capítulo treinta y seis.

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Aún el azabache no sabía cómo terminó de esa menea con su madre estando entre ambos mientras gritaba, siendo un completo estorbo que los había interrumpido. Por supuesto que en el momento en que se adentro Kim no dudo demasiado en ponerse frente a Jungkook, protegiendolo con su cuerpo mientras esa mujer hacía todo un escándalo, avergonzadolos en el proceso. Incluso Jisoo se había a llegado a asomar "discretamente" solo para saber cual era el problema realmente en su consultorio, retirándose inmediatamente al ver a la mujer enloquecida gritándole a su hermano y buscando cualquier manera para tomar a Jungkook del brazo o alguna otra extremidad, siendo más que obvio que el mayor de los Kim no dejó que pusiera ni un solo dedo encima de su precioso Jungkook.

—¡Dame al mocoso antes de que denuncie desgraciado! Necesito a ese infeliz para poder seguir recibiendo el dinero de los padres de ese asqueroso hombre así que pierdete. —No supo porqué soltó esas palabras pero no era una sorpresa que fueron las mismas palabras que acabaron con la poca paciencia que Kim tenías.

Por favor ya no deseaba más peleas.

—Ah. Eres una cabrona hija de... —Sabiendo lo que ya se avecinaba unos delgados brazos temblorosos abrazandolo desde la parte de atrás, o de su espalda para ser más preciosos, aferrándose a su cuerpo deseando que ya todos esos infernales gritos que lo envolvían haciendo eco por toda la habitación pararán inmediatamente. Kim al notar esta acción no pudo dejarla pasar desapercibido, suspirando vencido antes de calmarse un poco solamente por la presencia del mejor en la habitación. —Te pagaré el doble de lo que te pagan ellos... No, incluso mucho más si desapareces tu jodida cara de mi vista y dejas tranquilo a Jungkook, quien de igual modo tiene dieciocho años de edad y puede decidir con quien estar. Lamento que no te hayan enseñado eso en el kinder.

Aquella mujer pareció verlo por unos segundos antes de reír como si acabarán de contarle el chiste más patético de este mundo, soltando primeramente una risa nasal antes de desahogar todo en una escandalosa risa que hizo que varios de los trabajadores del hospital se extrañará y se acercaran a la puerta. —Lo dices como si me importara una mierda, yo soy su madre y el tiene que obedecerme a mi. Además, nada de esto realmente es por el dinero, todos sabemos que me encanta atormentarte. —Una sonrisa de bruja apareció cuando sus dientes perlados fueron mostrados a la luz con una amplia sonrisa de boca abierta.

—¡Basta ya! —La voz aterrorizada de él menor de los Kim presentes se escucho como un eco en la habitación, todos voltearon directamente hacia el a lo que inmediatamente su cara cambió a una de completo disgusto y asco. —Yo tengo dieciocho años. No iré contigo solo porque eres mi madre cuando por años me hiciste pasar la peor infancia y niñez que alguien podría tener, Taehyung fue el único que se preocupo realmente por mi y no puedes negarlo porque a ti solamente te importaba coger con tus estúpidos maridos.

Nuevamente la risa escándalosa. —¿Preocuparse por ti? El solo se preocupo en toda tu vida sobre cómo lograria follarte en un primer lugar, es un pedofilo de mierda el cual de no ser porque yo nunca te deje verlo hubiera hecho lo que se le pegara la gana contigo. —La mirada de Jungkook cambió a una atónita pero no fue por las palabras de su madre si no más bien por la jodida ironía que implicaban sus palabras.

Ella estaba aparentando ser una madre, como si toda su vida hubiera estado al pendiente de su bienestar y sus cuidados cuando todo era más que una jodida mentira, nunca le dejó ver a Kim por el simple hecho de que sabía que sí lo hacía no le daría dinero constantemente el cual en vez de usar para el niño lo gastaba en montones y montones de cajas de licor.

—Taehyung nunca lo hubiera hecho y si alguna vez fui abusado fue por ti y tu egoísmo de mierda. —No contuvo sus palabras gritándole a su madre directamente, Kim aún seguía en medio de ambos manteniéndolo detrás de su cuerpo como una barrera de protección.

Sin embargo esa barrera fue obligada a romperse en el momento en que su hermana se acercó a Jungkook alzando su mano, quien por instinto se encogió en si mismo poniendo sus manos frente a él como protección.

Taehyung ni siquiera se dio cuenta cuando fue empujado dejando a Jungkook expuesto pero cuando un ruido sordo sonó en la habitación y sus oídos sumbaron los ojos de todos los presentes se abrieron con impacto.

Su mano se dirigió hacia la zona afectada y Jungkook chilló acercándose rápidamente hacia Taehyung.

El había recibido el golpe.

Su hermana se alejo un par de pasos pero ya era tarde, porque apenas llegó Jisoo con el ceño fruncido dos guardias de seguridad se vieron detrás de ella viéndose igual de molestos, ni siquiera fue cuestión de minutos si no más cuestión de segundos que tomarán a la mujer de los brazos y la sacaran del lugar mientras pataleaba y gritaba.

Así fue como Kim sintió al verdadera vergüenza al ver como su madre era arrastrada fuera de él hospital mientras todos lo presentes la miraban como si fuera una maniática. Su madre pronto terminó por pasar a un segundo plano mientras tomaba con rapidez el rostro de Taehyung, sentandolo junto a el la camilla y llamando a Jisoo con una voz preocupada.

La mujer por supuesto no tardó demasiado en aparecer por la puerta, mirándolo con una pequeña mueca de curiosidad y preocupación la cual era mucho más que notoria. Las facciones de la chica se relajaron en el momento en que el menor solo le pidió avergonzado una pomada oara el reciente golpe que había recibido Taehyung a pesar de que este ya le había dicho que ya estaba más que bien sin necesidad de eso pero Jisoo ya había ido por la pomada.

—Niño insolente. —Replicó él con una voz quejumbrosa pero ya una pequeña sonrisa se había visto aparecer en el rostro de su pequeño.

—Y eso siempre te a gustado Taetae. —Descaradamente terminó por decir el azabache, guiñando el ojo en dirección al mayor.

No podía negarlo, todos lo sabían.

unhappy ও taekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora