Captura

577 70 5
                                    

-Me voy- Pete se acerco a besar la frente del pequeño que apenas despertaba para después ir a darle un beso corto a su novio.

-Ve con cuidado ¿Quieres que vaya por ti?- pregunto acompañándolo a la puerta.

-No, descuida, hoy trabajaré doble turno, mejor duerme temprano a Venice, últimamente lo dejas despierto muy tarde- lo regañó.

-Bien, bien... te veo en la noche entonces- se dieron otro beso antes de separarse.

Pete había cambiado turno con un compañero para tener libre un día más en el fin de semana, habían estado hablando de visitar al padre de Vegas. Al vivir algo lejos no querían prisas, se irían con calma un día y podría descansar al siguiente de regreso.

La hora en que el salía caminado hacia el trabajo era muy concurrida. Estos días sentía que lo seguían pero al ver tanta gente, solo se decía que estaba exagerando qué era normal si alguien iba en su misma dirección. Casualidad.

Llego al hospital saludando e iniciando su turno como todos los días sin mayor diferencia.

Vegas termino de arreglar a Venice para llevarlo al jardín de niños y dirigirse a su trabajo después. Aun no se sentía seguro de llevar a Pete con su padre pero le había insistido tanto que no pudo decir que no.

El día laboral termino, recogió a Venice del jardín de niños y regresaron a casa sin mayor retraso. Envío un mensaje de texto a Pete por si quería algo de comida pero su novio respondió qué no era necesario. Se dedico a revisar algunos materiales para su clase del día siguiente.

-Estoy exahusto- se quejó sentándose por primera vez en el dia.

-Tu aceptaste cubrirlo- le dijo una compañera.

-Ya lo sé, tenia que hacerlo, necesito mi día libre extra- soltó un suspiro antes de escuchar como era llamado por un médico.

Le dieron indicaciones para hacer una curación sencilla, algún paciente que se había cortado con un cristal.

Abrió la cortina con su carrito lleno de material y sorpresa fue la que se llevo reconociendo al par frente a él. Paso saliva con fuerza reconociendo algunos moretones en los brazos del más joven y un trapo lleno de sangre en su mano.

-No sabia que trabajabas aqui- le dijo el mayor que lo miraba de pies a cabeza- Has cambiado Pete-

-Me dijeron que necesitabas curacion- le dijo directamente a la otra persona- voy a desinfectar primero- saco un par de guantes después de dejar el material listo.

-No me ignores, te estoy hablando- volvió a tratar de llamar su atención.

-Estoy trabajando señor- respondió sin mirarlo, dedicado a ver que tan profunda era la herida -No es tan grave.. pero debe cuidar desinfectarla ¿Qué te pasó?- le pregunto a quien estaba herido.

-Se me cayo un vaso en casa- le dijo en voz baja- soy.. muy torpe-

Pete levanto la mirada para verlo a los ojos, si, era el mismo chico del supermercado, aunque no se veía para nada igual de feliz qué ese día. Reconocía la confusión y dolor qué una vez él mismo sintió.

-Listo- termino de poner un vendaje- Debes lavar con agua y jabón, ademas de dejar la herida respirar por momentos en el día- tiro el material utilizado para despedirse con una sonrisa pequeña- Ten cuidado, pudo haber sido más serio-

Salio de ahí y fue al baño a lavarse el rostro. De tantos hospitales tuvieron que venir  este. Soltó un suspiro tranquilizandose. Era triste ver que esos ciclos se repetían, ese chico ya estaba perdido en esa relacion, justificando la violencia, igual que él.

InesperadamenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora