11 — La Reconciliación
Emparejamiento: Boba Fett x lectora
Conteo de palabras: 4.5k
Advertencias: NSFW, masturbación, elogio perverso, oral (recibir f), angustia, mención de trastornos alimentarios y tendencias depresivas.
Resumen: Comienza el proceso de sanación para ti y Boba.
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Boba luchó por concentrarse en encontrar a sus socios infieles, más aún que ya lo era. Definitivamente sabían que estaban siendo seguidos ahora. Y Boba no podía apartar su mente de casa. Sabiendo que lo querías de vuelta. Sabiendo que estabas ahí esperándolo, deseándolo, necesitándolo en tus propias palabras. Era insoportable.
Dos días después de tu llamada de comunicación con lágrimas en los ojos, tomó una decisión ejecutiva. Estos traficantes traidores ya le han quitado demasiado tiempo y esfuerzo. Dos meses de desperdiciar combustible y perder tiempo solo para que se escapen tres veces sin siquiera verlos. A la mierda el dinero. A la mierda la recompensa. Tenía que llegar a casa contigo ahora. Y con esa comprensión, dio media vuelta y se dirigió directamente de regreso a Tatooine.
Mientras colocaba la nave en el hiperespacio, se dio cuenta de lo mal que se había cuidado. No es inusual para él cuando está cazando solo. Olvidarse de comer. Descuidar el sueño. Creador, se arrepiente de haber dejado el ungüento para su piel en casa, porque nunca había estado con un dolor tan agónico. Con cada movimiento de su cuerpo su piel protesta.
Intenta razonar consigo mismo que estará bien cuando llegue a casa. Comerá adecuadamente. Tendrá una buena noche y dormirá. Se bañara en una tonelada métrica de bacta. Y te tendrá en sus brazos una vez más. Pero todavía hay un temor en la parte posterior de su cabeza, que cambiarás de opinión y te irás antes de que él llegue. O te vuelve a tener entre sus brazos solo para que le digas en su cara que le tienes miedo, que te da asco, que no lo quieres y te vas. Y habrá perdido al amor de su vida.
Él empuja esos miedos fuera de su mente. Lo llamaste. Lo llamaste para decirle que lo extrañas. Lo llamaste para saber si iba a volver. Dijiste que lo amabas.
El día que regresa a Tatooine estás en la sala del jardín arrancando malas hierbas ansiosamente tratando de distraerte de la espera. No escuchas los motores de la nave volando sobre el palacio o aterrizando en la superficie. No escuchas al personal en los pasillos superiores comenzando a alborotar y charlar.
¿Dónde está la dama? ¿Dónde está la dama? ¡Que alguien la encuentre ahora!
Pero lo que sí escuchas es tu nombre. Alguien grita tu nombre. Y resuena a través de los pasillos vacíos. Dejas caer tu pala. Solo hay una persona que te llama por tu nombre en el palacio. Te paras derecha, giras sobre tus talones y corres hacia las escaleras.
"¡Boba!" Gritas, sin saber de dónde viene su voz "¡Boba!"
Él grita tu nombre en respuesta. Él sabe exactamente dónde estás. Puedes escuchar sus pasos, corriendo hacia ti. De repente, dobla la esquina al final del pasillo y no puedes evitar las lágrimas que se acumulan en tus ojos. Corres a toda velocidad y te lanzas hacia él.
Deja caer su casco sin tener en cuenta dónde aterriza. Él envuelve sus brazos alrededor de ti, mientras ambos caen al suelo.
Estás sollozando lágrimas de alegría, "Volviste"
"Por supuesto que volví" su agarre sobre ti es sólido, casi aplastante. Pero no te importa, esperas que nunca te deje ir. Tus lágrimas no han cesado. “No llores cyare, estoy aquí. Estoy aquí"
"Lo siento mucho. Cometí un terrible error al dejarte ir. Lo siento mucho. Perdóname por favor- lloras aferrada a él.
“Te perdono cyare” te susurra al oído “Te perdono”
