✖ Jungkook y Jimin son mejores amigos, hasta que una noche guíados por el alcohol deciden cruzar la línea. Provocando una sorpresa en la pancita de Jimin.
• Pareja principal: Kookmin
• Contenido: ChicoxChico / M-PREG /+18
• Estado: Finalizado (Re...
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Jungkook parpadeaba mientras observaba el ceño fruncido en la cara del más bajo.
—No—pronunció firme sin pensarlo dos veces
—Jungkook...—respondió haciendo un mohín—Sé que no es un buen ambiente, pero solo estaré un rato, además no beberé nada
—Habrán muchas personas, es fácil perderse y...
—No me separaré de ti—interrumpió—Al menos una hora... Y luego volvemos. Por favor...
El pelinegro mordió su labio inferior, observando como Jimin ponía esa expresión que era difícil de ignorar. Él también quería ir, pero no sabía si era lo mejor.
Jimin se acercó hasta quedar frente a él y pasando los brazos alrededor de su cuello, dijo:
—Por favor...
Jungkook suspiró rendido y vió los ojos del contrario clavados en él. Por lo tanto respondió:
—Solo una hora, luego nos vamos
—¡Si! —exclamó contento abrazando al pelinegro
Jungkook sonrió ante su reacción y devolviéndole el abrazo, me dió un pequeño beso para decirle que se alistara.
Jimin fue a bañarse primero y minutos después lo hizo Jungkook, llevando su conjunto de ropa para cambiarse más rápido.
En la habitación, Jimin aún con la toalla cubriendo su cuerpo, observaba su ropa, intentando buscar algo adecuado para ponerse. Usualmente él usaba un pantalón ajustado, que marque todo perfectamente y tener aquella imagen de conquistador que a veces usaba en las fiestas. Suspirando tomó una de sus prendas favoritas, la cual era un pantalón negro con pequeñas roturas encima de las rodillas y se sentó en la cama para colocárselos. No hubo ningún problema para que le quedarán como siempre, excepto por un pequeño detalle que no podía dejar pasar.
No podía cerrarlos
Esa era la razón de su escepticismo al pensar en usar pantalones ajustados. Ahora contaba con una pancita la cual le dificultaba usar ese estilo de ropa. Sin querer perder más tiempo se los quitó e intentó con otros. Después con otros y al final ninguno de los cuatro intentos dió resultado.
Se sentó en la cama frustado y vió como la puerta se abría, anunciando a un pelinegro que venía entrando.
—Espera... Aún no...
Sin embargo Jimin no pudo terminar la oración al ver a Jungkook perfectamente cambiado y luciendo condenadamente atractivo. La respiración del pelinaranja se detuvo observando el pantalón negro que marcaban sus piernas tonificadas, su camisa blanca que tenía los tres primeros botones desabrochados y la chaqueta de cuero negra que combinaba perfectamente, sin mencionar su cabello peinado ligeramente y esa sonrisa que fácilmente podría conquistar a cualquiera.
