𝐐𝐮𝐞𝐫𝐢𝐝𝐨 𝐂𝐚𝐨𝐬 | 𝐋𝐞𝐯𝐢 𝐀𝐜𝐤𝐞𝐫𝐦𝐚𝐧

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟒𝟖 "𝐄𝐟𝐞𝐜𝐭𝐨 𝐝𝐨𝐦𝐢𝐧𝐨"

Mis amores:

Mis sinceras disculpas por desaparecerme durante casi tres meses, para ser sincera no me sentía bien, no estaba tan motivada como antes y por ello no quería hacer absolutamente nada.

Sin embargo, ahora estoy mejor, el bajón feo ya paso, por lo cual la historia continua y tristemente terminamos con este capitulo el arco de "El Plan Alcatraz" para dar paso a la recta final de Querido Caos.

Esta recta final será dividida en los últimos dos arcos, por lo cual desde el siguiente capitulo entraremos en una fase totalmente determinante donde espero no acabar con su estabilidad emocional, o eso intentare.

Por ultimo, el final ya lo decidí, solo me queda estructurarlo de mejor manera y escribirlo.

Gracias por esperar, y perdón.

Fefe/satantearss.

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Levi Ackerman.

¿Cómo se ama a alguien
que no quiere seguir viviendo?

Desde que Jul cerro sus orbes para sumirse en un profundo sueño entremezclado con las penas, y posibles pesadillas, solo me limite a abrazarla y besar su frente repetidas veces para transmitir lo que no podia con palabras

¿Qué diría exactamente?

E incluso me sigo preguntando aquello mientras conduzco en direccion a las afueras de la ciudad, antes que mi pareja se sumiera en su profundo sueño ella me pidió llevar a Marco hacia una direccion; asi sin más. Algo dudoso por ello, hice exactamente lo que ella me pidió sin chistar ya que confió completamente en ella.

El amor que siento por ella es amarillo, como la cancion "Yellow", como el sol pero a veces es de un color rojo, amarla es rojo. O tal ves es naranja al mezclar el amarillo – lo fascinante, el aleteo de las mariposas, o el simple hecho de amarla – con el rojo – su enfermedad, el pasado y el dolor que ambos poseemos –.

Después de sumirme en aquello gracias a una cancion de la radio titulada "Red" de Taylor Swift, doy un último vistazo al pecoso que está siendo apuntado por Farlan con un revolver. Compruebo que finalmente llegamos al lugar, una cabaña en las afueras del poblado de Trost, cercano a la carretera. Estaciono mi auto frente a la morada de madera – me recuerda a la mía –, apago el motor y me bajo del vehículo. En acto seguido camino en direccion a la puerta, pisando los charcos de lodo, y pronto se escucha un trueno. Este poblado es famoso por sus montañas, la nieve y por qué cada día pareciera ser invierno.

Antes que pudiera golpear la puerta, una chica de baja estatura con cabello negro, orbes azules, piel blanquecina y mechas color violeta me recibe, viste una falda corta que contrasta con este frio de mierda.

—¿Eres el tipo del cual nos habló Julieth Galliard? —Ni siquiera un "hola", que chiquilla más malcriada.

—Veo que tu madre ni siquiera te ha enseñado modales—Sentencie, a lo cual ella simplemente ríe.

—Entren, mi madre los está esperando...—Ladea su rostro y abre aún más la puerta, hago un gesto con mi cabeza indicándole a Farlan que traiga a Marco a dentro de la cabaña.

Al ingresar a la morada me recibe un calor de lo más exquisito, me despojo de mi chaqueta y una señora de no más de cuarenta años me dedica una sonrisa y me indica que tome asiento.

—Hola, tu debes ser el novio de Jul...—Se sienta frente a mí, con una bandeja de plata que tiene algunas tazas con te negro y algunos emparedados—, Petra nos dijo que vendrías a dejar a alguien.