One shots -PEDIDOS-

"Infieles" -LAUREN JAUREGUI- Sin G!p

Narras tú

–¿La estás pasando bien?– escuché a un costado y al mirar en aquella dirección me encontré con sus hermosos ojos.

–Si mi novio estuviera conmigo y no con tu novia estaría mejor– dije y ella sonrió.

–Shawn y Camila son muy cercanos...Estoy segura de que alguna vez pasó algo ahí– los miró mientras hablaban animadamente –¿Puedo sentarme?– asentí –¿Alguna vez se te ha pasado por la cabeza que nos son infieles?– tomé mi vaso y asentí tomando lo que quedaba en él.

–Deben haberse revolcado unas cuantas veces– miré a Lauren –Ahora deben estar planeando su próximo encuentro– asintió pidiendo un vaso de tequila.

–¿Hace cuánto estás con Shawn?– miré sus labios.

–7 meses– dije desviando mi vista a sus ojos –¿Y tú con Camila?–.

–Un año y dos meses– le entregaron su vaso –Pero no creo que dure mucho más– se tomó todo el líquido del vaso –Ya no es lo mismo– hizo una mueca –¿Alguna vez has estado con una mujer?– negué.

–Solo he tenido sexo con hombres– rió.

–No sabes de lo que te pierdes, las mujeres conocemos mucho menor nuestra anatomía– sonreí y Lauren miró al lugar donde nuestras parejas se encontraban hace unos minutos –Ya deben estar en un motel– dijo al no verlos –¿Qué tal si vamos a uno también?– se acercó un poco –Puedo hacer que te arrepientas de no haber estado con una mujer antes– sentí su aliento chocar con mi piel y relamí mis labios.

–Vamos a mi casa...Queda a unos minutos– sonrió pervertidamente.

–Creí que sería mucho más difícil convencerte– reí.

–Yo solo quiero un orgasmo muy rico– me levanté del asiento –Promete que me darás uno– mordió su labio.

–¿Uno? ¡Ja!– se levantó –Te daré los que quieras– se adelantó caminando y fui tras ella –Tomemos un taxi, no podemos manejar así–.

-30 minutos después-

Me bajé del auto y saqué mi llave del bolsillo, abrí la puerta al tercer intento de encajar la llave y la ojiverde entró tras de mí. Me siguió hasta mi minibar y tomé una de las botellas que tenía.

–¿Whisky?– asintió y me quitó la botella de las manos, la abrió y la puso en sus labios. Tomó una cantidad considerable y luego la puso en los míos. Tomé un poco pero el líquido se resbaló de mi boca y se escurrió por mi cuello. Iba a limpiarlo pero detuvo mi mano.

–Yo limpio eso– dejó la botella en la mesa y pasó su lengua por mi piel logrando que esta se erizara de inmediato. Con una de sus manos me apegó a su cuerpo y juntó nuestros labios en un apasionado beso. Apretó mi trasero y solté un leve gemido cuando mordió mi labio.

Pasó su lengua por la adolorida zona y después dejó mordidas por mi cuello y mentón. Me empujó para hacerme chocar con la pared tras de mí y volvió a juntar nuestros labios, pero ahora con su rodilla presionó mi entrepierna y con una de sus manos apretó uno de mis pechos. Repentinamente se alejó de mí y ambas teníamos la respiración muy agitada.

–¿Quieres que te folle sobre la mesa? ¿O vamos a tu cuarto?– miré la mesa y mordí mi labio –Buena elección– tomó los bordes de mi camiseta y la sacó tirándola lejos, yo desabroché mi brazier y lo lancé al piso. De inmediato Lauren se agachó un poco para llevar su boca a mis pechos. Los lamió por varios segundos pero luego se detuvo –Sobre la mesa...Ahora– mordí mi labio al escucharla e hice lo que me ordenó, pero por lo borracha que estaba de casualidad boté la botella derramando todo el contenido en parte de la mesa y el piso, no le dimos importancia debido a lo calientes que estábamos. Me quitó los zapatos y los calcetines, subió hasta mi cintura y se inclinó para dejar mojados besos en mi abdomen. Desabrochó mi pantalón y lo bajó hasta las rodillas, luego llevó una de sus manos hasta mi braga y la tocó por encima –Estás muy mojada– dijo sonriente y se quitó la camiseta –Hora de disfrutar– desabrochó su brazier y me lo lanzó.

