Discusiones. Eso era lo que Jungkook podía escuchar desde adentro de la habitación de Kim en el pasillo, la voz de su madre era más que sonora desde que Taehyung salió, pidiéndole al menor que se vistiera en silencio y que no saliera del cuarto por nada del mundo. Exactamente eso fue lo hizo, recostandose un poco de la pared mientras intentaba cubrir sus oídos con angustia.
Kim Jungkook odiaba el ruido, y todo el mundo lo sabía. Pero era eso o salir mientras su madre veía exactamente donde estaba, lo que sería más perjudicante a largo plazo de lo que sería simplemente quedarse tranquilo y en silencio sin siquiera ser visto en aquella habitación.
Pero los gritos de Taehyung lo desconciertaban, porque aunque quería que la discusión diera un final de una buena vez también quería averiguar cuál era el tema que estaban discutiendo, así que se puso de pie acercándose más a la pared.
El sonido de la gruesa voz de su mayor era lo que más destacaba en el pasillo, escuchandose insulto tras insulto.
—¡Se que lo tienes aqui, no mientas Kim! Baekhyun me lo contó todo. —Escucho la voz de su madre. Quedo petrificado en su lugar al escuchar el nombre de Baekhyun ser nombrado en la conversación, sintiendo sus piernas temblar retrocediendo.
¿Baekhyun había contactado a su madre? No, era imposible porque no había manera de que lo conociera. Todo comenzó a dar vueltas por un pequeño momento sin querer caer en cuenta de la verdad, Baekhyun había llamado a su madre y le había contado absolutamente todo.
Pero ¿Por qué? No ganaba nada al arrastrarlo junto a esa horrible mujer que le había dado la vida y que lo había hecho sufrir durante años.
Baekhyun y ella ahora que lo pensaba se parecían demasiado, con esa cubierta hecha de caramelo aunque igual de podridos por dentro. Pensar que solo una palabra de su progenitora hizo que odiara a un tercero en solo segundos lo enfermaba inmediatamente.
Era un monstruo por haberlo expuesto de tal manera en frente de una persona que hubiera preferido que pensara que estaba metros bajo tierra en un ataud, es decir, muerto. Ni siquiera sabía de donde se conocían ambos pero estaba más que seguro de que no deseaba averiguarlo jamás.
Tapó su boca al sentir lágrimas acumularse en sus ojos, se sentía enfermo y traicionado por Baekhyun, incluso las ganas de vomitar comenzaban volverse abrumadoras. No deseaba ver al tipo ni aunque se lo mostrarán en una simple foto y estaba seguro de que respectivamente a eso de encargaría más tarde.
Incluso si era necesario trasferirse de universidad o a otra carrera de ser necesario.
Intento calmarse, respirando como siempre lo había hecho en busca de su propio consuelo, porque si seguía hiperventilando de esa forma terminaría teniendo un ataque de pánico. Aunque para ser sinceras ya no había mucho que salvar, porque justo ahora sus uñas se encontraban enterradas en sus brazos con abundante cantidad de sangre recorriendo sus brazos.
Terminó recostandose de la pared al no aguantar estar de pie por si solo ni siquiera un segundo más, los gritos nunca acabaron y la discusión cada vez se volvía más grande, quería estar entre los brazos del mayor aunque sea un segundo para dejar a un lado todo ese dolor que sentía en lo más profundo de su cuerpo y sólo embriagarse con su olor.
Corrió hasta el closet, sacando una de las sudaderas de Taehyung para así ponersela, terminando por sentarse en el suelo en el pie de la cama, era el único consuelo que podía darse así mismo en ese momento que le recordaba demasiado a todas las peleas que tenía su madre con sus novios, terminando por ser el quien pagaba por la frustración de aquella enferma mujer.
Pero las voces seguian escuchandose claramente por mucho que intentará bloquearlas.
—¡Devuelveme a ese maldito mocoso Kim Taehyung, traidor de mierda! —Grito aquella mujer. Un escalofrío recorrió por su espalda de manera inconsciente.
Golpes. Eso se escucho pero lamentablemente no eran dirigidos hacia una persona, aquella mujer estaba derribando cada puerta del pasillo que se le atravesara para conseguirlo a él.
Quiso entrar en pánico pero sólo se puso la capucha comenzando a llorar, rascando su cuerpo de manera inconsciente para buscar calmar su ansiedad.
Giro su cabeza suavemente en dirección a la puerta y está fue abierta con rudeza, azotando contra la pared con fuerza.
Sintió como si su mundo estuviera cuesta abajo por un momento.
—¡Lo sabía! —Grito de nuevo aunque está vez estaba forcejeando por liberarse de él agarre que Taehyung había ejercido al tomar su brazo con fuerza como si no quisiera dejarla acercarse a él.
—Ni se te ocurra tocarlo. —Gruñó el hombre. Si el menor de los Kim no estuviera llorando definitivamente tuviera muchas ganas de hacerlo en ese momento.
La mujer se soltó del agarre de una manera, encarandolo.
—Más de lo que tu lo has tocado es imposible pervertido de mierda. ¿Te excitaba de la misma manera cuando era solo un mocoso también? Eres un jodido enfermo, Kim. —Cómo si fuera veneno dijo justo en frente de la cara de Kim y Jungkook supo que todo iría de mal en peor cuando vio la mandíbula del mayor tensarse. —Pedofilo de mierda, no me hagas recordar siquiera cuando te escuché masturbandote pensando en mi hijo.
—¡¿Tu hijo!? —Grito el mayor cansado de escuchar la voz de su irritante hermana. —Mala elección de palabras para la mujer que maltrato a su "hijo" física y psicologicamente solo porque tu jodido marido te abandono dejándote un niño a tu cargo.
—Él es el jodido culpable de todo eso. Kim, no pienses en meterte en mi vida o en la de Jungkook cuando te importa media mierda lo que le allá pasado mientras puedas actuar como un héroe y cogertelo en el proceso ¿No es así? —Entre dientes soltó ella, sonando burlesca al hablar.
Y luego se giro en dirección de Jungkook, acercándose a su hijo antes de tomarlo del brazo y obligarlo a ponerse de pie, sin importarle los forcejeos que este emitía.
—¡Déjalo! ¡Esta teniendo un ataque de pánico! —Taehyung pareció alarmarse, acercándose rápidamente a Jungkook para tomarlo el mismo del brazo y poder soltarlo del agarre de la bruja, colocándolo detrás de su cuerpo en defensa.
Pero entre los gritos y peleas Jungkook sintió que ya no podía aguantarlo más, cubriendo sus oídos antes de que todo se volviera negro a su alrededor.
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unhappy ও taekook
FanfictionAveces para conseguir la felicidad, debes vivir siendo infeliz. [ Esta historia es completamente mía, no se permiten copias u adaptaciones sin mi consentimiento previo. ] fecha de inicio : 10/08/20. fecha de historia finalizada : 00/00/00.