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Existen una infinidad de aromas en el mundo, unos más desagradables que otros y unos más exquisitos que otros, los que te transportan a cierta época de tu vida, a cierto lugar o los qué te recuerdan a cierta persona, también los que despiertan sen...

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Existen una infinidad de aromas en el mundo, unos más desagradables que otros y unos más exquisitos que otros, los que te transportan a cierta época de tu vida, a cierto lugar o los qué te recuerdan a cierta persona, también los que despiertan sentimientos positivos o negativos en ti.

JungKook siente paz cada vez que el olor natural de TaeHyung llega a él.

Aunque la primera semana devuelta al trabajo resultó dejarlo más agotado de lo que imaginó, su cuerpo sigue despertándose no mucho tiempo después de que el sol haya aparecido con todo su resplandor. Y aunque sus ojos siguen pesados y su cuerpo cansado, no importa que su cerebro ya no quiera dormir, está bien permanecer despierto mientras pueda ser de esa manera, con su nariz en el cuello de TaeHyung y su mano colándose por delante de la pijama para acariciar la suave piel de su estómago.

El aroma característico de TaeHyung es quizás una combinación del perfume que usa, las cremas con aroma que aplica sobre su piel, el olor del suavizante de su ropa y el shampoo que usa para su cabello. JungKook no está seguro si es simplemente el olor natural de su piel o si se debe a algo más, pero por las mañanas, ese olor y el calor que emana el cuerpo del doncel, lo mantienen en completa paz.

JungKook siendo la cuchara más grande, usa su mano sobre el estómago del rubio para acercarlo más a él, sus cuerpos quedan completamente juntos mientras su nariz inhala ese aroma embriagante en su cuello.

Podría quedarse toda la vida así.

Pero el ladrido de Bam retumba por toda su habitación.

TaeHyung parece ni siquiera escucharlo, así que mientras él sigue atrapado en el mundo de los sueños, JungKook se ve obligado a despegarse de su lado para poder atender a sus mascotas.

Soltando un sonido de cansancio, el pelinegro se levanta de la cama y se encuentra a ambos canes esperando delante de la entrada de su habitación, rápidamente les abre la puerta y ambos salen disparados a las escaleras, las garritas resonando por toda la madera.

Cuando llegan a la planta baja, JungKook les abre la puerta corrediza que da al patio, ambos corren a hacer sus necesidades mientras que él entrecierra los ojos debido a los fuertes rayos de sol que impactan en su cara y pecho desnudo.
El patio es bonito y se ve aún mejor con los dos mejores amigos correteando en él, una risa escapa de sus labios al verlos jugando, YeonTan se ve gracioso siendo así de serio mientras Bam, el más joven, lo persigue a todas partes.

El dóberman luce feliz, así que JungKook no puede evitar rememorar todo lo que han pasado en esos casi dos meses que llevan viviendo en esa casa. Decide enfocarse en todo lo bueno porque es lo que más abunda, trata de ignorar los momentos en que su mente le ha hecho una mala jugada, aquellos donde se ha sentido insuficiente y temeroso de lo que pueda ocurrir en el futuro con su relación.

De pronto, la llamada de su casero el día anterior llega a su cabeza.

"El edificio es nuevamente habitable, joven Jeon".

Know You || KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora