Capitulo 1

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Lucy era una niña que tuvo la "dicha" de nacer en una de las familias más reconocidas de todo Japón, un año después que su hermano Shoto. Una bebé linda y sana, o eso parecía hasta que cumplió los 3 años.

Lucy: ¡papá! -llamó animadamente al pelirrojo frente a ella-

Lucy Todoroki, ella era una niña de largos cabellos blancos como la nieve. Sus ojos son de un color turquesa brillante, que parecían reflejar los misterios del mar. Su rostro siempre mostraba una sonrisa dulce y radiante, que iluminaba todo a su alrededor

Enji: ¿qué pasa? -respondió con su rostro serio-

Lucy: ¡mira ya tengo mi don! -exclamó la pequeña con emoción mientras jugaba con una pequeña llama de fuego azul en su mano-

Enji: ¿no te lastima? -interrogó, teniendo en mente a su hijo mayor y las heridas que le causaba su don-

Lucy: no, me siento muy bien -dijo con una tierna sonrisa mientras apagaba la pequeña llama que aun permanecía en su mano-

(❄❄❄)

Cinco niños estaban en el jardín trasero de la casa Todoroki. Los dos mayores se sentaban en el pasto, mientras los tres menores jugaban a ser héroes, como de costumbre.

Durante el juego, el don del pequeño de cabello bicolor se manifestó. El lado izquierdo de su cuerpo emanaba pequeñas llamas, mientras que el derecho se cubría de escarcha.

Lucy: ¡Sho-chan tiene un don!

La albina de mechas rojas corrió al interior de la casa trayendo consigo a los dos adultos.

Rei: ¡Shoto! ¿estas bien, cariño? -preguntó angustiada su madre acercándose al bicolor-

Shoto: e-estoy bien, mamá -respondió embelesado por su extraño don-

Mientras el resto de la familia se regocijaba con el descubrimiento del don del pequeño, el de cabellera rojiza solo observaba. Sus ojos adquirieron un brillo indescriptible. ¡Había funcionado al fin! Luego de tantos años y tantos intentos, por fin el don perfecto, el don que derrocaría a All Might, estaba en sus manos... o bueno, en su linaje.

Todos estaban distraídos, ya sea celebrando o planeando cómo entrenar ese don perfecto, cuando de repente un quejido de dolor de la menor de los Todoroki detuvo toda acción. Toda la atención se dirigió hacia ella.

Lucy: mami, me duele -se quejó con dolor, alarmando a todos los presentes-

Rey: ¡cariño! ¡¿qué te sucede?! -pregunto aterrada la madre al ver a la albina quejarse-

Lucy: mi pecho duele, duele mucho -dijo débilmente mientras sujetaba el área con fuerza-

Los miembros de la familia quedaron paralizados. La albina se arrodilló aún con las manos en su pecho. Su cuerpo empezó a temblar, a cubrirse con escarcha y su respiración se volvió irregular.

La visión de la menor se volvió cada vez más borrosa y, entre lágrimas y sollozos, su cuerpo flaqueó y se desmayó. Todos los presentes quedaron en shock hasta que el mayor de los hermanos decidió romper el silencio.

Touya: ¡¿qué hacen?! ¡hay que llevarla al hospital! -grito con desesperación sacando al resto de la familia de su trance-

La madre intento tomar a la menor que aun yacía en el suelo congelándose, pero su esposo la detuvo.

Enji: no la toques, no sabemos lo que tiene -dijo con calma, esto hizo que el enojo inundara el pecho del mayor de los hermanos-

Touya: ¡¿de qué demonios hablas?! ¡si no la llevamos ahora ella va... va...

Fuyumi: n-no lo digas, Touya, por favor -suplicó mientras pequeñas lágrimas caían de sus ojos-

Touya: ¡pues es lo que pasara si este idiota no hace nada! -gritó acusando a su progenitor-

Enji: podríamos lastimarla si la tocamos en este estado, lo mas conveniente seria llamar una ambulancia -dijo mas serio de lo normal-

Natsuo: ¡¿entonces qué esperas?! -grito con una mezcla de enfado y desesperación en sus palabras-

La progenitora corrió directo a la casa para llamar una ambulancia.

(❄❄❄)

En el hospital, la familia Todoroki esperaba noticias sobre la pequeña albina. Ya habían pasado varias horas desde su ingreso y la ansiedad se sentía en el aire. Uno de los más ansiosos era Touya, quien siempre había sido muy cercano a la menor. El hecho de que estuviese tan mal lo hacía querer gritar y llorar, pero no podía hacerlo, no ahí, no frente a sus hermanitos.

Doctor: familiares de Lucy Todoroki -dijo entrando a la sala-

Rei: ¿cómo está mi hija? por favor dígamelo -interrogó acercándose rápidamente al hombre de bata blanca-

Doctor: síganme por favor -dijo y caminó siendo seguido por la familia-

(❄❄❄)

Doctor: los traje aquí porque el tema es algo muy delicado -dijo cerrando la puerta del consultorio para tener mas privacidad y dirigiéndose nuevamente a su escritorio-

Ante lo dicho por el doctor todos dentro de la sala se tensaron.

Rei: por favor díganos doctor ¿es algo muy grave? -pregunto con nerviosismo la mujer-

Doctor: el tema es algo serio, ¿están seguros de que quieren que ellos se queden? -pregunto señalando a los 4 infantes en la sala-

Enji: salgan

La mirada seria del mayor logró intimidar a los tres menores, quienes salieron de la sala sin decir palabra alguna, pero cierto albino de ojos turquesas se mantuvo en su sitio con una mirada que decía "ni All Might va a moverme".

Enji: prosiga doctor -dijo ya resignado por el comportamiento de su hijo mayor y pensando en un castigo para este para cuando volvieran a su hogar-

Doctor: bien -dijo en un suspiro preparándose para lo que iba a decir -Hicimos unas cuantas investigaciones y al parecer su hija posee dos dones, es algo muy extraño ya que el cuerpo humano no suele soportar más de uno.

La cara de todos en la sala era un poema ¿dos dones?

Touya: ¿los dones de mi hermana son dañinos para ella? ¿eso es lo que trata de decir?

Doctor: algo así, pequeño. En realidad sólo uno de ellos es el que le provoca eso. Las personas con dones como control de fuego o hielo suelen tener un cuerpo capaz de soportar las temperaturas y otros factores que involucre el don, eso es justo lo que le falta a tu hermana. Su cuerpo no desarrolló la resistencia al hielo y cuando lo activa sucede eso.

Todos en la sala quedaron en shock, se había vuelto a repetir.

Rei: entonces... ella estará bien si no lo usa ¿no es así?

Doctor: me encantaría decirle que sí señora, pero me temo que no es así. Con el tiempo que el don de su hija estuvo activo logró dejar grandes repercusiones. Ahora la mitad de su corazón está congelado y seguramente el hielo se sigue expandiendo mientras hablamos.

La sorpresa para los Todoroki no podía ser mayor, el cuerpo de la albina no sólo era incompatible con su don sino que ahora la carcomía con cada segundo.

Touya: ¡tiene que hacer algo! ¡no puede dejarla morir de esa forma! -gritó desesperado-

Doctor: yo no puedo hacer nada, pero conozco a alguien que si puede...

Continuará

¡hola mis criaturitas del espacio exterior!

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Joge-Midoriya cambio y fuera

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La hermana de TodorokiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora