ERROR ✖ Kookmin

✖Epílogo

Los niños son los seres más tiernos e inocentes del mundo, tener uno en casa llena de calidez el ambiente e inyecta cariño a tu interior. Sin embargo Jimin no pensaba así en este momento.

—¡Jeonmin regresa aquí!—exclamó persiguiendo al mencionado y cayendo directo al suelo por no ver el patito que se interpuso en el camino

—¡No!—respondió corriendo como vino al mundo e importándole poco si alguien lo veía

Jeonmin corría lejos del pelinaranja intentando buscar un buen escondite para no tener que bañarse. Al menor de ahora cinco años no le gustaba sentir el jabón porque solía lastimar sus ojitos, además que el agua en ocasiones se enfríaba un poco y eso ponía a temblar su cuerpito.

—Jeonmin—pronunció Jungkook saliendo de la cocina e interponiéndose en su camino—¿Qué te dije sobre escapar de tu baño?—inquirió cruzándose de brazos para verse más intimidante y olvidando por completo el delantal que vestía de la cintura para abajo

Jungkook vió bajar por las escaleras a Jimin con una toalla en la mano y cuando sus ojos se encontraron asintieron al mismo tiempo acercándose al menor. Jeonmin—quien se encontraba en medio—no tuvo tiempo de escapar y se vio acorralado entre sus dos padres.

—¡No!—gritó siendo levantado por Jimin e intentando escapar nuevamente

Detrás de ellos Jungkook sonrió levantando todos los juguetes de baño que su hijo había lanzado minutos atrás. Ayudó a Jimin a terminar de asear a Jeonmin y finalmente consiguieron cambiarlo para llevarlo a la escuela.

No obstante antes de partir Jimin fue por su Cámara y le tomó una foto al menor sonriendo de ternura al verlo usar su suave overol amarillo. Cuando le pusieron sus botas de lluvia rojas junto a sus guantes y bufanda tomaron más fotos recordando el momento, después de todo ya estaban llegando tarde.

사랑

El cielo se encontraba cubierto de estrellas y estas brillaban mucho más debido a la oscuridad de la noche. La puerta principal hizo el sonido característico al abrirse y entraron Jimin, el cual tenía su mano entrelazada con la de Jungkook y este último sostenía a Jeonmin.

Mientras el menor terminaba de lavarse las manos Jungkook se encargaba de poner los platos y Jimin servía una porción para cada uno. Este último se encaminó hasta la cocina por el jugo de manzana y estuvo a punto de tropezar con la mochila de Jeonmin. «Tengo que enseñarle a no dejar sus cosas por todo lado» pensó alzando la mochila y notando que algo anaranjado sobresalía de esta.

Jimin al no reconocer el objeto abrió el cierre y finalmente pudo ver a una pequeña jirafa que sabía perfectamente que no pertenecía a Jeonmin. Tomó el peluche entre sus manos y notando que el menor caminaba nuevamente hacia ellos intentó preguntarle sobre la razón de que lo tuviera. Sin embargo el instante que Jeonmin vio lo que tenía corrió rápidamente a quitárselo para ocultarlo debajo de su camiseta.