ERROR ✖ Kookmin

✖6

Jungkook se sentía en un éxtasis, uno en el cual Jimin era partícipe.

Sus erecciones se friccionaban creando un delicioso vaivén. Jimin no dejaba de moverse mientras las manos de Jungkook sujetaban su cintura con firmeza indicándole el ritmo.

Jungkook volvió a romper la distancia besando al contrario, sus labios se movían rápido, pero a la vez en conjunta sincronía. Fue bajando hasta encontrarse nuevamente con su cuello, ese que lo traía loco, el perfume junto con la respiración de Jimin hacían que su excitación vaya en aumento.

Por eso pasó la lengua comenzando por su pecho hasta terminar en su mandíbula. Jimin llevó la cabeza hacia atrás para otorgarle mayor comodidad.

Jungkook mordió y succionó la extensión de piel a su antojo, le estaba gustando demasiado tener a Jimin a su disposición.

El último mencionado no quiso quedarse atrás, agarró a Jungkook detrás de su cuello y lo acercó parar volver a besarlo, sus lenguas volvieron a juntarse y a jugar entre ellas.

Al separarse Jimin dejó una pequeña mordida en el labio inferior de Jungkook, este inmediatamente reaccionó poniéndolo debajo suyo.

Se detuvo por un momento a observar el cuerpo de su mejor amigo, parecía ser la mejor obra de arte que alguna vez pasaran por sus ojos.

¿Desde cuando Jimin era tan perfecto?

Con sus manos fue recorriendo todo su pecho hasta llegar al abdomen, acarició la zona por unos segundos y se dirigió a sus costados, para finalmente poder quitar la última prenda que lo cubría.

Las mejillas de Jimin se tornaron de un lindo color carmín al sentirse completamente desnudo.

Jungkook notó ese cambio y no pudo evitar sonreír por la ternura que emanaba el contrario.

—Tranquilo—susurró para luego morder levemente su oreja—Seré gentil

El más bajo sintió una corriente pasar por su cuerpo, mientras intentaba guardar la compostura. Pero esta fue completamente descuida cuando sintió una intromisión en su zona privada.

—Jungkook...que..

—Descuida—interrumpió—Necesito prepararte primero para que no duela demasiado—explicó para seguir con su trabajo

Jimin lo encontró lógico, pero eso no pudo quitar el nerviosismo que empezó a sentir. Después de todo era la primera vez que lo haría con un chico.

Por otro lado Jungkook intentaba ser cuidadoso, si por él fuera sería rudo y saciaría todas sus necesidades, pero sabía que el contrario estaba un poco nervioso y no lo quería asustar.

Después de un par de minutos decidió meter un segundo dedo e inmediatamente el cuerpo de Jimin se contrajo.

—Jiminie mírame... —pronunció mientras su otra mano sostenía su mandíbula para girar su rostro

—Jungkook...yo.. —respondió con la respiración entrecortada—¡Jungkook! —gritó cuando sintió un tercer dedo en su interior

El mencionado sonrió con suficiencia y sin poder esperar otro minuto más se quitó la última prenda que lo cubría y comenzó a alinear su pene en la entrada del contrario.

—Tranquilo bebé... —dijo mientras ingresaba lentamente

Jungkook buscó las manos del contrario para poder unirlas y así los dos sentirían las sensaciones del contrario.

Se acercó a dejar besitos por todo su rostro a la vez que introducía toda su longitud. Jimin soltó un grito desgarrador y se detuvo para que se vaya acostumbrando.

Los ojos de Jimin se llenaron levemente de algunas lágrimas, las cuales Jungkook se encargó de borrar con sus labios.

Después de unos minutos decidió comenzar a moverse y así realizar la primera embestida. Al notar que Jimin no se quejaba continuó haciéndolas lentamente, a la vez que iba aumentando el ritmo.

Jimin dejó de sentir dolor y este fue reemplazado por una sensación completamente nueva, sintió por primera vez verdadero placer.

Las embestidas aumentaban su velocidad mientras ambos chicos se sentían cada vez más cerca.

—Ahh... Jung...kook...

El mencionado sentía como el interior de Jimin lo recibía anunciando que era el primero. No pudo evitar sentirse feliz al saber que ningún otro jamás lo había tocado en ese lugar.

—Si...Jimin...—dijo mientras seguía moviéndose intentando encontrar su punto dulce

Fueron segundos donde sintió como la espalda de Jimin se arqueaba indicando que lo había encontrado. El aroma de excitación inundaba toda la habitación y no pasó mucho tiempo para que Jimin llegará al clímax.

Jungkook atacó sus tentadores labios mientras continuaba moviéndose, tocando ese punto que volvía loco al más bajo. Fueron minutos los que pasaron hasta que no pudo aguantar más y eyaculó en el interior de Jimin, llenándolo completamente.

Sus respiraciones indicaban lo rápido que sus corazones latían, sus ojos se encontraron y no pudieron evitar sonreír, ambos sabían que la noche no terminaría ahí.