Despertar

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Amaneció y Pete seguía sin dormir absolutamente nada. Ambos hermanos habían salido de cirugía, controlaron las hemorragias pero estaban claramente débiles por la pérdida de sangre. De momento estaban inconscientes, no sabían con certeza cuanto tardarían en recuperar la consciencia. Lo único que le dijeron a Pete era qué el tipo de sangre de Vegas era difícil de conseguir para hacerle transfusiones. Macau tenia uno más regular, a él lograron estabilizar ese punto más rápido, aunque también seguía inconsciente.

Los tenían a los dos en una misma habitación, con las camas separadas solo por una cortina. Él se encontraba con Venice dormido en su pecho, el pequeño debía estar agotado mentalmente, no despertó ni una vez en toda la noche.

-¿Aun nada?- pregunto Chay entrando a la habitación con ropa de civil, había terminado su turno y fue a casa a cambiarse. De paso prestarle algo de ropa a Pete para que se cambiara- Toma- le dio una bolsa.

-Gracias..- la tomo dejando al pequeño con cuidado en el sofa mientras se ponia de pie para entrar al baño- No, siguen los dos inconscientes-

Se cambio rápido para salir con ropa limpia puesta, encontrando a su amigo con bastante preocupación en su rostro a un costado de Macau.

-Tienes que despertar pronto, tu y yo tenemos asuntos pendientes- susurro en medio de algunas lágrimas.

Pete se acerco a la cama de Vegas, revisando todos los cables y las vías de medicamento.

-Vamos amor, no quieres que Venice te vea así, él necesita a su papá- se permitió llorar un poco mientras acariciaba su cabello.

Ellos no eran tontos, Pete ya era un profesional y Chay tenia al menos comprensión de lo que leía en las notas médicas. Era malo, perder sangre era una de las cosas más peligrosas por todo el daño que representaba al resto de los órganos la mala oxigenación. Querían mantener la esperanza, porque aparentemente los estabilizaron pronto pero sabían que el riesgo de no despertar o de tener secuelas estaba ahí.

Regreso a sentarse con Venice abrazándolo con fuerza, cuando entro el medico a cargo.

-¿Hubo algún cambio?- pregunto Pete al verlo revisar los expedientes.

-Tengo resultados de laboratorio.. Macau se ve muy bien, a él logramos estabilizarle más rápido con las unidades de sangre, creo que solo su cuerpo está cansado, la presión esta bien.. deberá despertar pronto- Chay asintió aun en medio de sus lágrimas.

-¿Y.. él?- pregunto con algo de miedo Pete por lo que escucharía.

-Tu novio se llevó la peor parte y lo sabes, entiendes lo que te quiero decir. Perdió demasiada sangre, solo lo estabilizamos, tiene medicamento para que su presión no baje pero sabes que esto no es tan preciso Pete. Casi entró en choque en el quirofano.. en los estudios aparentemente sus riñones e hígado no tuvieron daño, tampoco hubo preinfarto, todo indica qué esta bien, el detalle es...- soltó un suspiro mirandolo- qué tu sabes que falta de oxigenación puede dañar su cerebro, no hay forma de saber eso hasta que recupere la consciencia-

-¿Cree que.. tarde mucho? ¿Cuanto tiempo podemos.. esperar?- pregunto preocupado.

-No lo se, te digo su organismo parece funcionar bien, todo depende de su cerebro, pueden ser horas, días...- se acerco para apretar su hombro en señal de apoyo- Esperemos lo mejor, si para mañana no despierta, intentaré qué autoricen una tomografía para ver si distinguimos reacción en su cerebro de algún modo-

-Entiendo- asintió intentando calmarse.

Se despidió de ellos antes de salir de la habitación. Segundos después la puerta volvió a abrirse dejando entrar al padre de los dos hermanos, Pete lo reconoció y sinceramente sintió odio, en su búsqueda de poder y dinero con sus negocios turbios fue como termino esto en tragedia.

InesperadamenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora