⸂ Sugar ♡ Ice ; gruvia, au.

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Al alejarse de Gray, le sonrió. Se le marcaban los hoyuelos a los costados de las comisuras, detalles que él no se había dado cuenta. Quiso levantar las manos para corresponder al abrazo luego de segundos en procesar lo que pasaba. Justo ahí, Juvia se alejó con mayor ánimo.

Tuvo que pensar rápido para sacarla de la sala del departamento de Cana. Al fin conoció en persona a su jefe, al padre de Cana, al tipo que tenía ciega y sufriendo a Juvia. Tenía una mala espina; no concuerda el que ese sujeto se haya deshecho de Juvia y ahora viniera por ella. ¿Para qué?, ¿quiere recuperarla? Eligió con quién estar, con una mujer de su edad, no una chica joven sin experiencia en nada.

¿En qué se ha metido él también? Juvia desea conocer, salir y experimentar, recuperar el tiempo perdido. Cuando habló con Jellal al salir de la cafetería Strauss, ninguno pensó que el primero en sentir algo sería él. Le mintió a Juvia para no darle problemas, ni presionarla. Está dispuesto a hacer todo bien y con sumo cuidado, para ello tiene que ir lento. No apurará nada, perderá más en vez de ganar.

Jellal concordaba con él totalmente, olvidando todos sus malos consejos. Nada de enamorarla al estar ya desilusionada de ese alguien desconocido. Debe estar seguro que ella sienta lo mismo por él, ver sus actitudes, señales, si siente celos...

Por ahora, nada. Sí afecto. Es más cariño de amiga que algo más.

Juvia está empecinada en ser su mejor amiga para competir con Erza y Ultear. Será difícil. ¿Cómo hacer acciones lindas para ella sin que se confunda en que es un buen amigo? No es así de simple, no quiere convertirse en su mejor amigo, y a la vez, tiene miedo en avanzar tanto con ella.

Miedo a que la relación se convierta en un tira y afloja.

Jellal le negó. Duda que Juvia sea esa clase de chica, ni menos ir por ese lado si ya pasó por algo similar, ¿no? Evitará a toda costa llegar a ese punto con él.

Al menos, le permitió entrar. Ese fue su primer paso. Se sintió raro, no en mal plan. El abrazo fue inesperado y permitido. Él lo necesitaba más que ella.

Se sintió bien.

Se sintió nervioso.

¿Cómo llevarlo sin apresurar nada? Apenas y ella salía de una desilusión, sin querer tener un tipo de relación, ni amarrarse a alguien. Quiere disfrutar.

Tiene un lío. No llamará a Ultear, esta vez no le contará, él solucionará y hará todo a su manera. Ojalá sea la correcta y no se arrepienta.

Y, sobre todo, que no le pase nada malo a Juvia. Le pidió que por favor, si le pasaba algo más con ese sujeto, le diga, al menos a Levy.

Juvia asintió, una vez bajando del auto. Sin embargo, ella le pidió esperar, corriendo a la tienda de víveres. Al volver, le entrega por la ventana un pequeño paquete de dulces ácidos como agradecimiento por todo.

―Los regalos deberías guardarlos para navidad o cumpleaños.

― ¿No los quieres? Está bien. ―mete la mano a la ventana, agarrando el paquete, el cual Gray lo sostiene bien fuerte para que no se lo quite.

¿Sí quiere el regalo?, ¿no era para navidad y cumpleaños?

―Haré una excepción ―medio sonríe, descansando el paquete de dulces ácidos en el asiento vacío―. ¿Quieres que pase por ti en la noche?

―No. Juvia se irá con los Strauss ―de nuevo se niega, esta vez sin ser una directa de Gray. Es preocupación en ocurrirle lo mismo―. Estaré bien, Gray. Si estoy cerca de ellos, nada pasará.