• Capítulo 32 | Tú y yo •

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Hola, personas bellas (。・ω・。)ノ♡
Nueva actualización ¡Sí! (つ≧▽≦)つ

Discúlpenme mucho, personas bellas ಥ╭╮ಥ porque no publique capítulo ayer, pero no sé que le pasó a la aplicación de Wattpad que no llegaba la notificación de este capítulo.
Enserio que me siento muy apenada 🙇🙇

Me disculpo si hay faltas de ortografía 🙏😔✋

Sin más que decir, disfruten del capítulo y nos leemos luego 😊❤️💚

Takemichi por esta ocasión dejo que Manjiro estuviera fuera, notaba como estaba conviviendo muy bien con Haruchiyo, era por eso que no quería interrumpirlos

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Takemichi por esta ocasión dejo que Manjiro estuviera fuera, notaba como estaba conviviendo muy bien con Haruchiyo, era por eso que no quería interrumpirlos. Así que decidio meterse al apartamento y dejarlos hablar, ya que tenían mucho que aclarar.

Fue una buena noche, el comunicarse, sin meter asuntos de trabajo, el ojinegro y el pelirosa resolvieron algunas dudas. Aparte, recordaron un poco su infancia, que hasta reían juntos por las travesuras que hacían en esos tiempos.

Era una gran felicidad la que sentía Sanzu, que quería llorar y gritar de la alegría, pero Mikey bromeaba un poco con él cuando lo veía en ese estado, que mejor se aguanto esa emoción, después lo sacara cuando se encuentre sólo.

El pelirosa no sabe exactamente como fue que el ojinegro de en un abrir y cerrar de ojos haya tenido ese comportamiento con él. Aunque tiene la ligera sospecha que el ojiazul tiene que ver con eso.
Bueno, talvez se lo pregunte después. Pero si esta en lo cierto, se lo agradecerá mucho y estará en deuda con él.

[...]

A la mañana siguiente, aún Takemichi permanecía descanso, parecía que disfrutaba el dormir, en su semblante de reflejaba lo calmado que está.

Mientras que, Manjiro ya se encontraba despierto. Estaba saliendo del baño ya que fue a ducharse.
Los cuidados del menor sirvieron de mucho, el ojinegro ya no sentía que tuviera fiebre, los malestares habían desaparecido.

Estaba secándose el cabello, con la ayuda de una toalla, que al terminar de secarse, la dejó sobre una silla.

Miró dirección hacia la cama, aún podía notar que el menor continuaba descansando. Se acercó y se hincó aún lado del chico.
Le era muy tierno verlo tan tranquilo, le daba una sensación pacífica al mayor.

Con una mano, hizo aún lado los mechones que cubrían la frente del ojiazul, que le impedían al contrario apreciar más el bello rostro de su pareja. Lentamente se fue acercando hasta el rostro de Takemichi, le depositó un dulce beso de amor en sus labios. Le encantaba tener tanto contacto con él menor.

Manjiro posó una mano sobre la mejilla ajena, así sentía el suave tacto de la piel blanca. Pego con delicadeza su frente con la contraria, veía las bellas facciones del menor, que, para el mayor era visto como un hermoso ángel, no solo por su físico, también por todas las acciones buenas que ha hecho por él.

• EL TRATO •   | Mitake | [Finalizado]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora