Especial 14 de febrero parte 2/2
Llegué a casa y lo primero que hice fue llenar de cariño a Skyla, que me recibió de la forma más dulce posible. Pobrecita, todo el día encerrada. Se supone que ahora debo sacarla a pasear sin embargo debo preparar muchas cosas aún para la fiesta sorpresa de Emi.
—¿Qué te parece sí le preparamos algo bonito a papi? —le acaricié detrás de las orejas, con la voz melosa— Sí, eso te gusta ¿no? ¿Ya lo extrañas a papi? Yo también, vamos eh.
Skyla me siguió felizmente mientras yo me ponía a acomodar las bolsas. Me compré un hermoso vestido blanco, de hilos plateados, escote ligeramente abierto y bastante corto, quedaría perfecto con un par de tacones plateados. No era mucho de usar tacones, pero para la ocasión estaba. Así al menos no parecería un llavero al lado de Emi.
A Emi le compré prendas que creía que le gustaría y le quedarían bien. Una camisa blanca, pantalones blancos y tenis blancos (pues la temática era en blanco). Pero las bolsas ya estaban en casa de Emi, su amigo se había encargado de recogerlo.
Al principio sería en blanco y celeste, pero ya habría mucha decoración de ese tipo y no quería que los invitados parezcan pitufos, así que me decidí por el blanco.
Mí teléfono sonó y atendí velozmente, se trataba de Ale Muñoz, el mejor amigo de Emi. Afortunadamente seguía acá en Inglaterra e iba ser una gran pieza para mí sorpresa.
—Comadree —me saludó animado— Estoy en el gimnasio del Aston Villa, los chicos están a punto de salir. ¿Llevo a Emi para su casa?
—Ajá —afirmé, yendo de un lado a otro, buscando unas cosas que me faltaban— Mandáme un mensaje cuando lleguen a la casa, ahí le voy a llamar y le diré que no podré pasar el día con el hoy. Ya sabés que hacer ¿no?
Me sentí un poco mal de hacerle esto a Emi, pues el ya estaba lo suficientemente mal por haber perdido el partido hace unos días. Pero era necesario para que la sorpresa lo sorprenda de verdad.
—Síp —oí su risa malvada al otro lado
de la línea— Cuando le digas que no podrás estar con el, lo llevaré a un lugar para "distraerse" y ahí lo noqueamos y cuando se despierta... ¡Sorpresa!Me reí, esperando que esté bromeando.
—Pensé que solo le cubriríamos los ojos.
—Ah sí, eso —mm, sospechoso— Bueno, te dejo, Emi ya viene.
Me emocioné ligeramente, ya lo extrañaba.
Aveces sentía que con cada día que pasaba, amaba más a ese hombre.
—¡Avisáme eh!
. . .
EMILIANO.
Conducí a casa a velocidad de la luz, con mí amigo hablándome de pavadas al lado. No le presté mucha atención, mí cabeza estaba en otro lado.
Por un lado, todavía tenía la espinita de haber perdido el domingo contra el equipo de Juli. Entrenábamos como locos todos los días, intentando hallar cuál era el error que cometíamos. Pero nada, los chicos no parecían darse cuenta. Se excusaban con que el City de por sí ya era un club grande.
Y lo era, pero nosotros podíamos serlo también, si nos esforzabamos.
Aveces me ponía nostálgico y extrañaba mucho el mundial. Jugar con la selección era algo increíble y casi mágico. Todos nos entendíamos tan bien y Scaloni hacía estrategias estupendas. No se comparaba nada al DT de Aston Villa que lo único que sabía hacer era hablar mal desde la comodidad de su silla. No lo soportaba, últimamente no soportaba a nadie. Si pudiera dejar todo y volver a mi querido Mar del Plata, lo haría. Pero tenía responsabilidades y contrato que continuar. Además, Jaz estaba acá. Conmigo, finalmente. No todo era tan malo.
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Fugaces | Dibu Martinez (TERMINADA)
Hayran Kurgu>> Ella se enamoró primero, pero el se enamoró más fuerte. << Jazmín Fernández era la menor de cinco hermanos. Con 20 años, era la favorita y la protegida de Enzo Fernández, su hermano mayor y conocido jugador profesional de la selección de Argentin...