Luna Dorada (HunterXOC)

Capítulo 1: Brujas antes que magos

La vida en las islas hirvientes era tranquila, al menos para Luna en su hogar, cada día se levantaba temprano y se preparaba para asistir a Hexside. Siempre por las mañanas dejaba el tiempo para arreglar su cabello e intentar disimular sus pecas, aunque casi siempre existían algunas rebeldes que se escapaban, pero nada alarmante, también ayudaba a su madre en la biblioteca después de las clases, todo era totalmente normal, excepto en algunas tardes cuando se escabullía para reunirse con una de sus grandes amigas o casi segunda madre en realidad, Eda, haber tropezado con ella en aquella feria o más bien haberla ayudado a escapar gracias a su alto conocimiento en magia y su capacidad de formular planes, fue uno de los momentos que cambiaría su vida o al menos algunos pensamientos que tenía respecto a la magia, pero, sobre todo con el mundo humano, apenas observó aquellos objetos provenientes de este, se sintió de alguna forma tan emocionada e interesada al mismo tiempo que no pudo detenerse para conocer cada vez más, sabía mucho gracias a ella, le tenía admiración por tener ese espíritu libre y aunque al principio fue una relación un poco obstaculizada por parte de Eda, pues siempre trabajaba sola, esa era su política, aun así esa pequeña niña llegó a conocerla mucho mejor y consiguió con el tiempo llevarse bastante bien, aunque en secreto Eda jamás admitiría que de cierta forma le recordaba mucho a ella cuando era más joven, no solo físicamente, sabía que dentro de Luna había mucho potencial, solo debía conseguir que no fuera tan apegada a las reglas, aunque no la culpaba, era de familia, la familia de Luna, los Ghostwood, esta era estricta con ella por lo que escondía ese potencial creativo y también era mucho más pequeña en comparación a su edad, pero eso era lo de menos, nunca le vino mal una ayuda extra, sobre todo si era buena en la magia, había leído tanto gracias a su madre y a los libros humanos que la hacían una buena compañera en sus aventuras que no eran legales del todo y a su vez le aconsejaba cuando se escabullía para viajar por el portal y pasar desapercibida o al menos un poco más que al principio cuando comenzó a hacerlo.

Eda siempre pensó que encasillarla en el aquelarre de ilusiones era ridículo, pero a Luna parecía no importarle o al menos eso hacía creer al resto, por su parte no le molestaba estar ahí, no le iba mal en Hexside y eso era suficiente, bueno, para sus padres, nunca le gustó sobresalir en nada, así que al menos en el segundo o tercer lugar de la clase no estaba mal. Sin embargo, cuando se colocaba su máscara y su disfraz para salir a ayudar a Eda o para pasar desapercibida en alguna de sus aventuras, le devolvía mucho la confianza que consideraba perdida, podía ser ella misma y también tenía que admitir que se veía bastante bien con su traje negro y capa, bueno si, la idea la tomo de uno de esos libros del mundo humano, quien diría que los magos de allá se vestían tan formalmente, no tenía sombrero de copa, pero esperaba conseguirlo en algún momento, aunque la supuesta magia que hacían con cartas le causaba gracia, al fin y al cabo eran ilusiones para el ojo humano y siempre había una trampa, no era magia real.

En fin , hace tiempo Luna no veía a Eda lo cual le preocupaba y tampoco recibía sus señales para que se reunieran, así que decidió ir a ver que estaba ocurriendo, apenas salió de la escuela, tuvo que excusarse con su familia de que tenía trabajos pendientes y debía quedarse tiempo extra para poder ir a visitarla.

-Bien, ha sido suficiente tiempo sin alguna señal de Eda, espero que no haya sido encarcelada otra vez, me tomo mucho tiempo quitar las manchas de mi traje la vez pasada.-pensaba Luna mientras caminaba hacia la casa de la dama búho.

Estaba a punto de llegar cuando observo a una chica salir, quedó bastante atónita al verla ahí-¿quién era y por qué no sabía nada sobre ella?-rápidamente se escondió detrás de unos arbustos para no ser vista, espero bastante tiempo para intentar acercarse nuevamente, le preguntaría a Eda que estaba pasando, comenzó a apresurar el paso cuando se le apareció Hooty de la nada.

-Buenos días, Luna-le habló muy enérgicamente.
-Oh, por titán, Hotty me asustaste, pero ey, estás sano y actuando normal, en lo que cabe para ti-dijo con una media sonrisa - ¿Qué está pasando? ¿Quién era esa chica que salió de la casa? No me digas que Eda tiene otra ayudante.
-Claro que no Lululu, ella es Luz la humana, Eda la adoptó.
-¿Qué? ¿LA QUÉ?- pregunto sorprendida, casi gritando- no puede ser... cómo es que llegó una humana hasta aquí y peor aún, como Eda la dejo salir sola, morirá en cualquier momento... no puede ser-exclamó poniendo una mano sobre su rostro-espera, se llama Luz, vaya... curioso nombre...-se dijo a sí misma con una sonrisa en sus labios.
-Se fue sin que lo notaran, es probable que Eda esté durmiendo-le contestó Hooty.
-Bien, eso tiene más sentido, tendré que resolverlo yo, no quiero cargar con la muerte de una inocente chica.
-Pues entonces debes correr porque ya desapareció de mi vista, hoot.
-Oh si, sí, dile a Eda que me adelantaré-hablo mientras salía corriendo hacia donde se dirigía Luz.