Capítulo 7: escapada.

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Charlotte salió de urgencia, por lo que me tocó volver al aula de onceavo, ya que yo soy su encargada. Todos los años, se hace una votación, en la que los alumnos deben votar a un profesor de los que tienen ese año para que sea su representante durante todo el año. Es decir, quedarse vigilándolos cuando falta un profesor, recibir retos, organizar eventos, excursiones y muchas cosas más, como acudir en caso de problemas. Claramente el encargado puede ser designado en un solo curso.

Entré y bufaron a coro, no estaban muy contentos con el hecho de que les haya dejado tarea.

-No hace falta que lo digan, sé que me extrañan constantemente. –dije en un sarcasmo que ellos comprenden. –Debo comunicarles que Charlotte no va a volver, al menos por hoy. No pregunten qué pasó porque ni yo sé, ¿Zach? ¿Sabes algo?

-Todavía no, ya le pregunté a mamá.

-Bueno, no se quejen por mi presencia, ustedes me eligieron a principio de año.

Tenían poco más de una hora libre, algunos jugaban con su celular, otros adelantaban trabajos y estudiaban, y otros tantos platicaban conmigo.

Casualmente la profesora que entraba era Carla, así que tuvimos una conversación mientras el resto silbaba a nuestras espaldas pidiendo un beso.

-¿Te falta mucho para salir? –Le pregunté.

-No, tengo cuarenta minutos con ellos y estoy libre. ¿Por qué?

-Porque quedé en almorzar con Brianna, en su casa, y te preguntaba si ibas, para avisarle si vas.

-Claro que voy, quiero ver a Francis, ¿tú ya te vas?

-Sí, pero te espero y nos vamos juntas.

-¡BESO! ¡BESO! –Gritaban de fondo. Los miré revoleándoles los ojos, y cuando gire mi cabeza al frente, sus labios me impactaron y sus manos tocaron mi rostro.

Brianna se sorprendió y alegró mucho al enterarse que las cosas habían mejorado con Carla, sobre todo porque ellas se llevan excelente.

Francis estuvo un buen rato conmigo, luego y bajo insistencias se la pasé a Carla, que estaba a nuestro lado.

-¿Tienen planes para el fin de semana? –Nos preguntó ella.

-Nos olvidamos de hablar de eso, mis padres tienen una casa en Lake Isabella, en las montañas, ¿quieres que vayamos allí o vamos a otro lado? Tendría que hablar con todos en el caso de que quieras que vayamos a la quinta.

-O si quieren pueden ir a nuestra casa de San Bernardino, no creo que June vaya a ir, está muy enfocada en su carrera.

-¿Quién es June? Y si pides mi opinión, me encantaría Lake, pero es tu decisión Mad.

-Josh salió del closet como mujer trans, ahora se llama June, y sí, me encanta la idea, si quieres podemos irnos ahora a casa, recuerda que son las tres de la tarde, y mientras tú preparas las maletas yo voy por comida, llegaríamos cerca de la hora de la cena.

-Bien, adiós Brianna, adiós pequeñita. –Besó su cabeza. –Hasta la próxima Mr. Grant. –Esa es la forma en la que todos nos referimos a la pareja de Brianna, ya que Gary es un nombre horrible.

-Adiós. –Dije en general, mientras besaba a Francis.

Salimos de la casa y nos dirigimos a la nuestra, mientras tanto llamaba a papá para preguntarle si ellos irían a la cabaña este fin de semana, al recibir una respuesta negativa pedí las llaves para poder ir juntas.

Carla se quedó preparando las maletas, mientras tanto, yo salí a buscar las llaves y a comprar algo de comida. Claramente mis padres me preguntaron con quién iría, y se alegraron bastante al enterarse de la nueva oportunidad.

Más de lo que pensamos llegar a ser (Más que compañeras 2) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora