Noviembre del 2022, unas semanas antes del gran mundial
JAZMIN.
Disfruto la buena vida que me provee Dios. Son las seis de la tarde, al ser verano el sol ni siquiera había entrado. Estaba recostada en el camastro con los lentes puestos, un libro sobre las piernas y un matecito con media lunas en la mesa de al lado. Valen, la novia de mí hermano, también estaba sentada a mí lado mientras me contaba cómo le había ido con la pediatra de Olivia.
Olivia corretea con una muñeca en mano, jugando felizmente como la niña que era.
—Y la pediatra es un amor, siempre te lo recuerdo —Valu sonrió— ¡Olivia, no toques eso! Ay, ésta pibita me va matar.
—Vos podes —me reí divertida, agradecida de no tener ni pareja, ni hijos. A mí parecer era una actividad estresante, pero era sólo mí opinión.
Desde hace un año que vivo con mí hermano y su familia. No planeaba quedarme mucho más tiempo, pero disfruto estar con ellos y con mí pequeña sobrina. Hemos tenido que viajar de Argentina a Portugal por el traslado de Enzo. Pero también viajamos a la copa América y a la Finalissima para ver a Argentina jugar desde las tribunas. Enzo los admira mucho y sé que su mayor sueño es ser titular con los chicos.
Enzo me presentó a todo el equipo en 2021, el era un fan más, no lo conocían mucho. Pero todos se portaron muy bien con el y conmigo. Allí fue donde me quedé flechada de Emiliano, que sabrá Dios donde estará ese hombre ahora mismo. Hace tiempo que no lo veo.
Es como mí crush imposible, porque escuché que le propuso matrimonio a su novia. Aquello me deja pensativa.
Mientras Vale persigue a Olivia, me dedico a revisar mí instagram y la red social de cierto hombre. Sonrío como boba observando sus fotos y lo lindo que es.
Dios, Jazmin. ¿Cuando vas a superar a éste hombre?
En serio, que vergüenza. Ni siquiera a mi ex novio tardé tanto en superar como a Emiliano. Que jamás siquiera me dió la hora.
Estoy loca.
—Qué miras —casi me hago pis cuando noto a Valentina atrás mío, mientras carga a la bebé. —¿Ese es el Di.. ?
—No —apago el teléfono y me acomodo los lentes de sol, muy digna.
Valentina se ríe.
—¿Cómo que no, boluda?
—Que no, que no —niego rápidamente y en ese momento un grito nos asusta a Valen y a mí.
Y vaya grito, eh.
—¡LAAAA CONCHAAAAA DE LA LORAAAAA! —¿Es Enzo el que está gritando como si no tuviera vecinos?
—¿Y ese qué? —miro a Valentina confundida y ésta se encoge de hombros, con la misma expresión que yo.
—No sé, igual y se pegó el dedo chiquito del pie con algún mueble.
—Y anda a ver.
—¿Y yo por qué?
—Por qué sos la novia, pelotuda.
—Y vos sos la hermana.
Miro a Valen con seriedad y la pelinegra intenta aguantar la risa mientras Olivia nos mira con cara de y éstas qué.
—Bueno, voy yo —me quejo perezosamente, levantándome. En ese momento llega Enzo, eufórico. —Va, que vino el.
—¿Qué pasó, mí amor? —busca saber Valen, con sus apodos diabéticos. Tan linda ella.
Enzo no trae remera, revelando todos sus tatuajes. Solo trae un short de fútbol negro, unas chanclas del mismo color y el celular en la mano. Tiene una sonrisota en la cara que no se la borra ni mis notas del bachillerato.
—No me lo van a creer... —Enzo intenta tomar aire. Valen y yo nos colocamos una al lado de la otra, mientras ésta vez yo cargo a Olivia, expectante. —En serio, no me lo van a...
—¡Decílo, pelotudo! —le grito, exasperada.
Los argentinos no teníamos mucha paciencia.
—Me llamó Scaloni —quién mierda es Scaloni.
—¡Qué bien, mí amor! —Valen sonrió amorosa, tan chupamedia como siempre— ¿Y qué te dijo?
—¿Quién? —quise saber, completamente inadaptada. Enzo me lanzó una mirada de sos pelotuda o te haces.
—Vos definitivamente tenés el cerebro en forma de nuez —Enzo se tapa la cara— ¡Scaloni, el director técnico de la selección de Argentina!
Aaaaaah.
—Ay, bueno, perdóname. No seas agresivo.
Es que mí mente, de toda la selección sólo recuerda a Emiliano, no voy a mentir.
—Bueno, a lo que iba —Enzo vuelve a emocionarse— Me llamó y me dijo, a que no adivinan qué...
Me ahorro los comentarios sarcásticos para no interrumpir la felicidad de mí hermanito mayor.
Pero que sepan que me está costando mucho.
—¿Qué, mí amor? —Valen continúa sonriendo.
—Me mandó la lista de los convocados para el mundial Qatar 2022, ¡Y yo estoy ahí!
Valen grita emocionada, lanzándose contra su novio para comérselo a besos. Le tapo los ojos a Olivia mientras sonrío felizmente en dirección a Enzo. Sus logros me ponen muy orgullosa.
—¿Ósea que vamos a ir a Árabelandia, gordo? —sonreí soñadora. Enzo y Valentina dejaron de besarse, pero siguen abrazados.
—Se llama Qatar, Jazci.
—Ya lo sé, pelotudo. No sé te puede cargar a vos.
—No —Enzo sigue feliz, se acerca a mí y me abraza, al igual que a Olivia que no entiende una mierda. —Las amo chicas, ustedes son mis pilares. Me han acompañado en las inferiores y ahora se merecen totalmente ir conmigo al mundial.
Siento que una lágrimita se me va escapar así que hundo mí rostro en el pecho de mí hermano para que no me vea. Me da vergüenza que me vea llorar por el como cuando tenía cinco años.
—¿Y de casualidad sabes que arqueros fueron convocados? —pregunto inocentemente, separándome de Enzo. Valentina me mira con una ceja enarcada mientras ella ahora carga a su bebé, she knows.
Enzo, por otro lado, no pilla ni una. Su felicidad no le permite darse cuenta que claramente estoy preguntando sí Emiliano va ir a Qatar.
—Tres, claro. Franco, Gerónimo y Emiliano.
La forma en la que mí corazón late con tanta fuerza al oír tan solo su nombre, no es normal. Pero ya es un hecho, lo volveré a ver en Qatar. Y será completamente torturoso desearlo desde la distancia, mientras su esposa mira revistas de vestidos de novia.
Sin embargo, no olvido la prioridad. Mí hermano acaba de ser convocado para jugar en un mundial, para la copa del mundo. En compañía de tantas estrellas como Di María y Lío. Mí hermano no debe caber del orgullo y yo tampoco. Su felicidad, es mí felicidad. Independientemente de lo que pase entre Emiliano y yo en éste mundial.
Holis, bienvenidos al primer capítulo. Gente que llegó por tik tok, gente que llegó por que Wattpad se los recomendó. Je, je, je.
¿Qué les pareció el capítulo de hoy?
Intenté no hacerlo tan extenso, al ser el primer cap. Al menos, confío en que expliqué lo principal.
Sí te gustó el capítulo, déjame una estrellita y un comentario de apoyo. Te quiero!! Nos vemos en el siguiente capítulo.
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Fugaces | Dibu Martinez (TERMINADA)
Fiksi Penggemar>> Ella se enamoró primero, pero el se enamoró más fuerte. << Jazmín Fernández era la menor de cinco hermanos. Con 20 años, era la favorita y la protegida de Enzo Fernández, su hermano mayor y conocido jugador profesional de la selección de Argentin...