Capítulo XXII. Las primeras acciones de Medusa.

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Emi.

Mire a mi alrededor, mientras sumergida en el agua de la gran bañera tipo yacusi, llena de espuma dejaba que mis músculos se relajasen, tenía una copa de vino junto a la bañera mientras un hilo musical de baladas rock de los ochenta, ambientaba la escena que quise reproducir cuando vi esa gran bañara en esa habitación de lujo del hotel.

La verdad es que soy un alma clásica, pese a que tengo veinticuatro años, pero mi padre me anexiono desde pequeña hasta su muerte, en la música, las series y el cine de esos maravillosos ochenta y noventa, para él la mejor época de todas.

Me volví, tras su muerte, adicta y firme seguidora de su dotrina, como una forma de compartir con él, eso, ya qué ya no estaba mi lado.

Esto hizo que, en mi adolescencia, mis amigos se rieran de mí, y me llamaran "alma vieja", a mí en el fondo, no me importaba, los insultos en mi casa eran aún peores.

Así que cuando vi esa gran bañera inmensa, me sentí como Vivian Ward, en el Hotel Beverly Wilshire, dentro del yacusi, antes de que Edward Lewis le ofreciera pasar un fin de semana con él a cambio de dinero. Las dimensiones de la "piscina" de ese baño, era inmensas, así que ni dude en hacer una copia de la escena en esa suite.

-" Pretty Woman, todo un clásico."- dije en alto, mientras cerrando los ojos, me apoyaba en la tolla que tenía de reposacabezas, para tarar la balada de Aerosmith, Dream On, que salían por los altavoces multimedia que tenía estratégicamente escondidos, en ese maravilloso baño.

No quería pensar en lo que había vivido hace una hora, eso era mi antigua vida, ahora sólo disfrutaría mientras pudiera de mis dos años de matrimonio, y luego seguiría con mi vida, sobre todo de lo que iba disfrutar del sexo, o mejor dicho de las relaciones matrimoniales, con mi esposo.

- "Bueno Vivian, aunque tu tuvieras mucha más experiencia que yo, si tu Edward, era como mi Perseo, comprendo que dijeras que sí al trato, aunque sea por un tiempo, un fin de semana o dos años, vale la pena pasar por esta experiencia, sólo espero que lo que pasó en ese avión no haya sido jugadas de mi imaginación, porque si con este hombre la relaciones son así, este matrimonio será muy... muy como decirlo..."- mi conciencia me interrumpió el pensamiento.

- "¿Y si te pasa como le pasó a Vivian, y te enamoras de él?"- ese pensamiento hizo que abriera los ojos de golpe, y me incorporar como un resorte, sentándome dentro de la bañera.

- "Maldita conciencia, ¿Por qué me jodes un momento tan especial? Maldita seas, hija de ..."- comencé a insúltame a mí misma en italiano en voz alta, estaba tan enfada por ser tan estúpida por dejar colar ese extraño pensamiento en mi mente, que no me había dado cuenta de que, en la puerta del baño una sorprendida Medusa me miraba mientras me bañaba, salpicando agua por todas partes con ganas de darme dos puñetazos, para ver si así, me dejaba de estupideces.

En uno de estos momentos, vi la silueta de la morena en la puerta del baño, y un poco la vergüenza de que me encontrar así, el cabreo que llevaba, y otro poco la falta de vergüenza y delicadeza de la secretaria hizo que mi parte guerrera se despertara.

La miré y con mi voz guerrera, le dije:

- "Perdona Medu... digo Rihanna, tu jefe no está en estos momentos, así que, si no te importa, voy a seguir nadando en este lago, sino quieres nada más, te importaría cerrar la puerta se va el calor del agua. Y de paso no quiero coger una corriente, ya que si no te has dado cuenta estoy...desnuda."- esta frase parece que la hizo reaccionar en un especial de gestos de enfado, y finalmente tras darse la vuelta salió, pero sin cerrar la puerta, con un movimiento de hombros que denotaba rebeldía.

- "¿Pero de que va esta estúpida?, va me da igual, estoy demasiado emocionada marcándome un Pretty Woman, para preocuparme por la secretaria despechada"- dije y tras rellenarme otra vez la copa de vino blanco, y accionar el mando del yacusi, me dio exactamente igual como estuviera la puerta de baño.

Comprada por la mafia.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora