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Se acercó a mi oído
-No lo sé...tú dime- Sentí que ya se había puesto así debido al alcohol que a encontraba en su cuerpo

-Tú eres quien empezó, tú dilo- dije formando una sonrisa de lado

-¿Entonces harás lo que sea?- y él también hizo una sonrisa cómplice

-Depende.- dije aún sin dejar de sonreír 

-Tramposa- dijo cambiando su cara a una totalmente seria

-bla bla bla.- dije mientras movía mi mano como si hablara, y me reía

Seguimos bailando, estaba cansada, me dolían los pies aunque también noté el cansancio en Katsuki.

-¿Ya te cansaste, niño?- le dije, aunque tal vez la que estaba apunto de caer era yo. Los tacones que me había llevado ya me habían lastimado.

-Nunca, pero parece que a alguien ya le cansaron sus tacones, ¿no es así?- dijo mirando en dirección hacia mis tacones.

-¿Mis tacones?- bufé -Para nada ¿a ti tus tacones ya te lastimaron?- dije burlándome

No dijo nada. Significado de primer alerta.
Me agarró aun más fuerte dándome vueltas, mis pies no soportaron más y me solté de él, dirigiéndome a los asientos.

-¡Saquen su dinero!- Escuché la voz de Sero en cuanto me senté

-¿A que se refiere Hanta?- Le pregunté a Mina que justo estaba sacando dinero de su cartera.

-Hicimos una apuesta de ver quien se cansaba primero entre ustedes dos- dijo tranquila, haciendo que yo me sorprenda -¡Perdí!- y sentí como me dio un golpe en la cabeza.

Ni si quiera tuve ganas de reclamarle a los demás, la risa y el cansancio se habían apoderado por completo de mi. Le di un trago a mi bebida para recostarme en el sillón, quitándome mis tacones.

-Perdedora- escuché lo que Katsuki había dicho

-Come mierda- y levanté mi dedo de en medio. Después de eso caí en un profundo sueño.

-Hey, tonta, es hora de irnos- Escuché una vez más a Katsuki mientras me movía

-Quiero dormir- dije sin ganas ni intención de moverme ni un centímetro

-No.- y en ese momento sentí como me cargaba como un costal de papas, despertándome por completo.

-Bájame- aún con cansancio hablé

-¿Y qué ensucies mi casa? Para nada.- Una vez más confirmé estar despierta por completo. ¡¿Su casa?! ¡¿Iría a su casa?!, no hay nada de raro en eso, suelo estar diario en su casa a como él en la mía, pero no pude evitar sorprenderme.

Me subió en la parte del copiloto de su auto colocándome el cinturón de seguridad y poniendo mis tacones en el suelo de este mismo vehículo.

Al llegar como yo seguía aún con sueño Katsuki me levantó y cargó al "estilo princesa".
Quizás era un sueño, un hermoso sueño del que para nada querría despertar.
Entramos a su casa y me aventó a su cama.

-¡Auch! Jodete- le grité
-Que delicada. Aparte de perdedora- dijo mientras me tapaba con sus cobijas.
-Cállate- le dije

-¿Te dormirás aquí?- le pregunté
-Dormiré en mi sofá- Me aclaró

-Con confianza, piensa que esta es tu casa,
puedes dormir aquí.- dije con sarcasmo

-Ya ni con sueño puedes dejar de decir
estupideces- burlándose de mi

-No- Afirmé y reí

-¿Aún tienes fuerzas para levantarte?- dijo

-Creo...- dije con cansancio -¿Por qué?

-¿Quieres ropa? Para que no tengas frío y andes jodiendo- habló mirándome directamente

-Si...por favor- dije para juntar todas mis fuerzas para poder levantarme

Él iba agarrando su ropa mientras yo me iba levantando y cuando por fin me levanté sentí como me aventó su ropa en la cara.

-¡Hey!- me quejé para después caminar hacia su baño para irme a cambiar

Al regresar a la habitación de Katsuki vi que ya se encontraba acostado

-Hey, ¿ya te dormiste?- pregunté

-Si- escuché que me respondió con la voz adormecida

-Esta bien- dije aun bajo los efectos del alcohol o de mi estupidez...quizás de las dos

Me acosté a un lado de él y en medio de mis sueños regresábamos a la fiesta de Hanta

Él acercándose a mi...se acercaba poco a poco a mi odio mientras me agarraba de mi cintura

-Saori, me gustas

Me quedé sorprendida...¿era verdad lo que acababa de escuchar?...

-¿Eh?- Pregunté como si no hubiera escuchado nada.

Hasta que sentí que me besó.

Por más sorprendida que estuviera le seguí el beso a Katsuki...

Continuamos besándonos y estos siguieron aumentando, él se puso encima de mi, acariciando delicadamente mi mejilla.

Me desperté.

-¿Estás bien?- Me miró Katsuki parado en la puerta

-Si...tuve un sueño...diferente...- dije

-¿Que carajos soñabas? Te movías como loca- dijo riendo -¿Sueño húmedo? ¿con quien?- marcando una sonrisa de lado

-Cállate, y no, no fue ningún sueño húmedo, idiota- le aventé una almohada

-Hice el desayuno, así que apúrate o te quedarás sin desayunar y comerás mierda- dijo para después darse la vuelta de nuevo hacia la cocina

Decidí correr rápidamente hacia él aventándome a su espalda, en modo de "caballito".

-¡¿Que carajos?!- gritó sorprendido el rubio

-No te quejes y cárgame- y él, para mi sorpresa me hizo caso, agarrándome fuerte de mis piernas.

-Si te caes no te quejes- Me avisó, o amenazó...no lo sé

Lo abracé, quizás lo tomé por sorpresa ya que se detuvo por un instante pero continuó bajando y dirigiéndose hacia la cocina.

Todo era taaan cálido, él es tan cálido....

Siempre he soñado con que estemos juntos, no solo como amigos, si no como dos amantes, dos personas que se aman mutuamente...sueños de cualquier niño y niña puberta, pero lo soñaba.

Katsuki está entre lo que más deseo tener conmigo siempre y lo que me da miedo tener...

...solo porque siento que no lo merezco...

𝓢𝓸𝓵𝓸 𝓽ú 𝔂 𝔂𝓸     (Bakugou Katsuki y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora