Bakugou Katsuki
Eiji: 7 años
Kazui: 3 años—Solo ve, no tienes porque preguntarme si puedes o no ir— Respondí a la tonta petición que había hecho mi esposa.
—¿Enserio? Pero te quedarás solo con los niños— Dijo ella.
—No me subestimes, son solo niños, será pan comido— Debatí ofendido de que pensará que no podía hacerlo solo.
—¡Ah, Katsuki, no sabes cuanto te amo!— Gritoneo mi mujer, saltando sobre mi en un exagerado abrazo y dejando un millar de besos sobre mi rostro
—No grites, despertarás a los mocosos— Recrimine y ella bajo la voz, con una enorme sonrisa en su rostro.
Así fue como inicio todo esto, se suponía que solo sería Kazui, Eiji y yo, podía manejarlo, al final de cuantas no eran niños problemáticos, television, juegos, colores, pizza y estarían conforme, sin embargo todo se torció cuando la puerta de mi casa fue golpeada y abri la puerta con Kazui en brazos.
—¡Hola, tío, papá de Bakugou!— Exclamó el hijo del idiota en el instante en que abrí la puerta.
—¿Qué demonios hacen aquí?— Dije al ver tres adultos idiotas parados frente a mi puerta, cargando a sus crías.
—Bueno, ya sabes, las chicas se fueron de vacaciones con tu esposa, nos quedamos solos con los niños y... necesitamos tu ayuda— Dijo Kaminari, quién tomaba la mano a un mocoso igual que él, solo que de cabello Marín como el de Jiro, pero llevaba la misma marca en el cabello que su padre, solo que de color amarillo.
—¿Mi ayuda? ¿En qué?— Pregunte esperando cualquier cosa de este trío de tontos.
—Si, bueno, no sabía cuántas cucharada de fórmula se le debe poner al biberón de mi bebé, así que llame a Kaminari y tampoco supo, después llame a Kirishima y él tenía el mismo problema, así que decidimos venir a preguntarte— Respondió Sero, haciéndome ver que jamás dejarían de ser idiotas.
Sin embargo mientras él hablaba había dos niños completamente iguales, seguramente gemelos de cabello negro, que se sujetaban de su pantalón, escondiéndose detrás de él, y no era todo, pues el cintas traía una bebé de cabellos azules entre brazos.
—¿Cómo no van a saber? Kirishima, tienes dos malditos hijos— Respondí sin poder creer su nivel de incompetencia, dirigiéndome al último de ellos, quién traía a su bebé en una cangurera y tomaba la mano de Haru, quién era el único niño que me veía con entusiasmo.
—Pero Mina siempre prepara los biberones, yo solo se los doy, por favor ayúdanos hermano— Fue la respuesta del pelo de mierda.
—Solo dos cucharadas de fórmula y que el agua no esté tan caliente, ahora largo de mi casa— Estaba decidido a cerrar la puerta y deshacerme de ellos
—¡Espera! Aún tenemos otras dudas— Sero detuvo la puerta con necesidad de ayuda.
—Para eso existe internet, largo— Respondí, tratando de cerrar la puerta una vez más, pero esta vez me detuvo la voz de uno de mis hijos.
—¡Tío Kirishima!— Exclamó Eiji emocionado detrás de mí.
—Eiji ¡Hola, campeón!— Kirishima tomó la oportunidad al instante.
ESTÁS LEYENDO
¿Cómo criaría a un Bakugou? (Bakugo Katsuki)
Hayran KurguEl primer bebé siempre es difícil o eso es lo que dicen, pero ¿Te imaginas criar a un bebé Bakugou? No hay duda de que son hermosos, pero ¿Qué hay del carácter explosivo que heredan de su protector y explosivo padre? Toda una aventura que no debes p...