Cuando tus sentimientos se amontonen, tu ángel de la guarda escuchará todo lo que tengas que decir.
Lucas consiguió que la cabeza de Olivia se volviese un caos. No se paró a pensar en él hasta que se calmó todo el tema de Andy y solo tenía que observar el estrellado cielo nocturno para verla. Y ahora que se había permitido pensar en otras cosas, Lucas y las palabras de la mujer de la sala blanca le gritaban en su interior.
Quería hablar con él y desmentir todo aquello, pero en el fondo temía que fuera verdad. ¿Si su pacto terminase, él ya no estaría con ella? ¿Desaparecería? Y la pregunta que más atormentaba su mundo: ¿Realmente la quería, o era solo efecto del pacto?
Miró el colgante. El corazón de Lucas. Se había planteado romperlo para demostrar que estaría con ella, ¿pero y si no pasaba eso? Había pensado en hablar con Alister. Tal vez él pudiese aclararle las ideas y sin que le sentase totalmente como un balde de agua fría.
Sabía que no podía quedarse con la duda. No quería hacer daño a Lucas.
Por eso esperó a que el día estuviese en su máxima claridad.
Tocó el colgante. Estaba frío, y eso significaba que Lucas estaba lejos.
—¡Alister! —llamó.
Se hizo el silencio en la habitación.
—Alister, ¿se puede saber dónde te has metido?
Al ver que estaba mirando como tonta a la nada y que no recibía respuesta, se tiró a la cama de cara y hundió su rostro en la almohada. Pegó un grito de exasperación.
—Menudo ángel de la guarda —se quejó.
—Oye, que tampoco hace falta insultar.
Olivia se levantó con la rapidez del rayo.
—¡Alister! —volvió a exclamar.
—¿A que ha molado mi entrada? —preguntó él de forma remolona.
Ella le miró y alzó una ceja. «No, Alister, no mola». Se dijo a sí misma.
—Vale, lo he pillado. —Se resignó com tristeza fingida y se sentó en la butaca de leer —. Bueno, ¿qué es lo que pasa por esa cabecita?
Olivia se sentó en la cama. Lanzó un suspiro.
¿Estaba realmente preparada para decirlo en voz alta?
—¿Qué sabes acerca de los pactos?
Alister no se movió, solo pestañeó con rapidez y en silencio.
Olivia chasqueó los dedos para despertarle de su repentino ensimismamiento.
—¿Por qué quieres saber eso? —su tono, por primera vez, era serio —. Olivia, ¿ha pasado algo con Kamor?
Ella desvió la mirada y comenzó a mover la pierna de manera frenética.
Era verdad. Él no era Lucas. Era Kamor. Y ella solo conocía a Lucas.
—¿Qué es lo que quieres saber?
—¿Cómo rompo un pacto?
—¿Qué ha pasado? —insistió Alister.
—¿Cómo lo hago?
—Olivia, por favor.
—Lucas no me quiere. Solo está conmigo por el pacto, y por mi culpa se está sacrificando.
Los dos se quedaron presos de un abrumador silencio. Lo había dicho. Había expuesto en voz alta su tormento, y las lágrimas amenazaban con salir.
Alister, por su parte, no sabía qué decir. Él había vivido de primera mano la relación entre Olivia y Kamor. Sabía la situación de los dos, y sabía cómo se sentían.
—Tienes que hablar con él.
—Alister, no puedo hacer eso.
Y era verdad. Hablar con él iba a suponer más lágrimas que palabras.
—No te voy a decir nada hasta que hables con él.
—¿Qué? No. Sabes que eso no va a salir bien.
—Te prometo por mi aureola que te contaré cómo romper el pacto y te ayudaré en todo. Pero primero tienes que hablar con él.
—Alister, no...
Pero sus palabras se las llevó el viento. Alister había desaparecido con la misma rapidez con la que apreció.
N/A
Sé que ha tardado, ¡pero aquí está!
Aquí tenéis a nuestra querida Olivia, con todo el desmadre que se monta en su cabeza. La pobre sale de una y se mete en una peor. PEROOO, no nos centremos en eso, sino en que tengo una sorpresita para vosotros.
Por favor, redoble de tambores.
MAÑANA TENDRÉIS OTRO CAPÍTULO.
Espero que el capítulo de mañana compense un poco mi ausencia, porque prometo que vale mucho la pena, por ya no hablar de que es bastante largo. 😎
Besitos desde la luna,
Mía Moon. ♥️🌙
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(( ❤️🔥;; Cuidado con lo que deseas
Teen FictionSecretos. De aquellos que destrozan sueños. De aquellos que avivan el fuego. De aquellos que son un total peligro. De aquellos por amor. De aquellos que matan. Terrible desgracia si fueran descubiertos. No permitirás que eso ocurra, ¿verdad? So...