{ Pelea }
______ pov's.
1 año después.
El año había sido muy intenso y agotador. No me podía creer que llevábamos ya un año en aquel refugio, pero así era.
El laberinto estaba totalmente terminado, y Ava nos había dicho que no dijéramos nada sobre aquello, así que Teresa y yo no dijimos nada. Teresa al final se alejó del todo de nosotros y se fue de nuestro grupo, formando otros amigos con los que dormía.
Mi hermano Thomas se enfadó conmigo por ocultarle tantas cosas, pero días después decidió perdonarme, no quería estar enfadado conmigo, nunca lo ha estado.
Minho y él siguieron haciendo juntos las pruebas, ahora confiando plenamente el uno del otro. Newt y yo también empezamos las pruebas, aunque, tres meses después. Al hacer tantos ejercicios de confianza, hizo que las pruebas fueran más fáciles para ambos.
Ava nos dijo que hoy empezaríamos las simulaciones, y aquello no me gustaba nada. Enserio, empezar a jugar en un terreno que no conocíamos no era mi idea de la diversión.
Bueno, aún tengo muchas cosas que decir, pero ya irán saliendo, es más divertido así, ¿no?
— Por última vez —mi hermano se exasperó, levantándose de la mesa—. Mi nombre es Thomas, ¿estamos? —apuntó a Gally, quien tenía una sonrisa divertida en sus labios.
Ahora no le gustaba que le llamáramos Stephen. Supongo que no quería recordar todo lo que pasó hace un año. Pero él y Gally siempre acababan discutiendo sin razón aparente, y aquello nos divertía a los demás.
— Oh... lo siento, Stephen. No me volveré a equivocar —sonrió con burla el chico, haciendo que el nombrado se pusiera tenso.
— ¡Es Thomas! —gritó, lo que le hizo sonreír más fuerte al otro, siempre lograba sacarlo de sus casillas.
— Chicos, ¿todo bien por aquí? —un guardia se acercó a nuestra mesa, mirando a los dos chicos que peleaban. Thomas se sentó de nuevo, a lo que el hombre preguntó;— ¿Thomas todo bien?
— Si, todo está bien. —respondió después, y el hombre asintió y se retiró.
— Madre mía, aquí ya no se puede hacer una broma —canturreó Gally, moviendo su tenedor con paciencia, apoyando uno de sus brazos sobre el respaldo de su silla.
— Cierto, es como si los guardias estuvieran al pendiente de vosotros cada veinticuatro horas —añadió Siggy, a lo que Newt, Minho, Thomas y yo nos miramos de inmediato.
Si, éramos así de discretos entre nosotros.
— ¡Hola a todos! —exclamó Janson, entrando con dos guardias a su espalda, con una lista en las manos—. Nombraremos a las personas que se harán las pruebas hoy, mañana serán otros diferentes, ¿de acuerdo?
Nadie contestó. Era lo mismo de todos los días.
— Gideon, Charles Dawing —todos miramos a Chuck, quien rodaba los ojos ante su nombre, mirando mal a Janson—, Jackson, Nickolas —un bufido se escuchó por parte del último nombrado—, Teresa Agnes, Sigmund Freud, Austin, Marie, Frédéric, Gally Clearing y Albert.
Alby, Nick, Gally, Siggy y Chuck se miraron entre ellos al escuchar sus nombres salir de la boca de Janson. Este no dijo nada más y se retiró.
— ¿Teresa Agnes? ¿Sigue aquí? —bromeó Gally, con una expresión molesta en la cara, a lo que los demás se miraron.

ESTÁS LEYENDO
Never stop running
Losowe¿Y si la historia comenzara a contarse desde el principio? Antes de que el laberinto se hubiera realizado. Cuando los protagonistas de esta historia no eran más que unos críos. Unos niños especiales. Unos niños que habían sobrevivido al Destello por...