Se subió a la mesa y comenzamos a besarnos mientras sus manos recorrían mi cuerpo.

–¿Puedo tocar?– rió.

–Un orgasmo menos por esa pregunta tan estúpida– sonreí y acerqué mi boca a uno de sus pechos, ya que ella estaba sobre mí, y comencé a pasar mi lengua por su pezón.

Estuvimos al rededor de unos 15 minutos tocando nuestros cuerpos y besándonos, pero de a poco Lauren fue bajando hasta llegar con sus besos a mi entrepierna. Finalmente me quitó el pantalón y la braga, dejándome expuesta frente a ella. Relamió sus labios y acercó una silla, se sentó y tomó mis piernas para atraerme a ella.

–Qué rica se ve mi comida– dijo y pude sentir su aliento chocar contra mis mojados pliegues.

–Mierda– dije al sentir su lengua tocarme –Ay no puede ser– mis manos se cerraron y pude escuchar su risa.

–¿Tu novio no te hace esto?– negué y gemí al sentir su lengua jugando con mis labios –¿Quieres más?– succionó levemente.

–Sí...– dije conteniendo un gemido.

–Pídemelo– introdujo uno de sus dedos pero no lo movió.

–Lauren por favor...No seas mala conmigo– sonrió.

–¿Qué quieres?– me quejé.

–Quiero más– comenzó a mover lentamente su dedo –Más rápido...¡Ah!– volvió a usar su lengua para estimularme –¡Así!–.

Usó sus dedos, labios y lengua para darme placer hasta que mi cuerpo llegó al punto máximo y tuve un orgasmo, el mejor de mi vida hasta ese momento.

–¿Arrepentida?– dijo con una sonrisa burlesca.

–Fue...El mejor...Orgasmo que...He tenido– dije respirando pausadamente y escuché su risa.

–Puedo hacerte tener muchos más...Pero necesito recibir placer también– introdujo dos de sus dedos en mí y gemí –¿Ya aprendiste?...¿O debo hacerlo nuevamente para que sepas mejor lo que debes hacer– sonreí.

–Necesito otra demostración– separó mis pliegues con sus dedos y cuando acercó su boca a la zona escuchamos la puerta abrirse.

–Puedo asegurar que le encantará– escuché la voz de Camila y Lauren de inmediato se separó de mí.

–Si no le gusta...– escuché la voz de Shawn y supe que estaba en la cocina –Qué mierda– dijo y me levanté, Lauren me dio mi camiseta así que me la puse y miré en dirección a Camila y Shawn.

–No puede ser...– dijo Camila mientras sus ojos se cristalizaban. Soltó las bolsas que traía y corrió lejos de allí.

Shawn me miró por unos segundos y limpió sus ojos para que las lágrimas no cayeran, se giró y siguió a Camila dejando unas bolsas también tiradas allí.

Lauren estaba mirando sus manos y luego comenzó a reírse.

–No puede estar pasando esto– me puse las bragas y caminé hasta las bolsas que dejaron, abrí una y tomé un rollo de papel. Lo abrí y decía "¡Felices 8 meses! Te amo _____".

–Shawn y camila no son los infieles– miré a Lauren –Nosotras lo somos–.

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Hace muuuucho tiempo que no escribía algo con drama, ya lo extrañaba djsksjsksj

LES TENGO UNA PREGUNTA, ¿CUÁNTAS DE USTEDES HAN LEÍDO OTROS DE MIS LIBROS? 🤔

LAS AMOOO, ¿DE QUIÉN QUIEREN EL PRÓXIMO SHOT? (PREFERIBLEMENTE UNA FAMOSA QUE NO TENGA YA UN SHOT ESCRITO)