Jimin, Anne y su padre regresan al pequeño cuarto del señor en el cual, ellos vivían. La castaña camina al centro de ambos, tomando sus manos y siendo levantada algunas veces.
Cuando están frente a la casa, el padre le entrega las llaves a Jimin, el chico sube los escalones de forma rápida, introduce la llave a la cerradura y luego abre, las luces del pequeño cuarto se encienden—¡Sorpresa! —gritan con fuerza los dos hermanos mayores de Jimin, mientras lanzan confeti.
El chico mira los globos, un pastel sobre la mesa, comida y obsequios, sonríe ampliamente al sentir las manos de su padre, una sobre cada hombro, y Anne lo toma de su mano izquierda y le pide que pase.
—Feliz cumpleaños, Jiminie —lo abraza fuertemente, Chanyeol.
—¡Hermanito! —vocifera Sana, atrayéndola hacia ella. —Feliz cumpleaños, cariño —lo saluda, abrazándolo con fuerza mientras se mueven de un lado a otro.
—Gracias —habla Jimin—. Gracias a todos.
—A comer —dice, desesperado el peligris.
Sana pone música en su celular y mientras come un pedazo de pizza, baila junto a su hermanita menor. Jimin, Chanyeol y su padre se limitan al verlas, pero luego de un tiempo se unen al pequeño baile que las hermanas Park tienen.
El señor Park, observa a sus cuatro hijos, sonríe y cierra sus ojos.
—Ven papá, bailemos —le propone Jimin, tomando una de las manos del señor.
Después de casi una hora de baile, todos toman asiento, por su parte, Jimin, abre los obsequios que sus hermanos y su padre le han comprado.
—Sana —articula con seriedad el chico, al ver la camisa pequeña que le ha regalado.
—Te veras hermoso, lo sé —dice la castaña abrazando a Anne, mientras esta empieza a quedarse dormida.
—Ni siquiera sé si entrare en ella —suelta el menor, haciendo reír a su padre y a su hermano mayor.
Cuando Jimin ha terminado de abrir sus obsequios, mira a sus tres hermanos y luego a su padre.
—Los amo, y haría lo que fuera por ustedes —declara frente a su padre y hermanos. —Los amo demasiado —agrega con sus ojos acuosos para luego quedar en silencio.
Nadie se atreve a decir algo, ni siquiera el señor Park.
—Y.…, también lo amo a él —añade, Jimin. —Amo a Jungkook —confiesa.
Chanyeol mira a su padre y todos continúan sin decir algo.
El castaño se pone de pie, camina hacia la puerta y sale de la casa.
—Espera —espeta el señor Park, al ver a Chanyeol ponerse de pie. —Iré yo —masculla, poniéndose de pie.
Al salir de la casa se encuentra con su hijo sentado en uno de los escalones, el señor toma asiento sin decir nada, alza su vista al cielo y mira las estrellas iluminando la noche.
—¿Qué sucede? —pregunta su padre.
—No quiero estar lejos de él, papá —responde con sinceridad, Jimin—. Estas semanas me he dado cuenta de lo mucho que lo aprecio, y de que lo amo.
El señor asiente.
—Te creo —susurra su padre—. Te creo, porque te diste cuenta por ti solo, nadie te presiono a que tomarás esa decisión.
El señor Park gira un poco su cuerpo y toma una de las manos de su hijo.
—Jimin, sé que es difícil debatirte entre sí estará bien o no, pero cuando te enamoras y conoces a la persona indicada, lo sabes. Lo sabes con el simple de hecho de verlo frente a ti por la forma en la que tu corazón palpita y en la manera que te sientes cómodo, amado y confortado con la presencia de la otra persona —el señor, hace una pausa breve. —Por eso, haz lo que creas que es correcto, lo que tú corazón te pida hacer es lo que debes hacer. Y claro que habrá peleas, desacuerdos, luchas, alegría y amor, pero todas esas cosas sirven para fortalecer la relación, porque cuando hay amor el resto no tiene importancia si tienes a la persona indicada a tu lado. Van a sentirse capaces de superar lo que sea —Jimin, asiente.
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RAVEN
RomanceJeon Jungkook, dueño de restaurantes y bares de toda Inglaterra, se ve en un extraño aprieto luego de que su hermana, la cual, deja a su cargo a su hija. Todo empeora cuando se da cuenta que para adquirir la empresa de seguridad de su abuelo y la cu...