pequeña gran revolución

mala educación

POV. NATALIA

- ¿Estás bien?- Me preguntó la chica de la clase. 

Que pesada es. 

- Sí, sólo tengo calor.- Dije encendiendo el grifo del baño. 

- Bebé.- Dijo Alba entrando. 

- Albi.- 

- ¿Está todo bien?- Me preguntó mirando de reojo a la chica.

- Sólo tenía calor.- Dije sonriendo y dándole un beso corto. 

- ¿Tu que haces aquí?- Le preguntó Alba a la chica. 

- ¿Y tú?- 

- Venir a ver si mi novia está bien.- 

- Eres su novia cuando te conviene, con ella te sientes mejor pero no vales una mierda.- Dijo la chica acercándose a Alba. 

- Si tenemos que decir quien vale menos aquí sales perdiendo.- 

- ¿Pero tu de que vas?- Le dijo la chica empujando a Alba contra la pared. 

- A ella ni se te ocurra tocarla.- Le dije poniéndome delante suyo. 

- Eres una hija de puta.- Le dijo Alba a la chica. 

- Vuélveme a llamar así a ver que pasa.- Dijo la chica escabulléndose y dándole un puñetazo a Alba. 

- Te he dicho que no la toques.- Dije empujándola tan fuerte que se cayó para atrás. 

- Puta loca.- Me dijo la chica levantándose. 

- Te juro que como le vuelvas a poner la mano encima no lo cuentas.- Dije cogiéndole del cuello de su vestido y estampándola contra la pared. 

- Suéltame.- 

- No, me vas a escuchar. Ni se te ocurra volver a dirigirle la palabra y mucho menos ponerle la mano encima. Porque no me das miedo, sólo asco. Así que yo de ti vigilaría lo que haces, tu y tus amiguitas.- Dije soltándola de golpe lo que hizo que cayera al suelo. 

- Nat vamos, no vale la pena.- 

- Tienes razón.- Dije cogiendo la mano de Alba y saliendo del baño con ella. 

- Vaya mierda de noche se ha quedado.- 

- Albi tu labio.- Dije parándome en medio del pasillo para ver su labio. 

- No pasa nada, estoy bien.- 

- Tengo que curarte eso.- 

- Pero no nos vamos a ir.- 

- Voy a pedir un botiquín a ver si tienen, ven.- Dije yendo hacía la barra. 

- Hola perdona, ¿Tenéis un botiquín?- 

- ¿Qué ha pasado?- Preguntó el chico. 

- Que al abrir la puerta del baño le he dado sin querer.- Dije señalando a Alba. 

- Venid.- Dijo el chico abriendo una puerta de la barra y yendo a una habitación que tenían detrás, el almacén. 

- Gracias.- Dije cuando me dio el botiquín.

- Cúrale eso aquí y luego ya salís, yo cualquier cosa estoy en la barra.- 

- Muchas gracias.- Le dijo Alba antes de que el chico volviese a la barra. 

- A ver, ven aquí.- Le dije a Alba mirando su labio. 

- ¿Es mucho?- 

- Poco, no te hacen falta puntos ni nada, es bastante superficial. Esto te va a picar.- Dije poniéndole un espray.