Stay Gold

Memorias

Spoilers de Wano⚠️

Izo tenía muchos sentimientos clavados en su interior. A veces los recuerdos le jugaban en su contra y le devolvían a la época en donde tenía que proteger a su hermana de las calles y al mismo tiempo sobrevivir el fuerte frio de Wano, incluso los atajos que tomaba para evitar a los sucios hombres del lugar llegaban a su memoria de vez en cuando para recordarle lo que alguna vez fue su vida y lo que había dejado atrás.

Aunque lastimosamente la pestilencia no fue lo único que dejo atrás en su búsqueda a un camino mejor.

Durante las noches miraría a la luna buscando algún tipo de consuelo, imaginando una vida con personas que ya no yacían en ese mundo. Se preguntaba como reaccionaría Oden a su presente, si tal vez se reiría de la ironía de adoptar al hijo de la persona que los separó en el pasado. Izo casi podía escuchar el parloteo de su fantasma en su oído y las lágrimas acumulándose en sus ojos.

Izo no era idiota, el conocía muy bien la procedencia del padre biológico de Ace, pero eso era un tema del cual no quería indagar ahora.

También se preguntaba si donde sea que su hermana se haya ido estaba bien, si todavía seguía comiendo saludable y si su maquillaje no se habría estropeado en el transcurso del tiempo.

Los arrepentimientos a menudo llegaban en forma de recuerdos de su juventud y a veces la sensación era demasiada hasta el punto de asfixiarlo. Normalmente pasaba cuando veía a los mas jóvenes hacer alguna locura y recordaba al hombre que paso días y días arrastrándose detrás de un barco para poder zarpar.  Y se reía, sintiendo su garganta cerrarse y su respiración cortarse.

En esos momentos, cuando todo se sentía vacío y perdido, unas manos se realizarían por su cintura y lo reposarían en su pecho. Izo reconocería la esencia de vainilla y se relajaría al ver al singular pompaudor a su lado.

"¿Te sientes bien?" Preguntó Thatch. "Estas pálido." Izo tomo una respiración y dejo que el castaño la arrastrará hacia un lado.

"Sí. Solo... me llegaron algunos recuerdos." Murmuró de regreso.

"¿Estas seguro?"

Sabía que estaba preocupando al castaño, su amado siempre había sido de aquellos que detectaban incluso el más mínimo cambio en su ser y a veces no podía evitar maldecir su habilidad. La mayoría solía decir que Izo tenía ese tipo de habilidad en las personas, sin embargo, el verdadero enemigo siempre fue el chef.

El podría sacarle información a quien quiera y tal vez deducir sus sentimientos en base a ello, pero para Thatch eso era básicamente un instinto natural y podía confirmarlo por si mismo.

"Haruta ha estado teniendo problemas y Ace también." Musito Izo. "Me recuerda un poco a como todos antes nos peleábamos por la atención de Oden." Dijo riéndose húmedamente.

"Los jóvenes son jóvenes, no podemos hacer nada." Dijo Thatch. "Supongo que todos los ciclos se repiten de vez en cuando." Y a veces se preguntaba esa misma cosa. Si realmente la juventud volvía a cometer sus mismos errores y conflictos, entonces realmente estaban condenados.

"No quiero que terminen como terminamos nosotros."

Thatch le miro con preocupación; puede que una parte de la nostalgia combinada con la amargura del pasado le siguiera afectando. A pesar de las décadas, el frio malestar seguía clavándose en su pecho.

"¿Te sigues arrepintiendo por ello?"

"Es difícil no hacerlo ¿Sabes?"

"Izo..."

"En ese momento debí haber ido con ellos, haber sufrido con ellos y en todo caso si nuestro destino habría sido morir, entonces debí haberlo hecho con ellos."

"No puedes culparte por buscar tu felicidad. Ellos no querrían eso."

"Sin embargo nunca lo sabremos." Dijo con pesar. "Me voy a mi habitación, llámame si necesitas algo."

Y entonces camino hacía el único sitió que resguardaría su pena sin juzgarlo.

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Navidad se acerca ¿Debería hacer algún especial con ello?

Un poco de la perspectiva de Izo, siempreme pregunté si se arrepentía de no haber estado allí con Oden y los demás, así que aquí lo puse.