Bakugou Katsuki
Eiji: 6 años
Kazui: 2 añosVeía la televisión y cuidaba de los niños
Kazui estaba parado, tomando su biberón el mismo, mientras Eiji solo estaba coloreando.
No pude evitar estornudar, así que el sonido que hice asustó a Kazui, asiendo que cayera boca arriba sobre la alfombra y Eiji salto del susto.
Todo fue demasiado rápido y tenía a ambos niños mirándome fijamente, Eiji se reía a carcajadas por su hermano, mientras este se levantaba como si nada e iba a recoger su biberón
Kazui finalmente se levantó y se acercó a mí, mostrando una sonrisa
—¿Qué?— Le pregunté, quien me daba su biberón y volteaba a ver a su hermano que aún se reía
—¡Ma!— Señaló a su madre, quien se acercaba a la sala.
—Te llegó un paquete— Me entregó la caja sobre, para levantar a Kazui del tapete de juegos frente a mi.
Abrí el paquete.
—¿De qué se trata?— Pregunto, acercándome curiosa a ver que había comprado.
—Kirishima vio esto en internet y dijo que funciona— Y finalmente saco el producto que venía dentro de la caja sellada de cartón
—¿Qué es eso?— Pregunto confundida al ver la caja con una ballena pintada en ella
—Para Kazui, parece ser una ballenera que lanza agua y tiene luces. Leí en un artículo que si hacemos divertida la hora del baño, el no se negarían. Mira— Encendí el juguete y al instante llamó la atención de Kazui.
—Supongo que tienes algo de razón— Dijo al ver como hacía cambiar drásticamente el estado de ánimo del mocoso a uno más feliz.
—¡Hola!— Los viejos aparecen de vez en cuando, sin avisar, como si mi casa fuera su maldito restaurante personal
—¡Abuela, Abuelito!— Pero mis hijos siempre son repletos de juguetes, ropa o útiles, así que no podía mantenerlos lejos o mis propios mocosos me odiarían
—Bienvenidos, pasen por favor. La comida casi está, pero antes bañaré a los niños, puede tomar asiento donde guste— Y a mi esposa le agradan
Realmente creí que era una buena idea lo de comprar juguetes para la hora del baño, que no tenía nada de mal, eso fue hasta que se salió de control
—Cara de Angel, es suficiente— Dije con firmeza al pararme en la puerta del baño
—¿Qué?— Preguntó incrédula
—¡Esto!— Señale la bañera que estaba repleta de juguetes —Esto es un baño, no una sala de juegos—
—Vamos, solo mira a nuestros niños, ellos están felices— Trato de defenderse, pero debía poner un alto
—¡Me gusta mucho bañarme ahora!— Grito Eiji
—No más juguetes mujer— Sentencie
—Bien...— Y al fin lo acepto
—Oí, miren lo que compre— La vieja apareció, abriendo una pequeña caja del que saco una pequeña tortuga
Le dio cuerda al juguete de plástico y lo dejó dentro de la bañera —Nada solo— Dijo lo que veíamos exactamente
Los niños chillaron de emoción
—¿Qué me ves, mocoso?— Preguntó la bruja de mala gana al sentir mi mirada y mi silencio de desaprobación
—Es el último ¿Entienden?— Remarque y mi esposa asintió
Al salir del baño... —Es muy bonito— Logre escuchar la adulación de ella al juguete de la bruja.
—Eiji, comete las verduras también— Mande al ver que el mocoso las estaba dejando de lado
—¡Pero no me gustan!— Se quejó
—Cómelas o no habrá helado— Y con eso termino por incluirlas
—¿Tienes sueño, Kazui?— El asintió a lo que le dije con la cara completamente adormilada
—Termina de comer y te llevaré a la cama— Solo asintió y siguió comiendo, aún con los ojos cerrándose de vez en cuando
Solo lo descuide un segundo para ayudar a Eiji a cortar su carne cuando...
—Oh, se quedó dormido, pobrecito se estaba muriendo de sueño— Comentó la bruja quién estaba comiendo con nosotros
Gire a verlo y grande fue mi sorpresa al ver que estaba completamente dormido sobre su plato limpio de comida, no parecía correr ningún tipo de riesgo, pero me apresuré a levantarlo.
Limpie su rostro con una toalla húmeda y lo lleve a acostar a su cuna, parecía ser que ya nada la iba a despertar.
—¿A dónde fue ella?— Pregunté por mi esposa
—Dijo que iría a tomar un baño— Respondió el viejo
Gire a ver a Eiji, quién estaba sentado sobre las piernas de su abuela, atento a la televisión.
Salí silenciosamente de la sala y subí escaleras arriba, entre a la habitación y tome mi ropa y así entre al baño.
—¿Qué haces aquí?— Pregunto mi esposa divertida, quién ya estaba dentro de la bañera, llena de espuma
—Los niños están con la bruja— Le respondo
Ella reía mientras me veía desnudarme para entrar a la bañera con ella.
Por un rato hubo risas, mimos, besos y la cosa comenzó a subir de tono, siempre cuidando el volumen de la voz para no ser descubiertos, sin embargo...
—¡Mami! ¡Ma!— La voz de nuestro bebé y el verlo parado tras la puerta del baño nos cayó como agua helada
—¿Por qué mierda no cerraste la maldita puerta?— Me susurro molesta
—Kazui, mi niño— Su madre se alejó de mí para atender de la manera más disimulada al pequeño
—¡Pato, pato!— Kazui mostró el juguete y se acercó a su madre
—Oh, es verdad tus papis no pueden bañarse sin él patito de hule ¿Verdad? Muchas gracias mi dulce bebé— Ella tomó el juguete
El niño solo sonrió y solo salió de la habitación cerrando la puerta tras de el.
—Al menos ya sabe cerrar la puerta, te dije que tantos juguetes eran malos— Comente
—Tú— Me señaló muy molesta y avergonzada por tal escena —¡Fuera de aquí, ya!— Y como era de esperarse me corrió
Desde aquel día ella disminuyó el número de juegues con los que se pueden bañar, con la idea de ir disminuyendo el número hasta que no los necesiten más a la hora del baño
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¿Cómo criaría a un Bakugou? (Bakugo Katsuki)
FanficEl primer bebé siempre es difícil o eso es lo que dicen, pero ¿Te imaginas criar a un bebé Bakugou? No hay duda de que son hermosos, pero ¿Qué hay del carácter explosivo que heredan de su protector y explosivo padre? Toda una aventura que no debes p...