Lluvias de Octubre

32

Contratiempo

Venus

-Creo que voy a vomitar. -menciona Nyx en tanto corre hacia el baño del vestidor.

Enseguida camino detrás de ella y sujeto su cabello.

-No mires. -declara antes de una arcada.

-Nyx, puedo traerte algún medicamento.

-No, faltan 20 minutos para la apertura del desfile.

-Le preguntaré a Green si puede ayudarnos.

-Estaré bien Venus.

-Nyx, solo... -no concluyo la frase porque tomo el celular y le marco a mi asistente.

En cuestión de minutos, Green ya se encontraba junto a nosotros. Para hacer el día aún más desdichado, mi asistente no contaba con ninguna píldora para las náuseas.

-En 15 minutos puedo ir y volver a tiempo.

-Venus, no hay ninguna farmacia cercana.

-Recuerdo haber pasado por una farmacia.

-Está a 10 minutos de aquí.

-Si conduzco de prisa, podré llegar antes de que inicie el evento.

-No podemos arriesgarnos.

-Nyx, todo saldrá bien, solo iré y volveré en un parpadeo.

-Chicos. -menciona Green pero Nyx la detiene.

-Sé que dirás Kaedy, mi respuesta es no.

-Es solo una píldora.

-Chicos. -repite, pero no la observamos.

-Exacto, así que quédate y espera que el desfile inicie.

-No estaré tranquilo sabiendo que estás sentiéndote mal.

-No pien...

-CHICOS. -exclama mi asistente, haciendo que Nyx y yo nos quedemos en silencio.

-Tengo la pastilla. -frunzo el ceño en confusión.- No importa como la conseguí, solo ten Nyx. -llevo los dedos a mi cabello, liberándome del agobio, caigo sobre el sofá y Green sale del vestidor.

-Tenemos que estar detrás del escenario en 5 minutos.

-Estoy algo nervioso.

-No me digas que es tu turno de vomitar. -me mantengo en silencio.- Venus...

-Lumi, necesito que apartes de tu mente ese pesimismo.

-¿Y si no les agrada?

-Tienes arte en tus manos, Nyx. ¿Acaso no te das cuenta?

-Quiero que siempre estés conmigo, que me recuerdes que tengo arte, aunque en ocasiones no logre verlo.

-Podría decir miles de cosas para convencerte pero faltan tres minutos para el evento y seguimos en el mismo lugar. -beso su frente y toma mi mano.

Nos ubicamos en la parte de atrás del escenario, luego de prácticamente salir corriendo y, me coloco en fila. Frente a mí, se encuentran dieciocho personas, en un cálculo rápido y, detrás cinco.
Suelo dirigir eventos y reuniones en la biblioteca, me acostumbro con rapidez al público, así que espero que al pisar ese escenario mis nervios disminuyan.

-Estaré en primera fila, no te apresures en caminar, necesito que los diseñadores logren detallar el atuendo, si te sientes nervioso solo mírame y...

-Nyx. -pronuncio haciendo que se detenga.- Si ellos no notan el increíble trabajo que haces, son unos idiotas.
Y no te preocupes por mí, ¿qué más podría pasar? Solo tropezar y caer a los pies de los diseñadores.

-Debes saber que eso no me reconforta. -levanto mis cejas en una pregunta silenciosa- En realidad sí, equilibrias mis nervios con bromas. -expresa al observar el inicio de la fila y suspira pesadamente.

-¿Qué sucede?

-Es tu turno.