mamá de el hijo de mi jefe {Narusasu / Omegaverce}

🥀 CAPITULO 21🌹

La ya casi familia Uzumaki Uchiha se encontraba comiendo helado en uno de los muchos parques de la ciudad, los niños compartían sus helados al igual que los adultos, era una tarde llena de paz o lo era hasta que un par de niños se les acercaron.

—Hola, mi nomble es Yamato y el es mi plimo Mitsuki.

—Hola mucho guto yo soy Menma y el es mi hermano Toma.

—Mucho gusto, Menma ¿podemos jugar con ustedes?.

—¡Por supuesto!.

—¡Que bien!, Vamos a los columpios— Yamato y Mitsuki agarraron cada quien una de las manos de Menma y se lo llevaron a los columpios, Toma se puso un poquito celoso y se los arrebato llevándolo el a los columpios, los dos pequeños primos peli-celestes no se rindieron buscando la oportunidad de quitárselo de nuevo y así pasaron la tarde discutiendo por Menma, y un padre celoso mirando todo desde la banca de donde Sasuke no le permitía pararse.

La noche llegó y los cuatro fueron a la feria, Sasuke les compro palomitas a los niños incluyendo a Naruto quien quería ser mimado por el azabache también, se fueron a sentar a una de las pocas bancas que habían en el lugar para estar más cómodos.

—Niños escuchen muy bien, este lugar es muy grande así que no pueden alejarse de su padre ni de mi entendieron.

—¡Si!

—Eso también va para ti Naruto, tu eres el primero en distraerse con cualquier cosa.

—Note preocupes Sasuke no va a pasar nada malo, yo los voy a cuidar.

—Eso espero.

—Mami ya teminé, ¿podemos ir a los juegos?.

—Claro Menma, solo tenemos que esperar a tu hermano y a tu padre.

—Esta bien.

—Ya ves rubio po tu cupa Menma no puede ir a jugar.

—¿No oíste a Sasuke?, También es tu culpa pequeño y por si lo olvidas tu también eres rubio.

—Si pero yo soy ma bonito.

—Olvídalo Menma no los esperaremos, vamos al carrusel.

—Si mami, ¿Me cargas por favor?.

—Claro que si pequeño, ven— Sasuke cargo a Menma y se fue sin siquiera mirar a ver a los rubios que seguían sentados en la banca sin saber que hacer.

—Todo es tu culpa rubio.

—Si si lo que diga el joven príncipe.

—Pala ti soy su majestad el plíncipe.

—Si, y yo soy el mago de Oz

—Claro, lo viejo ya lo tlaes.

—¡Oye!
  

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Tsunade no se iba a dar por vencida tan fácilmente, no podía permitir a un omega varón en su familia, mucho menos si tenía algo que ver con ese sujeto que tanto odiaba.

Si logro separar a su nieto de la madre de esos niños podía hacer que se separe de ese repugnante omega.

Salió de su enorme mansión y se dirigió a la casa de los Hyūga, en donde la esperaba el señor Hyūga junto a su esposa y sus dos hijas.

—Digame a qué se debe su visita señora Namikaze.

—Porfavor no finja no saber nada, usted sabe perfectamente cuál es el motivo de mi visita.

—Si lo sé, y dígame, ¿ya resolvió el problema?.

—Aún no, por eso e venido, mi hijo y su esposa no me permiten acercarme a mi nieto y mucho menos a sus cachorros, y todo por ese maldito omega.

—Y entonces que hará con la promesa que nos hizo, usted dijo que su nieto se casaría con mi hija.

—Y así será se lo prometo, solo deme algo de tiempo, yo misma resolveré el problema.

—Eso espero.

—Por ahora les aré creer que no me meteré en sus asuntos pero luego consideran mi furia.

—Me párese bien, solo espero que no suceda lo de la otra vez, no soportaría que su nieto tenga otro hijo con alguien más.

—Y no lo habrá, esos dos niños solo fueron un error que paso mientras yo estaba ausente eso es todo.

—Solo voy a creerle si me lo demuestra, deshágase de ese omega y de esos niños o sino me temo que dejaré de ser socio de la familia Namikaze.

—Asi será señor, por ahora me retiro  tengo algunas cosas que hacer, vendré a visitarlo pronto.

—Espero que cuando regrese lo aga  con buenas noticias.

—por supuesto.

Hasta aquí el capítulo de hoy lamento mucho la tardanza e estado ocupada últimamente seguiré escribiendo cundo pueda.

CONTINUARÁ...