Capítulo 10

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Cuando llegaron a la gigantezca mansión oculta en el bosque, un montón de gente las estaba esperando, todos sonrientes y con vasos llenos de bebidas.

—¡LENA LENA LENA!—todos gritaban, era la hija de la alfa, estaba de vuelta y eso era casi una revolución.

Lena los miraba, no reconocía a nadie , por supuesto que eso era normal porque ella fue llevada lejos siendo muy pequeña. Aún así la animaba que tanta gente celebrara su regreso.

—¿Esto es por mí?—le preguntó a su madre mientras su mano sostenía celosamente la cintura de Kara, habían personas mirándola, lo sentía, y lo olía.

—Sí mi amor así es—sonrió Lilian guiándolas a su despacho—Pero ahora debemos hablar antes de cualquier celebración, todos celebran porque será tu ritual y debe hacerse en la mayor brevedad posible.

Dentro del despacho de Lilian estaba Lex esperándolas.

—Hermanita, bienvenida de regreso.

Lena simplemente lo ignoró—¿Bien madre entonces qué hago? Ya quiero volver a casa con Kara y hacer el amor.—dijo sin ningún tipo de pena y a Kara le cambiaron los colores , sobre todo cuando Lex se fijó en ella.

—Así que esta es su compañera...—dijo acercándose a mirarla bien.

—Atrás, pelón—dijo Lena enviándolo directo a la pared de un manotazo—Me enviaste lejos, lo sé, por tu culpa mi vida fue un infierno.

—Ya pero yo no le dije a mamá que te matara, supéralo Lena—suspiró.

Lena lo agarró del cuello transformándose—Viví como un perro por tu culpa—abrió sus fauces y Lex bajó la cabeza en sumisión.

—Lo sé...lo sé...

—Lena déjalo—suspiró Lilian y Kara también hizo lo suyo abrazando a Lena para calmarla, algo que Lilian agradeció internamente.—Céntrate en tu pelea, luego le das su merecido.

—Bien, vamos.—dijo y miró a su pareja, Kara la calmaba, la hacía sentir feliz y fuerte.—Ganaré.

Lilian la miró con admiración, ella no tenía duda alguna de ello. Salieron y enseguida toda la manada cesó sus actividades, hicieron silencio y la Alfa comenzó a hablar.

—Como todos saben, mi hija Lena ha vuelto, y por ello también debe tener su lugar en la manada—todos asentían atendiendo.—Pues ella luchará hoy por un puesto en esta manada, como hemos hecho todo.

Todos aullaron al unísono, la pelea sería por mucho la más emocionante.

—Las reglas son claras Lena, a menos que uno se rinda es hasta la muerte.

Lena asintió y le dió un beso suave a Kara—Ganaré, lo véras—dijo sonriente.

—Kara, ven aquí—dijo Lilian señalando a su lado, John traía un asiento lujoso—Siéntate conmigo cariño.

Kara obedeció a la Alfa y miró a Lena que le sonreía de forma tranquila.

—Y ahora, que pase Erik— Erik, el hermano de Samantha Arias también debía hacer su prueba, pero a diferencia de Lena, Erik tenía otras intenciones. El chico no era exactamente malo o bueno, sino demasiado competitivo, a los extremos, eso lo hacía algo sádico a la hora de sus peleas.

—Prepárate para rendirte hija de la Alfa—sonrió Erik quitándose la ropa.

Lena no dijo nada, sólo lo observó mientras se desnudaba delante de todos y ambos procedían a transformarse.

Sam miraba desde la salvaguarda como todos.

Lena es enorme, Erik es grande, pero ella ha luchado toda su vida mientras él sólo alardea, le costará caro.

Wild CreatureDonde viven las historias. Descúbrelo ahora