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JungKook no pudo darle la cara TaeHyung en toda la semana

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JungKook no pudo darle la cara TaeHyung en toda la semana.

Pero, eventualmente, el momento había llegado.

Como cada fin de semana que JaeBeom tenía a los mellizos, TaeHyung pasaba las noches durmiendo con JungKook, ese fin de semana no fue la excepción.

Estaban recostados en el sofá, un sábado casi por la noche con sus dos perros durmiendo cerca de ellos. Diciembre estaba a la vuelta de la esquina, así que ambos vestían enormes hoodies, pantalones de algodón y JungKook tenía sus peculiares calcetas con espacios para cada dedo, las usaba porque la sensación era buena, pero si era honesto, le gustaba más cuando TaeHyung frotaba sus pies con los suyos, un hábito tan particular al que el pelinegro ya se había acostumbrado.

JungKook dejaba salir un largo suspiro y se abrazaba más al cuerpo ajeno. Le encantaban esos días con el doncel en su departamento.

Eran sólo ellos dos.

Eso lo hacia detener en gran parte sus pésimos pensamientos, ya que era imposible no distraerse con la bonita sonrisa de su novio, sus besos o su simple presencia.

— Me encanta estar así contigo — JungKook susurraba olfateando el aroma de su propio shampoo en el cabello rubio.

TaeHyung alzaba la mirada dejando salir una sonrisa, inevitablemente besando los labios ajenos.

— A mi también — contestaba jalando un poco el labio inferior entre sus dientes. — Aunque sabes...— se recomponía un poco. — Tengo ganas como de tomar algo.

— ¿Tomar algo? — el doncel asentía. — Creo que tengo una botella del vino que te gusta — decía haciendo el amago de levantarse, pero TaeHyung negaba.

— También tengo ganas de bailar... contigo — decía con mucha ilusión.

— Oh...— JungKook desviaba la mirada al frente comprendiendo la intención de su novio.

El abogado antes pasaba la mayoría de sus fines de semana en cierto bar, cuando no veía a sus padres o cuando no veía a sus amigos, aunque a veces iba con ellos y regresaba a su departamento con alguien diferente. Pero no ha ido desde que comenzó a salir con TaeHyung. Su relación se basa más en ir a otro tipo de lugares o pasar mucho tiempo en casa descansando de la semana laboral. Y no es que extrañe esos tiempos o haya estado resistiéndose a invitar al doncel a un lugar así, simplemente no lo había deseado, pero ahora que TaeHyung lo ha mencionado... si le dan ganas de ir a pasar un buen rato acompañado de él.

JungKook incluso agradece que exprese sus deseos.

— Podemos ir a un bar en la noche — propone acariciando los labios ajenos con su pulgar. — Conozco uno con buenos tragos, buena música y no imagino que tan increíble será si llevo tu compañía... ¿Te gustaría ir?

El rubio se hincaba en el sofá abrazándolo por el cuello. — Si me gustaría ¿Vas a bailar conmigo? — preguntaba llevando las manos ajenas a su propia cintura.

Know You || KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora