One shots -PEDIDOS-

"¡Producción! II"-RIVERS_GG-__G!p

Narras tú

–No se te vaya a quemar la comida– negué mientras ella tomaba el borde de mi pantalón para bajarlo.

–Claro que no...no es como que olvide hasta cómo respirar cuando me tocas– se rió y besó mi miembro por sobre el bóxer.

Tomé la cuchara para seguir revolviendo y gemí cuando mordió levemente por sobre la tela.

–Creo que mejor apago la cocina, voy a terminar quemándome y además incendiaré tu departamento– rió negando.

–Si tú sigues cocinando yo sigo aquí abajo... pero si paras, yo también– me quejé y seguí revolviendo la comida.

Ella bajó mi ropa interior y mordí mi labio cuando tomó mi miembro en su mano.

Abrió su boca para besar la cabeza y después la introdujo un poco, llevando su mano a la base para apretar levemente.

–Dios...– apoyé mis manos a los lados de la cocina y empujé un poco para entrar más en su boca.

Movió su cabeza para sacarme y tosió un poco, dándome un golpe en la pierna.

–Pendeja– dijo riéndose y relamió sus labios.

–Voy a quemar la comida– dije mirándola y sonrió.

–Te diría que no es cierto...pero te conozco, estás bien mensa– sonreí –Apágala– lo hice –Ahora...disfruta– volvió a besarlo y esta vez lo introdujo un poco más.

Llevé mi vista a sus labios para ver cómo se movían sobre mi largo y gemí llevando una mano a su mejilla.

–Dios mío...– sonrió sacándome para besar la base y mover su mano para masturbarme –¿Y si mejor vamos a la hab...– me miró.

–¿Y si mejor te callas?– dijo sonriendo y reí asintiendo para obedecer.

Tomó un respiro y se acomodó para hacer que mi miembro se introdujera varios centímetros por su garganta. Siguió empujando lentamente y cuando estuvo todo, levantó su vista para mirarme.

De inmediato entendí lo que quería y tomé sus mejillas para comenzar a moverme lentamente.

Nuestras miradas se conectaron y aquello lo hizo aún más excitante, así que aceleré un poco mis movimientos y comencé a soltar pequeños gemidos.

–Samy...tú sabes que yo usualmente duro una cantidad decente de tiempo– se rió y las vibraciones me acercaron aún más al orgasmo –Me voy a correr...– dije con algo de dificultad y la atraje a mi cuerpo para correrme.

Ella puso sus manos en mis muslos y justo en ese momento la puerta se abrió.

–Como nunca uso mis llaves, decidí que hoy era el día, siempre se demoran un chingo en abrirme y me dejan esperando como pendejo afuera...– me miró –¿Y la Rivers dónde está?– la mantuve pegada a mi cuerpo, pero me empujó hacia atrás y comenzó a toser cuando salí de su boca, provocando que su saliva mezclado con mi corrida, bajaran por su mentón y cuello –¡Eh! ¿Para que me invitan si van a andar de pinches calientes?– dijo dándose la vuelta y reí tomando una servilleta para que se limpiara el mentón y cuello, lo cual hizo para luego irse a la habitación.

–Era necesario y además tú entraste sin avisar– me limpié yo y guardé mi miembro en el pantalón.

–¿Cómo que era necesario? Se podían aguantar, mien– dijo en un tono enojado, pero así nos tratábamos.

–¿De dónde crees que saco la salsa especial que tanto te gusta?– dije yendo a lavarme las manos y se giró.

–Mien...– reí y me levantó su dedo medio –Pero en ese caso, igual me gustaría que me la des directamente en la boca– solté una carcajada.