
No habíamos acordado nada pero digamos que no teníamos que tener una etiqueta como tal, porque ambos nos tratamos como novios, nos besamos, nos acostamos, y todo eso, también ambos nos hemos presentado como el novio del otro sin molestar al otro.

No somos amigos, eso lo sabemos. Pero tampoco somos novios, simplemente somos algo.

- No les interesa -los corté, sabía que después no se detendrían.

- Pero te gusta ¿No? -preguntó el.

No lo negué.

Incluso le dije que lo quería, pero eso no era algo que fuera a admitir frente a ellos, son cosas que se quedarían entre él y yo.

- Bien, su relación -hizo comillas molestando- no me agrada del todo pero es asunto tuyo, ya me tengo que ir.

No me dejó replicar.

Simplemente nos beso a cada una en la frente antes de desaparecer jugando con las llaves de su auto hasta que lo escuchamos salir de la casa.

- Sin etiquetas ¿Eh? -dije ella y estuve por lanzarle el cereal que aún me quedaba- no diré nada, así empecé yo también con WooJin.

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- ¿Cómo te ha estado yendo en la escuela? -eso fue lo primero que escuché apenas atendí la llamada.

- Yo estoy muy bien, Hee-Jin.

- ¡Hani!

- Bien mamá, me ha estado yendo muy bien.

Ni tu te la creés.

Mire a ambos lados de la calle antes de cruzar mientras acomodaba mi mochila con una mano y con la otra llevaba el celular.

- ¿Dónde estás? -preguntó.

¿Soy yo o se está volviendo muy controladora de nuevo?

Espero que no volvamos a esa época.

"El chico de al frente" •Lee Know•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora