Devocionales "Amanecer: Paola Ramos"

"La Palabra de Dios nos guía en la oscuridad "

Salmo 119:105

Introducción:

¿Qué es una lámpara y para qué sirve?

Una lámpara o bombilla es un convertidor de energía, cuya función principal es transformar la energía eléctrica en luz.

Utensilio o aparato que, colgado o sostenido sobre un pie, sirve de soporte a una o varias luces artificiales.

¿Que era una lámpara en los tiempos antiguos?

La Arqueología ha recuperado muchas en una gran variedad de formas. La mayoría eran alimentadas de aceite y tenían una mecha. En épocas antiguas no había velas y por lo tanto tampoco candeleros propiamente dichos. En el tabernáculo y en el templo las lámparas eran de oro, y quemaban aceite de oliva.

La luz de la vida

El Salmista comienza con una afirmación que hace del versículo 105, uno de los más conocidos de toda La Biblia "Lámpara es a mis pies tu palabra, y luz para mi senda ". (Proverbios 6:23). Por aquí vemos la naturaleza de La Palabra de Dios: lámpara y luz. Nos descubre, con respecto a Dios y a nosotros mismos, lo que de otro modo no habríamos podido llegar a conocer. El mandamiento es una lámpara que luce y arde con el aceite del Espíritu Santo; es como las lámparas del Santuario y la columna de fuego en el desierto (1° Pedro 1:9). No solo ha de ser luz para nuestros ojos, a fin de que disfruten de un bello panorama, sino para nuestros pies, a fin de que sepamos donde los hemos de poner, y para nuestra senda, a fin de que no nos extraviemos.

El significado de la luz en la Biblia

1° Juan 1:5

Dios es luz, es una metáfora común en la Biblia.

Proverbios 4:18

Simboliza a la justicia como "la luz de la aurora".

Filipenses 2:15

Compara a los hijos de Dios, que son "intachables y puros" como las estrellas en el firmamento.

Mateo 5:16

Jesús uso la luz como descripción de buenas obras.

Salmo 76:4

Dios está rodeado de esplendor.

La Palabra del Señor es una luz que alumbra toda aquella densa oscuridad, y esta puede alumbrar muchas áreas de nuestra vida que para nosotros pueden ser muy inciertas aun:

a) Para alumbrarnos a nosotros mismos

(hebreos 4:12)

¿Necesita ser confrontado todavía en aquellas áreas difíciles para usted? Dios es como ese amigo que nos confronta y nos dice cosas que no queremos escuchar o que nos molesten, aun sabiendo que tiene la razón, ¿Siente que está lleno de amargura, falta de perdón, irascible, es envidioso, orgulloso, egoísta, sin amor a los demás, etc.? El Señor sabe nuestras debilidades y fallos, sabe lo que necesitamos exactamente.

También La Palabra de Dios sana todas aquellas áreas de nuestra vida, en donde hemos sido dañados y, por lo tanto, nos ayuda a crecer cada día más y más.

b) La palabra de Dios nos alumbra todo a nuestro alrededor.

Dardo, también llamada Aguijón y Sting, es una espada ficticia de la novela "El Señor de los anillo", creado por el escritor británico JRR Tolkien, que aparece en sus novelas El Hobbit y El Señor de los anillos. La hoja de la espada Dardo brilla en la oscuridad cuando hay orcos acechando. Esta espada de Frodo tiene un grabado elfico en el acero.

Con la luz por guía, el Salmista promete no descuidarse de la senda que la Ley le muestra, pues esa Ley es la que precisamente le sostiene en medio de su aflicción.

Asimismo, La Palabra de Dios alumbra todo a nuestro alrededor, cuando sentimos incomprensión de las personas a nuestro alrededor, cuando no nos sentimos amados ni valorados, ni aceptados con nuestras fallas y virtudes, cuando sentimos desanimo, ansiedad, tristeza por las circunstancias de la vida por las cuales nos toque pasar, cuando nadie en la soledad de nuestro cuarto ve nuestras lágrimas, pero... Allí está El Señor con nosotros.

Por eso, en La Palabra de Dios está toda la ayuda que necesitamos, pero para eso es necesario acudir a la Palabra de Dios, para así podernos aferrar a sus promesas.

c) La Palabra de Dios nos ayuda a alumbrar a otros en su camino

Y no solo nos sirve para alumbrarnos a nosotros mismos, sino que también, para alumbrar a otros en el camino (Mateo 5:14).

Nosotros vivimos en medio de un mundo oscuro y perverso que, tristemente, no está interesado en escuchar a Dios, pero ¿Sabes? El mundo nos está observando a ti y a mi nuestra manera de vivir, y nosotros somos el reflejo de Dios en este mundo.

Con nuestra luz, podemos alumbrar la vida de las demás personas.

Conclusión

La Palabra de Dios nos dirige en nuestra obra y camino, y el mundo sería indudablemente un lugar tenebroso sin ella. El mandamiento es lámpara que se mantiene encendida con el aceite del Espíritu, como luz que nos dirige al guiar nuestro camino y los pasos que damos en el camino.

Dios te bendiga.