Misión: Mundo De Las Sombras. Cuarta Parte. A Correr Se Ha Dicho

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Por fin, Jade había regresado de quién sabe dónde y estaba mejor que nueva. Parecía como si se hubiera ido a un spa sumamente lujoso y caro, donde la trataron sumamente bien. Estaba transformada como la reina, pero su dolor y enfermedad se habían ido. Además, las alas inmensas se estaban haciendo más y más pequeñas hasta que finalmente desaparecieron.

—Jade: Ay. Buenos días. Que bien que dormí. Me siento mucho mejor.

—Xiao Jung: Qué alivio que por fin volviste. Te cuidé en todo este tiempo. Estuviste dormida y encerrada por cuatro horas. De hecho, diría que casi te mueres. Y te salieron alas y se desvanecieron. Eran inmensas y no pude controlarlas. Casi cubren toda la prisión por su tamaño. Afortunadamente, ya estás bien y tenemos todo listo para irnos.

—Jade: ¿Qué estamos esperando? Andando.

—Xiao Jung: Y recuerda que todavía debemos ir a recuperar la reliquia.

—Jade: Sí. Esto se acaba de poner mejor.

—Xiao Jung: Al menos ya todo está en su lugar.

—Jade: Es hora de irnos.

—Xiao Jung: Salgamos de aquí.

En ese momento, salieron de la celda y, curiosamente, a Jade le daba nostalgia que tuvieran que irse. Cuando llegaban al ascensor y se subían a él, un pensamiento cruzaba la mente de Jade.

—Jade: Si no fuera porque casi me muero, casi hasta echaría de menos este lugar.

Ya habían llegado al ascensor y estaban subiendo por el templo. Sin embargo, sabían que esa calma y tranquilidad no duraría mucho: cuando tomen la reliquia, literalmente, todo el templo volaría por los aires.

—Jade: El ascensor nos lleva solo hasta la sala de vigilancia. Para llegar al techo, tenemos que tomar las escaleras.

—Xiao Jung: ¿Y cuando lleguemos al techo, no podemos tomar el dragón y simplemente irnos?

—Jade: No. Todo el templo está conectado a un sistema de seguridad. Si tomamos al dragón se darán cuenta de eso. Solo nos queda tomar al dragón y salir de aquí de la mejor manera posible.

Por fin en el techo

Por fin en el techo

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—Jade: Llegamos. Ese es, en el pedestal.

—Xiao: ¿No hay forma de tomarlo sin que lo noten?

—Jade: No. Ya estudié todo y esta es la única manera.

—Xiao Jung: Además, hay otro problema que me acabo de dar cuenta. No podremos salir por las escaleras ni el ascensor. Cuando se active la alarma, las puertas se bloquearán.

—Jade: Hay que saltar entonces. Será divertido.

—Xiao Jung: Bueno. Fue un gusto venir a este lugar. Fue un gusto conocernos.

El Regreso De La Reina De La Sombra De KhanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora