Unforgettable. (Yaoi/Gay/M-preg)

23. Localizar.

Lo encontraron, avisaron apenas su paradero sus sirvientes con noticias y con quién estaba, sintiéndose un poco más tranquilo por saber dónde estaba pero el enojo haciéndose más presente de lo que ya estaba. Soltando un suspiro saliendo vapores de su nariz. Ni una llamada de sus hijos de que su Mauricio estaba con ellos, estaba molesto y sus dientes empezaron a rechinar. Traición pasaba por su mente, no pensando claramente y sus pensamientos negativos lo desviaban a lo peor.

"Ellos no quieren que estemos juntos" "Fue su plan desde el inicio" "No te aman" "Te abandono"

– No... Basta – golpeando su cabeza con su puño, agarrando su cabello con fuerza. Esa parte muy oscura que era controlada, disminuía cada día que pasaba sin saber el paradero de Mauri.

Tratando de calmarse y no pensar más así, sus hijos lo amaban y lo cuidaban, por algo estaban juntos. Respirando varias veces para calmarse y acomodando su cabello hacia atrás, moviendo sus brazos para cambiar su ropa. Su traje negro cambiando mientras hacía tronar su cuello, estaba deseoso de encontrarse con su esposo. Lo necesitaba cerca y por su mente pasaban ideas sobre encerrarlo, que nadie lo viera y no saliera nunca de donde lo tendría para él.

– Es tiempo – hablo con sus ecos escuchándose, suspiro. – De que la familia se reúna – una sonrisa oscura, su hermano viéndolo queriendo desaparecer en ese momento.

– ¿Necesitas algo más? – pregunto, quería alejarse lo más posible de ahí y no quería acompañarlo. Sabia de que ánimos estaría su hermano menor.

– Te llamaré si te necesito – acomodo los botones de su camisa, volteando su rostro. – Por ahora sigue con tu misión de encontrar a tu cómplice, largo.

Apenas lo menciono, una sombra oscura apareció en sus pies desapareciendo en ella, no se le acercaría en esos momentos ni a él ni a su familia. Tenía todavía una tarea que hacer pero por ahora lo mejor era estar alejado de su hermano.

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Mauri estaba dentro del edificio, Kara y Neo sabían que su padre debía estar buscándolo como un loco a Mauricio. Lo mejor era moverse de lugar pero sin alejarse tanto, Mauricio tenía el plan de buscar a Max y lo obedecían pero siendo precavidos.

Kara estaba en una misión de buscar información, tardaría unos días mientras que Neo y Dan se quedaban a cuidar a Mauri. Buscando a Neo y avisarle que su padre quería cocinar, debía avisar que iba rápido a la tienda para las cosas que necesitaba Mauricio.

– Neo – estaba en el techo del edificio, el viento mover su cabello viendo hacia la vista de la ciudad. Admirando a su destinado, tan guapo y sexy con esa mirada. – Oye, Neo – el mencionado volteo y le sonrió, Dan sonriéndole de vuelta.

El aire se sentía más que antes, León apareció de la nada en su aspecto temible, con un gran tamaño, pesado y enseñando sus dientes. Esperando atacar y gruñendo con fuerza a lo que venía.

Neo con una rapidez llegando hacia Dan, colocándolo detrás de él. Mientras que esté sacaba sus armas que ocultaba entre su ropa. El viento empezó a soplar más fuerte y truenos empezaron a verse, el ruido fuerte se escuchaba después de que aparecían. Un trueno cayendo justo enfrente de ellos y de ahí saliendo Ángel.

– Que inesperada reunión familiar – dijo Ángel con sus ojos oscuros. – Me entristece que mis hijos no me llamaran a la fiesta familiar, debemos estar todos juntos ¿Saben?