"El chico de al frente" •Lee Know•

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Vale, estaba sorprendida, mucho a decir verdad.

Estaba tan quita que incluso había dejado de respirar, tuve que tomar una respiración profunda mientras empezaba a ver mejor al individuo que tenía enfrente viéndolo de pies a cabeza, no bromeó.

Llevaba unos zapatos de vestir color negro que incluso lo hacía ver más alto, un pantalón de vestir también negro, su cabeza de botones blanca por debajo de una chaqueta negra no abrochada, los primeros dos botones de su camisa blanca desabrochados.

Sin duda alguna se ve bastante bien en traje.

Siguiendo con mi recorrido hacia su rostro quedé aún más impresionada. Su cabello lo tenía despeinado pero de una manera qué lo hacía verse bien, sus ojos resaltaban aún más dejando ver ese color marrón oscuro, su nariz no era del todo recta como la mayoría la tiene, algo respingona y delgada de un buen modo que quedará perfecta con su cara, mandíbula marcada, sus mejillas se veían tan suaves y con ganas de apretarlas, sus labios. Oh dios sus labios. Su labio superior era delgado pero algo relleno, su inferior si era un poco más lleno, de un color rosado que daba la impresión como si le hubiera hechado algún brillo. Pude fijarme con algo de descaro como sus labios específica en medio de ellos en el lado derecho por la mejilla tenía un corte, no era pequeño pero tampoco tan grande, tomaba ese extremo en un corte talvez de unos 5 o 7 centímetros dónde estaba la cicatriz, se veía como una sonrisa.

Era como la del Guasón, pues el guason tenía labial Lee Know tenía la cicatriz, me recordaba bastante a la cicatriz de Iguro Obanai de Kimetsu no Yaiba. Me di una cachetada mental, talvez debería de dejar de ver tanto anime.

No entendí porque se ocultaba en todo caso, si era una cicatriz algo grande pero no tenía porqué ocultarla, yo también tenía una y eso no me impedía usar traje de baños o ropa que la mostrará, aunque talvez al igual que al principio tambien evitaba mostrarla a toda costa.

Pude ver cómo la comisura de sus labios se elevaron en una sonrisa que me dejó fuera de órbita por unos segundos al verlo tan lindo con esa sonrisa.

Cuando dió un paso así adelante no pude evitar dar un paso atrás cochando con el retrete, no tenía miedo, no, pero sentía un gran pánico con solo verlo por fin sin cubrebocas, el al parecer lo captó rápidamente porqué la sonrisa en su rostro solo aumentó casi ahogando una risa seguramente burlona.

- ¿Qué pasa, bonita? -preguntó ladeando su cabeza.

- Estoy demasiado impresionada -admití en voz algo haciendo reír y casi colapsó al ver sus dientes blancos por primera vez.

- ¿Te gusta como me veo? -no pude evitar sonreír levemente al ver cómo cambio tan rápido, ahora había preguntado en un tono bajo bastante sonrojado, sus mejillas daban esa impresión de gritar que las apretaran. Había pasado de ser un chico algo coqueto a un chico adorable en segundos.

- Mucho -respondí a su pregunta ahora yo acercándome a el haciendo que el empezará a caminar de espaldas hasta dar contra el lavamanos.

- ¿No te da miedo? -preguntó viendo a los lados al ver que no tenía a dónde escapar, puse mis manos a los costados del lavamanos acorralandolo.

- ¿Miedo? -pregunté ladeando la cabeza- ¿Porque me daría miedo? Te ves adorable, mucho -dio un pequeño salto que me hizo sonreír aún más cuándo me acerque a él- pero quiero saber algo -el me miró atentamente- ¿Sigues besando igual de bien a la luz del día sin esa cosa puesta? -el rio rojo como tómate antes de que me pusiera de puntas para unir mis labios contra los de el.

Aún en su estado de sorpresa no tardo en corresponderme de manera algo torpe el beso, pase mi mano detrás de su cabeza para acercarlo aún más, el no tardo en pasar un brazo por detrás de mi espalda baja para alzarme y sentarme en el lavamanos haciéndose paso entre mis piernas. Gemí de placer al sentir ese choque electrizante al chocar nuestras lenguas durante el beso un par de veces más, ladee mi cabeza para hacer el beso más profundo mientras el me presionaba aún más contra su cuerpo con sus manos en mi cadera apretandolas.