POV. ALBA
- Hace mucho rato que no veo a Natalia.- Dijo María.
- Yo desde después de comer que no la veo, y ya son las ocho de la tarde.- Dijo Julia.
- Yo tampoco la he visto desde entonces.- Dije.
- A saber donde se ha metido la loca esta.- Dijo Carlos.
- A lo mejor ha ido a la playa, conociéndola.- Dijo Miki.
- Voy a ver si está bien.- Dije levantándome.
- Cualquier cosa llámanos.- Dijo Joan.
- Claro.- Dije sonriendo y saliendo de ahí.
Fui al paseo pero no la veía.
Fue entonces cuando vi a un cuerpo muy parecido sentado en el final de las rocas del espigón de la playa mirando hacia el horizonte.
Con cuidado de no caerme por las rocas que eran más grandes que yo conseguí llegar a donde estaba.
- Nat cariño.-
- Albi, ven.- Dijo Natalia señalando sus piernas y ayudándome a sentarme entre ellas.
- Te has ido sin decir nada.-
- Quería estar sola un rato y ver el atardecer desde aquí.-
- ¿Quieres que te deje sola?-
- No, ya he estado sola toda la tarde. A ver el atardecer puedes quedarte.-
- Vale.- Dije sonriendo y apoyando mi espalda en su pecho.
- Mira, ya empieza.- Dijo Natalia.
Y era verdad, el sol comenzaba a esconderse, mientras dejaba ver colores vivos.
- Es precioso.-
- Como tú.-
- Me encanta que te guste tanto el atardecer.-
- Me siento como en casa cuando me paro a mirarlo.-
- Se nota.-
- Siento tanta paz que no puedo ni explicarlo.-
- Yo antes no les daba tanta importancia, pero desde que te conocí he aprendido a admirarlos y a pararme a verlos.-
- Es lo mejor que me has podido decir en todo el día.-
- Te quiero mucho Nat.-
- Y yo a ti Albi.-
Y ahí, dos almas mirando el atardecer.
Dos almas que parece ser que estaban destinadas a estar juntas, si es que el destino existía, porque esas dos almas no creían mucho en esas cosas.
Dos almas que estaban conectadas y se sentían a salvo y en casa la una con la otra.
Y no sólo era el cielo quien brillaba en ese momento, sino también dos personitas.
Una pequeña gran revolución.
POV. NATALIA
- Hombre, ya pensábamos que os había comido un tiburón.- Dijo Miki cuando aparecimos por casa.
- Hemos ido a ver el atardecer.- Le dije mientras Alba se iba con el grupo.
- ¿Todo bien? Has desaparecido.-
- Necesitaba estar sola, conmigo misma un rato.-
- ¿Pero estás bien?-
- Si, no te preocupes.- Dije dándole un abrazo.
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pequeña gran revolución
FanfictionNatalia estudia medicina, arrastrando algunos fantasmas del pasado que le hacen ser quien es ahora (o como dice Miki, hacen ser a la coraza que le envuelve). Alba estudia fisioterapia, es la luz que nunca se apaga, pero hasta las luces llevan sus f...