Eres feo (Harukyu)🌾

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Haruto siempre dejaba besos en sus mejillas, cada que se despedían o se veían de nuevo o por cualquier pretexto, Junkyu solo se sonrojaba y evitaba mirarlo a los ojos, lo ponía muy nervioso, además sentía la mirada de Haruto muy profunda y sentía que lo sabía todo. Pero, gracias a eso se daba cuenta de lo que había ignorado por un largo tiempo y es que no era su intención ignorar esos sentimientos, simplemente que no sabía sobre ellos, no tenía la mínima idea de que estaban ahí en su corazón creciendo, pero ahora lo sabía aunque no se sentía tan seguro para decirlo en voz alta simplemente los dejaba ahí fluir como Jihoon le había dicho tiempo atrás.

Lo había estado pensando, iría cambiando su actitud con Haruto poco a poco, quería ser un poco más cariñoso y atento con él haber si el mismo se daba cuenta solo, esperaba que eso funcionará, hace dos días comenzó todo, lo primero fue que le devolvió el beso en la mejilla, quería darle un poco de risa la cara de sorpresa de Haruto pero al mismo tiempo tenía vergüenza, así que hizo lo mismo de siempre, desviar su mirada, eso fue en un evento al que la familia de Haruto tenía que asistir, por ende él como esposo del heredero tenía que estar presente, sus padres también fueron y su hermana igual, hacia ya un tiempo que no lo molestaban, seguro era porque todo el tiempo estaba con Haruto, sus amigos o acompañado por alguno de sus suegros, así que seguramente era por eso.

Hoy había una nueva fiesta otra de las familias adineradas iba a comprometer a su hijo con otro chico, en realidad ellos ya estaban comprometidos desde antes de nacer pero según lo que había escuchado cada uno había crecido por su lado y justo hoy sería la fiesta de compromiso oficial, se vistió con otro de los trajes que su suegra le había mandado hacer según ella a Junkyu le quedaba de todo y se veía hermoso, Junkyu no le creía del todo pero la obedecía.

- te ves espectacular.
- muchas gracias.
- deberías aprovechar tu belleza Kyu, este fin de semana te llevaré por más ropa.
- no es necesario, ya tengo mucha.
- nunca es suficiente.
- está bien.- Junkyu solo se dedicaba a obedecer.
- Haruto ya debe estar abajo, su padre dijo que nos encontraría allá, tenía una reunión importante y llegaría unos minutos más tarde.- menciono la señora Watanabe.
- ¿Iremos solo los tres?.
- sí cariño, creo que es hora de irnos.

Ambos bajaron Junkyu vestía un traje negro bastante elegante similar al de Haruto, ellos siempre iban a juego, en cambio la madre de Haruto vestía un hermoso vestido color marrón un poco largo pero perfecto.

- ambos se ven hermosos.
- gracias hijo.- agradeció su madre llendo directo a la limosina dejando atrás a la pareja.
- tu también te ves muy bien.- respondió Junkyu con las mejillas coloradas.
- gracias kyu.- Haruto lo tomo de la mano y la besó.- pero tú eres más hermoso.
Junkyu ya no supo que decir, sus mejillas estaban muy rojas y Haruto lo miraba tan profundamente.

Entraron a la limosina, iban hablando de cualquier cosa hasta que llegaron y bajaron, cómo siempre la familia de Haruto robaba miradas algunas de envidia y otras de admiración, pero ellos ya estaban acostumbrados, claro excepto Junkyu que sintió las cámaras casi frente a su rostro además tantos flashes lo mareaban, cómo pudieron entraron al salón de fiestas, la madre de Haruto sostenía uno de los brazos de su hijo y Junkyu el otro, se fueron a sentar a una mesa para esperar al señor Watanabe.

- Junkyu hijo hace tanto que no te veía, ya ni siquiera vienes a casa.- dijo la señora Kim lo suficientemente alto para que la gente alrededor escuché.
- querida pero que dices, si quieres ver a tu hijo siempre eres bienvenida a nuestra casa.- dijo la señora Watanabe sin saber que lo que dijo la madre de Junkyu era con afán de molestarlo.
- es verdad, pero he estado algo ocupada.
- es entendible, Haruto y Junkyu no tienen tiempo ni para ellos mismos, de la universidad se encargan de observar el mundo que les espera en nuestras empresas, espero que lo entiendas.

Las personas que habían comenzado a hablar se callaron tras escuchar la explicación de la mujer con más  poder en esa fiesta, le dieron la razón sus empresas eran enormes seguro que había mucho que aprender.

- m-madre un gusto verte, lo siento por no ir a casa pero realmente me ocupo mucho.- dijo Junkyu lo más calmado posible intentando no temblar.
- descuida querido, entiendo.
- ¿y Mina?.
- debe de estar por ahí hablando con unas amigas.
- oh.- Junkyu ya no sabía que mas decir.
- hermanito querido, es bueno verte, y... Vaya hasta que te vistes bien, siempre solías usar ropa un poco inadecuada.- menciono Mina llegando dándole palmadas en la espalda.
- Mina querida cada quien tiene un gusto diferente por la ropa, además eso no te define, por ejemplo Haruto, su estilo es muy diferente y no por eso deja de ser menos, de igual manera pronto será el ceo de nuestra empresa y vestirse como a él le gusta no afectará en nada.- comento la madre de Haruto.
- oh cuánta razón tiene, lo siento hermanito ya sabes que a mí me encanta el mundo de la moda.
- ss-si no hay problema, te entiendo.
Ambas familias quedaron sentadas en la misma mesa, más tarde llegaron ambos señores de familia comenzado una amena conversación, la fiesta había ido bien aunque Junkyu y Haruto se estaban aburriendo bastante.

Haruto se recargó en el hombro de Junkyu y cerro los ojos, Junkyu era muy cómodo y tenía un olor a flores que lo relajaban, Junkyu también recargo su cabeza en Haruto pues tenía demasiado sueño, su madre se dio cuenta y sonrió enternecida, sabía que los chicos seguramente se aburrían pero no era momento para dormir,
Por otro lado Mina tomaba con fuerza su servilleta haciendo un puño con su mano.

- hijos no es hora de dormir.
- pero mamá Junkyu es muy cómodo.
- entiendo pero podrán dormir en casa.
- lo siento, de verdad Tengo sueño.- se disculpó Junkyu.
- ya no falta mucho para irnos, esperen un poco más.
- bien.- Haruto se sentó bien dejando la comodidad del hombro de Junkyu de lado.

- buenas noches.- saludó un hombre bastante joven con al parecer su esposo del brazo.
- yo sé que me conocen pero me presento, soy Park Chanyeol un gusto, este es mi esposo Kyungsoo.
- buenas noches, un gusto señores Park.- saludó el padre de Haruto.
- disculpen el atrevimiento pero la verdad mi esposo y yo estamos interesados en algo
- claro adelante...
- saben que nuestra empresa es un icono en la moda y la verdad para este año estamos en busca de nuestro modelo o modelos.
- entiendo.
- estuvimos observando al chico de aquí y quisiéramos preguntarle si aceptaría ser el modelo principal.- dijo Kyungsoo hacia Junkyu.
- ¿Yo?.
- a él no le gusta la moda, pero a mí sí y yo con gusto aceptaría firmar con ustedes.- saltó Mina, obviamente no iba a permitir que su hermano fuera el modelo de esa empresa de prestigio.
Ambos Park la miraron y se miraron ellos entre sí.

- haber date una vuelta.- pidió Kyungsoo y Mina obedeció.- pues no estás mal pero no eres lo que buscamos, él chico de ahí es realmente perfecto.
- y-yo ¿Están seguros?.
- Claro, ¿Pudo saber tu nombre?.
- Junkyu, anteriormente Kim Junkyu, ahora Watanabe Junkyu.
- un gusto entonces ¿Quisieras trabajar con nosotros?.
- y-yo....- Junkyu miro a sus suegros y a Haruto, ellos eran su familia ahora y necesitaba su aprobación.
- oye no estaría mal, podrías comenzar con eso Junkyu, en un futuro serás más reconocido y eso le haría bien a la empresa, Haruto y tú estarán al mando para ese entonces.- opinó su suegro.
- exactamente es una gran oportunidad, aprovéchala hijo.- ánimo su suegra.
- anda Kyu si tú quieres acepta.
- pero últimamente estoy algo ocupado.
- oh no te preocupes por eso, nosotros nos acomodamos a tu tiempo.
- ¿Entonces?.- preguntó Park Chanyeol.
- está bien, lo haré.
- excelente elección, nosotros mismos te buscaremos después para arreglar todo.
- gracias a ustedes por la oportunidad.- agradeció Junkyu aunque no sabía nada sobre modelaje y esas cosas pero lo intentaría.
- realmente brillaras en este mundo.- aseguró Kyungsoo antes de marcharse.
La familia estaba Feliz o al menos la familia Kim eso aparentaba.